Vivir en mi propio sueño

16- y todo se derrumba....

Juan Carlos me acompaña al hospital junto a Jesús y Daniel.

Todo el trayecto me mantengo ausente, los hermanos hablan entre ellos y  yo me limito a mirar los setos de la carretera.

Uno, dos, tres... comienzo a contarlos para así no seguir torturándome con el tema de mi abuelo. Cuatro,cinco... ciento veinte cuatro, en este numero el coche se detiene y todos nos bajamos de él.

Caminamos en silencio por los amplios pasillos del hospital, Jesús me lleva abrazada, esto me hace sentirme mucho más segura.

Llegamos a una amplia sala de espera en la que aguarda mi padre, me hace un gesto para que me acerque y me invita a sentarme a su lado.

Tiene mal aspecto: barba de mas o menos unos tres días, unas enormes ojeras y pelo despeinado.

-Elsa te esperamos en la cafería, ve con tu padre.- me indica Juan Carlos saliendo de la sala.

Hago lo que me dice y me siento en el asiento contiguo al suyo, le miro con cara de expectación y espero a que comience a hablar.

-Verás pequeña, quería explicarte el motivo por el que te traje a Sevilla y sobre todo el motivo por el que tu madre cedió de que vinieras conmigo.- el sonido de mi movil le interrumpió.

-¿Te importa si contesto?- pregunto sacando el movil de mi bolsillo y viendo que la llamada es de María, he de admitir que  llevo mucho sin hablar con ella.

-No tranquila, yo te espero- salgo de la sala y una vez en el pasillo contesto a la llamada.

*Llamada telefónica*

(- será Elsa y + María)

-Dimee locaaa.

+ Elsa no estoy para bromas.

-No si yo tampoco, pero creía que podía  reírme al menos contigo. Mi padre estaba apunto de decirme el porqué me a traído a Sevilla cuando me has llamado.

+¡¡Elsa tienes que volver a Córdoba ya, ya!!

-A ver no te me alteres, ¿qué pasa?

+Tuu... tu madre...

-¿Qué leches le pasa a mi madre?

+ Esta en coma, no saben si despertará.

-(llora)

+Elsa, Elsa, tranquila, ¿estas ahí? Elsaaa!!!

*Fin de la llamada telefónica*

Tras oír esto caigo al suelo y rompo a llorar, esto era lo que me faltaba.

Mi padre ha de oírme porque sale al pasillo alarmado.

-Elsa, ¿qué te ha pasado?- se sentó en el suelo junto a mí y me abrazó.

-Me...me..me han llamado desde Córdoba- consigo decir entre lágrimas.

-Me lo suponía- contesta mi padre con una grandísima naturalidad- Pequeña, sé que de escucharme es de lo que menos ganas tienes en el mundo pero has de hacerlo.- asiento, apoyo la cabeza en su hombro y dejo que hable.- Verás, fue tu madre quien me pidió que te trajera aquí conmigo, le detectaron una enfermedad en el corazón y no quería que la vieses mal, pero pocos días antes, cuando ya teníamos los tramites de la custodia arreglados a tu abuelo le detectaron un cáncer, la diferencia con la enfermedad de tu padre es que posiblemente el abuelo si que se recupere...

-Me estás diciendo que mamá....?- mi padre asiente e intenta abrazarme, pero yo me aparto de él y salgo a correr hasta la cafetería.

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Perdonadme por tardar tanto en escribir, ya se me estaba olvidando hasta que tenía una novela empezada... Bfff pero esque apenas tengo tiempo, a partir de ahora intentare escribir al menos todos los fines de semana.

OS quiero ♥