Al día siguiente tenía unas inmesas ganas de verte.
Estaba muy desesperado, que ni síquiera desayuné.
Al ver en las banquetas dónde solías sentarte no te encóntrabas allí.
No estabas.
Estaba preocupado. No lo entendía.
Te había buscado pór todas partes.
Y nada.
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TE ME FUÍSTE.
RomanceQuisíera retroceder el tiémpo para que vuélva a brillar mi sonrísa y dárte un abrazo muy fuérte.