Amigos con derecho (adaptada)

capitulo 53

Sentí la puerta de mi habitación abrirse y luego la dulce voz de mi mamá.

-Si me vienes a decir porque no puedo salir con Justin, por favor vete.-dije intentando sonar lo más calmada posible. Ya estaba pensando en irme de casa otra vez.

-No vengo a decirte eso.-dijo ella sentándose a mi lado.- Vengo a decirte que si puedes salir con Justin mañana, que tu papá y yo te damos permiso.

-Okey, gracias.-dije mirando el suelo.

-Hija.-me llamó para que la mirara.- ¿Me extrañaste aun que sea un poco?

-Aff si mamá.-hice una risita.- Cada vez que las cosas se ponían pesadas con Chaz, pedía Dios que volvieras rápido.- sonreí a la par de ella.- Después de todas las peleas eres mi mamá.

-Y tú siempre serás mi pequeña.-me sonrió con ternura.

Esa noche, casi que ni dormí. Muchas veces he salido con Justin a tomar un helado, o al cine, o a comprar algo y también con sus hermanos pero esta vez era diferente. Lo sabía porque a la hora de pedirme que almorzáramos juntos se había puesto nervioso y ni siquiera sabía a que hora pasaría por mí. Eso me pareció un gesto tierno, no se porque, pero el hecho de que fuéramos a almorzar solos y… aaii no lo se, creo que esto va mas allá de una amistad con derechos.

Narra Justin.

Esa mañana me desperté a las 8:00, demasiado temprano pero estaba emocionado.

Baje a desayunar y la casa estaba totalmente silenciosa. Prendí el televisor y mientras desayunaba vi “Friends” una de mis series favoritas. Luego de desayunar subí a mi habitación a darme una ducha.

Al salir me vestí con un pantalón negro, una camisa salmón y mis zapatillas favoritas.

Me observé al espejo y cepillé mis dientes, también cepillé mi cabello pero luego lo despeiné.

Sonreí ante el espejo y luego fui por las llaves de mi auto. Es para ir por ella ahora, pero antes tengo que hacer unas compras.

Narras Tú.

Luego de desayunar me di una ducha. Todo un dilema al elegir la ropa, pues no sabía a donde íbamos a almorzar y cual era la ocasión. Me decidí por una mini falda blanca y una remera negra a rayas gruesas, blancas y unas sandalias justas para la ropa que llevaba.

Cepillé mi cabello y luego mis dientes. Me maquillé natural, como de costumbre. Baje las escaleras y miré el reloj del living, las 12:23. Sonreí ya debería estar por llegar.

Me senté en el sillón y prendí la televisión. Estaban dando una película, a la cual le desconocía el nombre, pero la vi, después de todo, en unos minutos viene Justin y me voy.

El timbre sonó y volteé mi mirada al reloj, 12:36 había llegado tarde. Reí en silencio y con los nervios de punta suspire frente a la puerta antes de abrir.

-Hola.-me sonrió. Estaba perfectamente perfecto, como siempre.

-Hola.-respondí besando su mejilla.

-Ah claro ya entiendo, como ahora tus padres están en casa, nada de besos.- la ultima parte la susurro. Rió tiernamente.- ¿Cómo estas princesa?

-Muy bien ¿Y tu?-sonreí.

-Perfectamente bien.-sonrió.- ¿Nos vamos?

-Claro.-le devolví la sonrisa.- Aguarda un segundo.- lo dejé en la puerta y corrí hasta la cocina donde estaba mi mamá haciendo el almuerzo.- Me voy con Justin, no se a que hora vuelvo, pero no me tortures con tus llamados. Te quiero.- salí nuevamente corriendo de la cocina. Justin rió divertido.- Ahora si nos vamos.