Sumergida en el amor

Capítulo 9

Han pasado cuatro días desde que Neal se fué y Candy está casi recuperada por completo, así que poco a poco ha tenido ánimos para retomar sus actividades y ayudar a la hna. Maria a cuidar a los niños.

Estaba preparando el almuerzo, cuando uno de los niños llegó corriendo.

-¡Candy, Candy , hay alguien allá afuera que pregunta por tí!...-gritaba el chiquillo.

Ella le preguntó extrañada.- ¿Quién es la persona que me busca Sam?-

-Es tu novio, el señor con el que te fuiste esa vez...-el corazón de Candy díó un salto.

-¡Terry!, pero...¿porque vino si le dije que no lo quería volver a ver?.-

-Hazlo pasar a la sala, por favor Sam, en seguida lo atiendo.-

Candy se secó las manos, se quitó el delantal y se alisó el pelo...

Terry ya estaba ansioso esperando por ella en la sala...en ese mismo lugar, unos meses antes, habían planeado tantas cosas, en ese entonces él había vuelto por ella, había decidido que ella era la mujer con la que quería estar...estuvieron a punto de consumar su unión...y ahora todo eso se ha ido, ya no hay vuelta atrás.

-¿Qué sucederá cuando lo tenga frente a frente?, -pensaba renuente a entrar en aquella habitación.

Suspirando, Candy abrió la puerta y cruzó el umbral, miró a Terry que ya la esperaba, dispuesta a enfrentar lo que viniera, una extraña calma la invadía, hacía mucho tiempo que no se sentía tan tranquila como es ese momento.

-¡Candy!...-Terry corrió a su encuentro y la tomó de las manos.- Candy...siento tanto lo que pasó, no tenía cara con que venir a buscarte...pero ahora estoy aquí para pedirte perdón...que estúpido fuí...por una aventura yo...yo casi te pierdo.- la miraba esperando escuchar de sus labios que lo perdonaba, pero eso estaba muy lejos de ocurrir.

Ella lentamente retiró sus manos de su agarre.

-Terry, seamos realistas, tú ya me has perdido...esta vez jamás te perdonaré.-

-¡Pero Candy!, por favor escúchame, yo te amo, te necesito...con todo mi corazón...tú los sabes.- le decía el joven, desesperado.

-Lo siento Terry, eso es lo que yo creía, pero tú me demostraste otra cosa, yo estaba segura que eras el hombre de mi vida, una vez te seguí, solo para darme cuenta que, por circunstancias de la vida, tenías el deber moral de cumplirle a Susana, aún así, tú decidiste que era conmigo con quien querías estar, no sabes lo feliz que me hiciste, pero ese mundo ideal que contigo soñé, te encargaste de destruirlo y me hiciste despertar de ese sueño color de rosa de la manera más cruel.-

-¡No Candy, no digas eso por favor!...te aseguro que lo de esa mujer, fue solo un error, nunca significó nada para mí, te lo aseguro...¿ahora cómo voy a vivir sin ti?.- en ese momento todas sus esperanzas de recuperarla, desaparecieron.

-No te justifico, pero quiero pensar que tal vez, te sentiste solo, y eso te orilló a echarte en los brazos de otra, yo no pude estar contigo todos estos meses, pero, ¿tan frágil es tu amor por mí que no pudo con la distancia?...¡me cambiaste Terry!, así que serás capaz de vivir sin mí y yo...voy a estar bien, ahora lo sé...- y Candy continuó...

-Terry, mentiría si te dijera que no te guardo rencor, lo siento pero tú eres la última persona que deseo ver, así que es todo lo que tengo que decirte, ahora ¡vete y déjame en paz!.- estaba controlando las lágrimas, no quería demostrarle todo lo afectada que estaba, así que le dio la espalda.

Terry la miraba con profundo pesar, sintió que el suelo se hundía a sus pies. Todo se terminó entre ellos. El la ha perdido para siempre.

Candy le hizo ver que esa era la despedida, sus palabras fueron tajantes y Terry se convenció que sería inútil insistir, no había justificación alguna para su traición, así que simplemente se dio la media vuelta y salió de la habitación sabiendo que no la volverá a ver jamás.

Continuará...