Capítulo 2: Alguien ¿Cercano?

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Laila...

Darte cuenta que en toda esta fecha festiva, resurge el amor. La paz. La alegría, y la magia, te llena de esperanza.

Camino a casa después de las compras navideñas. Típico centro comercial un día antes de navidad.

Hoy veinticuatro de diciembre, quiero estar con mi novio. Él también lo quiso así, y eso me alegro bastante. El día de mañana iremos a reunirnos con toda la familia. Eso siempre me alegra.

Realmente es un gran momento para atesorar y recordar con toda el alma. La navidad es la época más preciada de todas. Es la que a su vez; vuelve a reunir en armonía a los seres que amamos, y viven algo lejos.

Es lo mejor de todo.

Después de unos minutos llego a casa. Si, hogar dulce hogar.

Suspiro apagando el auto. Fijo mi vista a la ventanilla, y observo la blanca nieve en el suelo, mientras que también, esta cae del cielo. Temporada armoniosa. Temporada de frío.

Como me encantaba todo esto cuando era una niña pequeña. Sonrió, me causa todavía mucha ilusión y un poco de nostalgia.

La navidad es una época donde no importa ser niño. Joven. Adulto, o envejeciente para sentirse alegre. Para sentir ese amor incondicional por los nuestros, o esa paz que resurge de las fiestas.  Por eso, creo que está es una de las razones por la cuál amo tal época festiva. Es para todos, y todos para ella.

Entro a casa con las bolsas grandes del supermercado. Tal vez exagere un poco al traer de todo un poco del lugar, aunque más vale estar al cien por ciento en estas fechas, y más; si cerrarán por motivo a la navidad el día de mañana. Es mejor así.

Dejó las bolsas en la mesa de la cocina, y vuelvo a la sala acercándome a la radio. Enciendo esta y me detengo en una emisora al escuchar la típica canción de "Feliz navidad" en inglés.

Cuando era una niña, recuerdo hacer ese coro con mi hermana Lein. Le encantaba esa canción, y a mi me llenaba el corazón cantarla junto a ella, y a nuestros familiares. Era algo especial para todos.

Papá se sentía orgulloso, de que dos adorables pequeñas, que tanto a amado, y ama; estén juntas y hagan algo que aman, y se identifiquen.

Recuerdo que siempre decía... que hacer lo correcto, y el bien; habré grandes puertas.

Tenía, y tiene razón.

No sólo porqué en ese tiempo disfrutábamos las viejas tradiciones navideñas, si no también, porqué debemos hacer el bien, no sólo por nosotros mismos, si no también por los demás; aunque estos, no lo aprecien, o no se den cuenta.

Sus consejos son los mejores.

Sonrió dejando el recuerdo atrás. Vuelvo a la cocina, y saco las cosas de las bolsas para ordenar. Hoy será una larga tarde...

"Noche actual, Laila"

He salido al parque central a encontrarme con mi amiga Luisa. Me ha dicho que tiene muy buenas noticias, y que debe verme personal para decírmelas.

Le he respondido que esta bien, aunque me encuentro un poco nerviosa al no saber de que será la noticia, o saber más o menos de que se trata.

Típico nerviosismo que se presenta en nosotros, los seres humanos. Aunque no pase nada, tenemos ese pequeño remordimiento de que pasa algo. No se porque, pero siempre está allí .

Me siento en una banca del parque, y me quedo admirando la belleza del gran árbol navideño. Este se encuentra decorado con esferas navideñas. Bastones de caramelo, y ángeles decorativos, entre otras cosas más.

Mi gran amigo... TOBÍAS [Completa]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora