He estado huyendo de ti. Porque tengo muchas dudas con todo. Sé que solo quieres mi bien pero no entiendo tú forma de llevarlo a cabo.
Y sé que eso no es una excusa por haberme comportado las últimas semanas como una zorra contigo. Y por consiguiente la gente que me rodea ha pagado lo que esconde mi sarcasmo y humor negro.
No hace falta que te lo diga porque con solo mirarme sabes lo que me ocurre antes que yo. Pero supongo que lo que me pasa es que estoy jodidamente asustada de que esto no cambie. De no poder conseguir nunca lo que ni yo misma sé que quiero conseguir.
Sí, lo reconozco, me da miedo seguir siempre así de perdida e infeliz.
