Día 5: Universo Alterno

1.5K 167 20
                                    

Ray siempre se preguntó porque Emil hacía las cosas que hacía. Siempre preocupándose por los demás, velando su seguridad por encima de la suya; le molestaba, le molestaba la amabilidad que había y tenía en demasía Emil.

Y le molestaba ser una inútil. Por su culpa, no pudo evitar que se quemara las palmas de las manos con el cerillo, que se cortara la oreja y que aquella archiduquesa la háyase atravesado. Todavía tenía pesadillas con ese día.

Emil notó la actitud ausente de la fémina, preocupándolo.

-Ray. - ella salió de sus pensamientos, disculpándose, volviendo a servir otra cucharada de sopa. Emil puso una mano, evitando que la cuchara entrase a su boca. - Ray, ¿Estás bien?

- ¿Por qué lo preguntas? - devolvió la cuchara al plato, a la vez que Emil bajaba su mano. Él sonrió un poco nervioso.

-Bueno... es que en todos estos días te he notado más seria de lo normal. Y me preocupa que estés guardándote las cosas otra vez. - se rascó un poco la nuca, mientras Ray lo miraba con cierta sorpresa. - Por eso, quiero saber si estás bien... Me preocupas, Ray.

Ella bajó un momento la mirada, sólo mirando la sopa que tenía en manos. La dejó a un lado, levantándose de la silla en la que estaba sentada, todo bajo la mirada del pelirrojo.

- ¿Ray...? - ella se subió a la cama, abrazándolo. Emil se ruborizó a la vez que se sorprendió; eso quedó en segundo plano cuando sintió como ella estaba temblando, y uno que otro sollozo salía de ella.

Ray estaba llorando.

Emil la abrazó devuelta, sobando su espalda con delicadeza.

- Lo siento por todo, Emil... lamento ser tan inútil... Lo siento.

- No eres ninguna inútil Ray, al contrario... Me disculpo por haberte preocupado a ti y a los demás. Es mi culpa. - se acostaron en la cama, mirando el uno al otro. Emil secaba las lágrimas de la pelinegra, con una sonrisa suave.

-Eres un tonto. Eres un tonto raro. - Emil se rió por eso. Ray finalmente sonrió.

Mientras que, del otro lado de la puerta, estaba Yuuna. Sonrió, esos mocosos le recordaban a ella y su amor de la infancia; se fue, deseándoles lo mejor.

Porque sí, ella notaba lo que comenzaba a florecer entre esa cíclope somnolienta y ese chico antena.

-Traumada Taisho

Ay, ups.

Chica de sonrisas soleadas  [Ray/Emma]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora