♤Capitulo Unico♤

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Aquí Nightmare no esta en su forma corrupta, ahora si comencemos

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Sus cuerpos era uno solo dentro de aquel jardín en el cual se cometió el primer pecado del mundo, el "Jardín de Edén"

-C-Cross~

-Night~

Su pasión ardía como un fénix que a pesar de que a veces moría este revivía de las cenizas en una inmensa llama que con tan solo verla tu interior arde más que el mismísimo infierno

-M-me v-vengo Night!~ -sentencio el menor bajando la velocidad de las embestidas mirando tiernamente los ojos del mayor, su rostro estaba teñido como el color de las manzanas y el sometido estaba como una uva totalmente madura, su frente y cuerpo estaba sudado por el calor que hacia entre ellos, sus manos tocaban, masajeaban y jugaban con las grandes montañas que la pesadilla había formado con su magia pedido por el menor, sus senos eran perfectos a su vista, tan solo el chuparlos lo excitaba demasiado fantaseando un poco, pero nada se comparaba cuando se pegaba de los pezones succionándolos y chupándolos ardua y desesperadamente como si se tratase de un bebe que no había comido en horas, tan solo el escuchar al mayor gemir y jadear altamente lo excitaba mas, le encantaba que fuera ruidoso en todos sus encuentros, las expresiones que hacia cuando estaba mamando de sus tetas, de cómo la pesadilla abrazaba su cabeza para que no se despegase y siguiera succionando aquellos pequeños botoncitos con furor, era sin duda el paraíso y más cuando mamaba de ellos y embestía al mismo tiempo a Nightmare

Minutos antes aquella cama rechinaba y golpeaba la pared con cada embestida que daba Cross al mayor, sus gemidos y jadeos inundaban toda la pieza, la ropa estaba regada por todos lados, Nightmare dejo de lado los gemidos dando paso a los gritos y jadeos llenos de placer, el sentir como su novio lo estaba haciendo suyo lo llenaba de un gran éxtasis como si hubiese tomado alguna droga, sentir como el pene de Cross entraba y salía de él lo enloquecía, el sonido de sus fluidos mezclándose con los del menor generando un chapoteo lo avergonzaba y más sabiendo que él era el que originaba todo ya que a cada rato e instante soltaba más jugo del amor por las atenciones que el menor le proporcionaba, todo le encantaba de él, su hermoso rostro igual a la porcelana, sus hermosos ojos bicolor, su carácter tan gentil y rudo a la vez, su perfecto cuerpo bien formado, simplemente una majestuosidad para él, era único ante los demás y jamás lo cambiaría por nada, cuando creaba los senos para su novio este se pegaba a ellos desesperadamente llenando a la pesadilla de un placer sumamente único arqueando su espalda dejando salir varias lagrimas por tanta excitación, le encantaba que se pegara como becerro hambriento, sentir esa lengua tan suave y caliente a la vez pasar por sus pezones lo volvía loco al grado de apegarlo para que no se separase y siguiese mamando, cuando se "cansaba" de un lado movía suavemente su cabeza dándole a entender al ex-guardia que también quería atención en su otro seno

Todo le encantaba, sentirse sumiso ante él aunque siempre lo negase por su orgullo; amaba ser el uke de esta relación, dejarse penetrar por él era fantástico siempre daba lo mejor de sí teniendo un gran y gratificante sexo, pero no tan solo es por el placer ya que ambos lo hacían con todo el amor del mundo demostrándose uno al otro cuanto se amaban, el ex-guardia seguía chupando y succionando los pezones de la pesadilla mientras este no podía articular ninguna palabra, abrazo su cadera con sus piernas para darle un mejor acceso al menor y pudiese llegar hasta el fondo hasta que su glande chocara con su cérvix eso lo amaba y Cross amaba meterle todo su miembro sintiendo como los fluidos de Nightmare le llenaban y manchaban por completo, esa cavidad tan pequeña y a la vez tan placentera la amaba sin dudar alguna pero lo que más amaba de todo es poder terminar dentro del mayor, cuando lo hace puede seguir moviéndose obteniendo aún más placer dentro del orgasmo pero sobre todo le encantaba llenar la vagina de su novio con su semen hasta que este se saliera y regase un poco en las sabanas

Jardín de EdénDonde viven las historias. Descúbrelo ahora