Capítulo 4

858 64 3
                                    

Pov Lucy

El camino hasta casa fue silencioso, tenía mucho frió, el vestido apenas tapaba mis piernas y el abrigo no servía de mucho.
Me apreté más contra Natsu buscando calor.

Natsu paró la moto en un semáforo.

-¿Tienes mucho frió?- Preguntó, yo asentí. Se quitó la chaqueta que llevaba y me la dio .

- ¡Estas loco! Vas en manga corta Natsu- Le reproché.

- Y tu no llevas pantalones, estamos en paz- escuché su risa opacada por el casco y no pude evitar sentir mariposas en el estómago, en solo dos meses había trastornado mis sentimientos.- Date prisa antes de que se ponga verde y los de atrás se empiecen a impacientar.

Cuando llegamos, baje con un poco de dificultad debido a los tacones, me quité con pesar la chaqueta y se la devolví.

- No se si recuperaré el teléfono para mañana, tu ven a las 11 igualmente.-Natsu asintió.

-Buenas noches pequeña.- Se despidió arrancando la moto.

- Buenas noches.-Susurré sonriéndole.

La mañana siguiente desperté con la hora justa, me vestí lo más rápido que pude y corrí a mi auto. Cuando llegué vi a Sting en la entrada, tragué saliva intentando mentalizarme. Bajé con elegancia del coche siendo consciente de las miradas en mi persona como de costumbre. Caminé hacia él fingiendo seguridad, al llegar Sting me miró de arriba a bajo para después asentir, como si hubiese aprobado mi vestuario.

-Te lo dejaste ayer en mi coche.- Me dijo mientras me plantaba un beso delante de todos, se lo devolví incómoda, al separarnos Sting me devolvió mi bolso.-Siento lo de ayer, sabes que un caballero como yo nunca hubiese dejado que ese chico se acercara si hubiese estado en mis cinco sentidos.-Se disculpó aparentemente, pero yo sabía que era su forma de aclarar que él no tenía culpa de nada.

-No pasa nada, me voy a clase.-Contesté y me dirigí a la entrada, pero su mano me detuvo.

- ¿Conocías a ese tipo, no?- Preguntó con el ceño levemente fruncido. Yo negué.-Recuerdo que la llamaste por su nombre.- Lo miré a los ojos mientras me soltaba de su agarre.

-Tenía su nombre en un identificador, si te hubieses fijado lo habrías visto.- Menti y me encaminé de nuevo a mi clase. El día fue tortuoso y lento como siempre, esperé hasta estar en la relativa seguridad de mi coche para inspeccionar mi bolso. Todo parecía estar en orden, tenía varios mensajes de Levy, pidiendo que quedáramos, que hacía mucho tiempo que no nos veíamos y notificaciones de instagram.  Aliviada marqué el número de Natsu para avisarle de que ya tenía mi teléfono, pero no fue su voz la que se escuchó al otro lado.

-¿Si?- La chica al otro lado respondió.

-Yo em...¿Está  Natsu?- Pregunté un poco sorprendida.

-¡Natsi!- Canturreó la voz del otro lado.

-¿Que mierda haces con mi teléfono?-Oí su voz al otro, mi corazón se apretó con fuerza.-Y coge tu ropa y lárgate, me apetece dormir.-Gruñó antes de responder, imaginé la situación dolida, estaba claro que Natsu tenía su propia vida, pero entonces¿Por qué me dolía tanto?.-¿Quien es?-Bufó.

-Yo...Lucy-Me aclaré la garganta.-Era para avisarte que ya tengo el teléfono, y esta noche no vengas a por mi.-Hablé atropelladamente. Me costó procesar que había dicho. ¿Por qué no quería verlo?¿Que era esta sensación en el pecho? 

-¿Por qué?- Preguntó.

-Cosas personales.-Respondí, porque yo tampoco sabía la respuesta, solo no podía verlo hoy sabiendo que acababa de estar con una mujer.- Ya hablamos-Colgué.

Mi Pequeña Bailarina (Completa)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora