¿De quién demonios había sido la idea de ir una semana por una semana?
Era la pregunta que se hacía Judai en ese preciso instante, recargado en el sillón, con los brazos apretados contra el pecho y mirando la película, que ya iba por la mitad. Habían decidido que cada uno elegiría una película para ver los viernes, una semana él, una semana Yusei, alternando turnos y así diversificar el tipo de cine que veían.
Ambos eran amantes del cine, ver filmes era una de las razones por las que estaban cerca, porque habían comenzado con una charla, colándose en la conversación de Aki y Asuka; ¿quién habría dicho que eso los habría llevado a darse cita semana a semana en la casa de alguno de los dos y perderse dos horas analizando a fondo las películas más extrañas y divirtiéndose con las comerciales?
No, no todo era miel sobre hojuelas. No es que la película sea mala, es que a Judai no le gustan las películas de autos, así que no entiende cómo una sola saga puede llevar ocho películas seguidas. Pero tampoco se queja, Yusei no dijo nada cuando él quiso ver las versiones extendidas de "El señor de los anillos"
Ese recuerdo lo golpea, Yusei diciéndole que sólo por él no se quejó.
Judai levanta la mirada en dirección al rostro del chico que le gusta, Yusei tiene los ojos brillantes, su rostro denota entusiasmo, le gusta la película. Judai sonríe comprendiendo lo que le dijo el azabache, unas semanas atrás, así que se endereza en su sitio y se sienta al borde del sillón, justo como Fudo hace, y se recarga ligeramente contra él. El azabache le mira sorprendido y luego sonríe también, pasándole un brazo por los hombros y jalándolo hasta acurrucarse los dos en el sillón. Sigue atento al filme, pero ahora también traza círculos en los brazos del castaño, haciéndole sonreír.
Bueno, ya van por la quinta película de autos, ya sólo quedan tres, y si puede ver el resto abrazado a Yusei Fudo, no importa cuántas películas de autos vengan.
—Este año sale la nueve. —Dice Fudo como si hubiese leído su mente. —Y me gustaría verla en el cine...
Judai suspira pesado y luego sonríe. —Sólo si me abrazas así.
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3.- Jugando o viendo películas
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—Fatality... —Dice Yami imitando la voz del juego mientras su personaje termina de matar al de Yugi, el menor lo mira con reproche, apretando de más el mando. Yami suelta una risa floja y mira a su hikari, componiendo una expresión de disculpa.
—Es que a ti no se te gana. —Espeta Yugi.
—Es porque estoy sentado en el lado del sillón que da suerte. —Bromea el mayor mientras selecciona un nuevo personaje.
—Pues entonces quiero cambiar.
—Siéntate donde quieras, te voy a ganar de todos modos.
—Te tomo la palabra. —Espeta malicioso el menor, que se levanta para acomodarse en el regazo de Yami.
El mayor lo mira sorprendido, pero le permite al pequeño quedarse ahí con el pensamiento de que le va a ganar de todos modos.
Empieza el juego, Yugi se mueve mucho, suele mover los brazos como si con eso el mando fuera a reaccionar más rápido, se agacha y se encoge en su lugar, moviéndose a la par de su avatar, Yami siempre encontró aquello divertido, ahora no le permite jugar en paz.
Yami se distrae, Yugi gana, y celebra en su lugar. Escucha al muchacho bufar por lo bajo, así que gira el rostro y sonríe, pero en lugar de burlarse de su Yami, se acerca y le besa, acariciándole la mejilla.
—Qué torpe eres, hikari. —Dice Yami divertido antes de volver a besarle. —Ya. Siéntate en el sillón y cambia de personaje, el que pierda paga la cena.
Pidieron pizza, no es la gran cosa, pero Yugi está confiado gracias a su victoria, tal vez pierda, pero se lo pondrá difícil.
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Diez días con tu ship (puzzleshipping y Starshipping)
FanficReto de diez días publicando drabbles con temática de Puzzleshipping y Starshipping