Mi Pequeño Infierno. (De Nuevo En Wattpad)

39- ¡¿Por qué esto es tan dificil?!

Ya era domingo y seguía encerrada en mi habitación, Elena me había llamado hace minutos pero no quiso decirme como le fue en la operación y tampoco supe descifrarlo por que su voz era extraña... más bien, confusa y no sé que pensar respecto a eso.

-Luana, amor.- Llamé a la niña quién se había pasado todo el día encerrada en la habitación conmigo. -Vamos a comer nena.- La veo sentada en la puerta y con uno de sus peluches en mano, la cogí entre mis brazos y siento un leve mareo pero lo ignoro, de seguro es por no comer, abro la puerta de la habitación y me dirijo a la cocina.

Me he pasado el día torturándome con si hablar con Alan o no mañana, aún no tomo una decisión pero me queda la mitad del día para pensar.

-¿Luna?- Era Zooey, le sonreí y ella vino hasta mi. -¿Co ...cómo estás...?- Tartamudea mi hermana nerviosa.

-Un poco mejor, ¿Quieres ir conmigo al psicólogo mañana?- Le pregunto sin darle importancia a su nerviosismo y ella asiente sonriente.

-Ven, le daré de comer.- Dice Zooey cogiendo a la nena y llevándola a la cocina, me dirijo a la sala despreocupadamente y juro que mi corazón se detiene por un instante al verlo parado frente a mi y mirándome con preocupación.

¿Por eso era el nerviosismo de Zooey?

Inmediatamente me doy la vuelta para ir a mi habitación, no estoy preparada para hablar con él... no, ahora no... no soy capaz ni de verlo. Camino hasta las escaleras pero ya es demasiado tarde, Alan me sujeta del brazo cuidadosamente y me hace girar sobre mis pies quedando frente a él, su contacto con mi piel me hace sentir una corriente que no había sentido antes, y me gustan estás nuevas sensaciones pero también me lastiman, me lástima no poder besarlo o incluso tocarlo, me lástima no poder verlo a la cara ni siquiera, duele sentirse de está manera.

-Luna, necesito hablar contigo.- Dice y niego, no quiero verlo, no puedo dejar que él me vea así, con golpes, tan sucia, tan débil. -Por favor Luna, mírame, no te dejaré sola aunque así lo quieras.- Lo miro a los ojos y siento como los míos se llenan de lágrimas. -Me importas lo suficiente como para dejarte sola en esto Luna.- Pone su mano en mi mejilla para limpiar las lágrimas de mi rostro.

-Alan.- mi padre lo llama y cuando él mira a su dirección aprovecho para soltarme de su agarre e irme corriendo a mi habitación.

¿Por qué mierda no puedo estar con él? ¿Por qué lo alejo si yo lo quiero? Parezco una niña tonta, solo quiero que todo esto acabe, quiero dejar de sentirme así.

-Luna ¿Estás bien?- Entra Elian sin tocar la puerta, limpio mis lágrimas y me giro para verlo.

-Si.- Le sonrío falsamente.

-¿Alan te hizo algo?- Pregunta preocupado y frunzo el ceño. -Vi como salias corriendo, ¿Te tocó?

-¿Qué? ¿Cómo crees que Alan me haría Algo?- Le respondo con otra pregunta.

-Luna ¿Es qué acaso no lo ves?- Elian señala a la puerta molesto, no sé ni si quiera porqué está tan molesto o con quién, ni siquiera sé que es lo que pretende con esta conversación. -Estás así por su maldita culpa, desde que Alan llegó a tú vida se sumó Diego, Valeria y hasta su propio padre a hacerte daño, nadie sabe si él también es cómplice.- Dice y me enojo.

-Cállate.- Le digo. -No sabes lo que dices...- Suspiro e intento calmarme para no perder más la paciencia.

¿Qué derecho tiene Elian para hablar así de Alan? No... la verdad no se lo permito.