THEA

Capitulo 3 • Nuevas identidades

Un sonido de claxon los despertó, al parecer habían llegado a una gasolinera y si había una gasolinera ,debía haber una ciudad a unos kilómetros.

-Debemos irnos- dijo Thea y el chico asintió ,ambos bajaron de la cabina de la camioneta y se dirigieron a una calle la cual daba a la entrada de una ciudad, Thea se tensó al ver el letrero, Broken Arrow .

-¿Qué sucede? -preguntó el pelinegro y Thea negó.

-Nada, vamos- dijo y los jóvenes entraron a la ciudad, iban escondiéndose detrás de los autos y los letreros, los dos jóvenes estaban algo desorientados, Thea había vivido ahí pero resulta que durante los años que estuvo cautiva la ciudad cambió y por eso se le hacía difícil reconocer en donde estaba.

-¿Que buscamos?- preguntó el chico.

-El cementerio- dijo y éste la miró confuso pero no dijo nada, siguieron buscando hasta que el pelinegro la llamó.

- Oye, mira- dijo señalando un letrero que decía "Cementerio ➡" y sin avisar la chica salió corriendo hacia aquella dirección dejando desconcertado al pelinegro- ¡Espera!

Thea había llegado y empezó a buscar desesperadamente la lápida de su abuela hasta que por fin la encontró, ella se arrodilló frente a ésta y leyó lo que decía.

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María Joyce Dantz
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En ese momento se sintió devastada, la gente de la ciudad solo había puesto su nombre y nada más, deseó haber estado con ella en sus últimos momentos de vida ,abrazarla, agradércele por todo lo que había hecho por ella, pero no lo estuvo y no pudo evitar desplomarse en ese instante.

-Lo siento, siento no haber estado ahí abuela, solo quería decirte que te amo y que no te olvidé ,nunca lo haré y lamento que tuvieras que darte cuenta de que soy un monstruo- dijo abrazando la lápida de su abuela mientras lloraba ,el pelinegro estaba parado detrás de Thea observando todo con tristeza.

-No eres un monstruo- habló él y Thea se giró- Digo, no elegiste esto ¿verdad? Yo tampoco.

-¿De qué hablas?  No veo que tengas habilidades- dijo y el chico se acercó a Thea hasta quedar al lado de ella y agacharse frente a la tumba.

-Bueno, eso es porque no te las he demostrado- con un movimiento de mano el chico hizo que un pequeño matorral de margaritas crecieran en la tumba- Eran las flores favoritas de tu abuela ¿verdad? - dijo y Thea lo miró asombrada.

-Como...

-Controlo la naturaleza y leo las mentes, vi que en uno de tus recuerdos a tu abuela le gustaban asi que, se ve mejor ¿no crees?

-Gracias- dijo sonriéndole y el chico se la devolvió, ella se levantó y el pelinegro lo imitó- Debemos irnos, conseguir refugio.

-Si, pero antes deberíamos cambiarnos- dijo viendo que aún llevaban puestas aquellas batas blancas, las cuales ya estaban algo sucias.

Thea miró por todos lados hasta que vió un casa y fuera de ésta había un tendedero con mucha ropa.

-Mira- dijo tomando al chico de la mano y dirigiéndose hacia allá, tomaron cautelosamente las prendas que usarían y se fueron, éstos se encontraban cambiándose en unos baños públicos.

-¿Ya estás lista? - preguntó el pelinegro desde su cubículo.

-Si ¿y tu? -preguntó Thea desde suyo recibiendo un "Sí" como repuesta.