CAPITULO 11 #Arima#

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Me senté en el patio trasero de aquella nave industrial donde viviamos. Olut, el líder, decidió que era mejor vivir alejados en una nave industrial a las afueras de Arizona. Ahí no habría nadie que viera lo que haciamos ni nadie que hiciera preguntas al respecto.
Aquel patio trasero fue mi lugar favorito desde que me trajeron. Los altos árboles y la infinidad de flores hacian que me sintiera como si aún estuviese en la universidad ajena a todo este mundo.
En el patio, los Gazoks pasaban la mayoria de su tiempo libre ya que estaba terminantemente prohibido salir en horario normal.
Escuché como se abrí la puerta y se sentaba a mi lado Nar, que apartando su larga melena del rostro me tocó ligeramente la rodilla.
-No hace falta que nos machaquemos-dijo con voz demasiado amable para mi gusto-estoy seguro de que ganaremos.
Deje de mirar aquel precioso patio y giré mi cabeza para observarle pero antes de lograr hablar una voz desconocida para mi se coló por mi timpano.
-Ya está aquí-concluí agudizando más el oido.
Nar se puso de pie con nerviosismo y yo me crucé de piernas como si nada del otro mundo estuviese pasando.
-No te gusta la idea de enseñar a nadie ¿Verdad?-preguntó al ver que no tenia intencion de levantarme a saludar al recien llegado.
Negué con la cabeza ¿Como iba a querer hacer de niñera?
Cerré los ojos intentando ocultar mi nerviosismo y cuando los abrí Nar ya no estaba.
¿Porque tenian tantas ganas de verle? Si iba a ser otro Gazok mas del montón.
Suspiré y me levanté dando una ligera vuelta por aquel patio.
Me agaché rozando los petalos de las flores que tenia a mi izquierda e intenté evadirme y dejar de escuchar la voz de tanta gente.
La puerta del patio volvió a abrirse y entró con paso calmado Ivi.
-¿No piensas entrar?-preguntó.
Sin levantar la vista negué con la cabeza.
-Me da miedo..-susurré casi para mis adentros-¿Y si no estoy a la altura de liderar al hijo de uno de los grandes?
Ella se agacho a mi lado y pasó su mano por mis hombros.
-Piensa que el chico es un iniciado, aún no sabe hacer nada-me sonrió ligeramente y volvió a ponerse de pie-le podrás amoldar a tu medida.
Hice una mueca y también me puse de pie esta vez fijandome en el rojo de sus labios.
-Tú has estado con él..¿Cómo es?
Ella sonrió y se sentó en el banco donde segundos antes estaba yo sentada.
-Aun no se cree que es uno de los nuestros, pero hay pruebas suficientes que lo demuestran-me hizo un gesto para que me sentara a su lado y continuo hablando-aún no sabemos que poder tiene ni hasta donde puede llegar.
La miré detenidamente.
-Será facil manejarlo-dijo esta vez sonriendo-y no olvides que será un gran arma en tu grupo.
Reí ironicamente y arquee una ceja ¿Me estaba vacilando?
-Es portador del Ika-sentenció.
Parpadeé dos veces seguidas sin creermelo. ¿Portador del Ika? ¿Porqué no habian empezado por ahí?
Tragué saliva y esta vez sonreí.
Mi grupo iba a ser el primero en tener uno.

TIENES QUE SER TÚDonde viven las historias. Descúbrelo ahora