Dylan.
Pasan dos días. Dos días en los que la chica no se aparece en el restaurante. Luego de que hace un par de días la destruyó ver al chico de la vieja camioneta acompañado por esa chica, no ha vuelto a aparecerse por allí.
Para el tercer día ya estoy algo desanimado durante mis horas de trabajo, a penas he dormido pensando en todas las posibles opciones por las que la chica puede haber desaparecido.
- ¿Qué ocurre muchacho?- me pregunta Bill cuando me siento a esperar un pedido-
- Su chica no ha venido en tres días- dice Summer con un tono de diversión-
- Ya calla Summer- digo con algo de mal humor-
- Ya volverá- me da ánimos Bill- la he visto venir desde que entré a trabajar aquí hace años
- Posiblemente está ocupada- Summer habla luego de sentarse a mi lado- o ha tenido que salir fuera del pueblo. Volverá pronto Dylan
- Necesita ayuda. Si está aquí todos los días, por toda la tarde, significa que no tiene a nadie que la ayude- hablo sintiéndome muy frustrado- no hay demasiado tiempo con una persona que está muriendo en su interior
- No pienses eso- me interrumpe Summer antes de que pueda decir lo que está en mi mente- ella está bien. Ya verás que en cualquier momento va a aparecer por aquella puerta. Si estaba así por el chico de la camioneta, tal vez ahora lo supere y ya no le veamos tan triste. No pienses negativo Page
- Si, supongo que tienes razón- me pongo de pie- te odio Summer. Muchas gracias
Al acabar mi turno Summer me acompaña a cenar, su turno también acabó. Nos sentamos en la mesa del fondo, ambos comemos huevos con tocino y lo acompañamos con café. Cuando se hace tarde me despido de todos en el restaurante, me subo a mi auto y conduzco hasta mi casa.
Al día siguiente llego al restaurante dos horas antes de comenzar mi turno, debido a que quiero comer algo rápido antes de trabajar durante toda la tarde.
A penas pongo un pie en el estacionamiento mi vista se dirige al auto rojo estacionado allí, en el mismo lugar de siempre. La puerta está medio abierta, así que puedo mirar sin mayores problemas a la chica sentada en el lugar del piloto con su vista fija en la puerta de entrada del restaurante, me fijo en su rostro y no hay rastro alguno de lágrimas.
Camino unos pasos, aunque me detengo cuando las ganas de acercarme a la chica comienzan a ser demasiadas, en ese momento recuerdo que Sonia no estará hoy en el restaurante, así que no tendré problemas. Me quedo parado en mi lugar por unos segundos, hasta que dejo que mi corazón le gane a mi mente y me acerco al auto de la chica.
- ¿Hoy no vas a entrar?- pregunto con suavidad. La chica da un pequeño salto en su lugar y luego me mira. Sus ojos son aún más bellos de cerca- lo siento, no pretendía asustarte. Trabajo aquí y te he observado de vez en cuando
- No sé si debería- dice ella con una voz muy dulce- este último mes he estado muriendo
- Mi turno no empieza hasta dentro de un par de horas- hablo a pesar de mis nervios y el temor que siento- ¿qué te parece si te invito un café mientras?
- No más de estos. Ni café tampoco- ella rompe un cigarrillo mientras habla. Yo asiento, y el silencio se hace presente entre nosotros por unos segundos- pero una malteada me gustaría
- Si, por supuesto- una sonrisa se instala en mi rostro- aunque es hora de almuerzo, así que espero no te moleste que yo coma una hamburguesa
- Es cierto. Yo tampoco he almorzado- ella se baja del auto y se pone a mi lado- así que una hamburguesa, papas y una malteada me encantaría
- Vamos entonces- apunto con mi cabeza hacía la puerta del restaurante-
- Soy Sydney- ella estira su mano y me sonríe. En ese momento muero porque es la sonrisa más hermosa que he visto en toda mi vida-
- Dylan- estrecho su mano, mientras sonrío también- encantado de conocerte
Con mi mano le indico a Sydney que camine, para yo seguirla de cerca. Abro para ella la puerta de entrada al restaurante y la dejo elegir mesa, ella escoge una de las que están junto a la ventana. Ambos pedimos lo mismo para comer, hamburguesa con queso, papas fritas y refresco. Bill me mira desde la cocina y me guiña un ojo, yo le sonrío a modo de saludo, para después poner toda mi atención en la chica sentada frente a mi.
FIN.
ESTÁS LEYENDO
Smoking & Crying
RomanceHistoria basada en la canción Smokin' & Cryin' de Alex Roe, parte del soundtrack de la película Forever My Girl. TERMINADA. SEGUNDA TEMPORADA PRONTO.