||Corazones Entregados|| Levi x Tu x SNK

Capítulo 7

- Iré a llamar a hanji, vuelvo enseguida, no salgas de la habitación- y salió por la puerta

- supongo que ahora seré uno de los experimentos de hanji, que emoción - decía con un poco de aburrimiento.

No era la gran cosa para mí, pues me había acostumbrado a que algunos niños me llamaran "fenómeno" o "demonio" por curarme sola y el color carmesí de mis ojos, excepto Mikasa, kyome, Armin y Eren, fueron los únicos que me aceptaron como soy y lo agradezco, aparte no soy tan rara como kyome, que utiliza las orejas de su gato muerto como diadema, eso sí es raro......

Pasaron aproximadamente 5 minutos y la puerta se abrió, habían llegado Levi y hanji

-Hola hanji, que te trae por aquí?- decía mientras me hacía la inocente

-Canija bien sabes a lo que vengo, así que déjame ver tus herida

-ahh, cual herida, yo estoy bien no tengo ninguna herida-

-Tch, ahora soy mentiroso, mira su brazo cuatro ojos, la herida que tenía ya se regenero, y tú bien sabes que las dos tenían heridas-

-Gracias por exhibirme capitán -

-Es un placer-

- Musa, me puedes explicar cómo pasó eso?, Cómo puedes regenerarte tan rápido?- pregunto hanji

- No lo sé, desde pequeña puedo hacerlo, mi tío Ronald decía que era algo normal en mi, pero que ningún otro ser humano puede hacerlo....decía que soy especial, y que no soy un fenómeno como solían llamarme algunos de los niños cuando era pequeña-

- Tendré que hacerte algunas pruebas pequeña, te sacaré un poco de sangre-

- Está bien hanji -

- Oe cuatro ojos, no crees que deberíamos de tenerla bajo supervisión?-

-Tienes razón, pero en dónde?.....Tal vez..-

- Tal vez que?

- Ya que...... descubrimos lo que puede hacer, en tu oficina, tu te harás cargo de ella enano- hanji dio una sonrisa maliciosa mientras salia corriendo o mejor dicho huyendo

- Haa pero eso que tiene que ver?!?!...... maldita cuatro ojos..... Vuelve!!!- el solo fruncía su ceño

*Supongo que ahora que estoy bajo su cuidado tratara de hacer mi vida imposible verdad pensé mientras daba un ligero suspiro*

- Y huyo la cuatro ojos....- se quedo pensativo- dime Musa realmente no sabes como puedes regenerarte?-

- Siendo sincera capitán, no, no lo se, mi vida es un pequeño acertijo desde que mis padres desaparecieron- *aun así siento que algo me falta pensé*

- Supongo que puedo comprenderlo, ya que estas bajo mi cuidado me ayudaras con unos cuantos papeles que tengo que ordenar-

- Ah pero porque, se supone que estoy bajo su cuidado y debería de vigilar me no creo que el hacer su trabajo sea parte de esto

- Entonces supongo que tienes algo mejor que hacer, ya que de esta habitación no podrás salir hasta que yo lo dije

- *suspiro* supongo que no capitán, así que esta bien...y si mejor limpio un poco en lugar de ayudar con los papeles?- me dirijo a su escritorio y me senté enfrente de el

- Tch, esta bien, detrás de esa puerta están los utensilios de limpieza

POV MUSA

No quería estar leyendo, a veces era un poco aburrido así que preferí limpiar así podía estar en movimiento, comencé a limpiar una repisa en la cual había un juego de té era muy lindo así que decidí tómarlo delicadamente

-Mocosa debes tener cuidado con eso, es algo preciado para mi-

- Esta bien capitán, no se preocupe, puedo hacer una pregunta?-

- Dime- me contesto mientras leía unas hojas

- La persona que se lo regalo....es algo suyo ...no se, tal vez una novia o pareja? ya se suponiendo por su edad alguna esposa?- sonreía maliciosamente pero algo en mi interior quería que dijera que no era nada de el

- No fue un regalo, es un recuerdo de alguien especial, y no, no fue nadie de ese tipo, es un recuerdo de mi madre-

su voz sonaba un poco quebrada y podia oler como se sentía, olía a tristeza, melancolía y con un poco de culpa, raramente me hacia sentir mal, era extraño nunca me sentí así con nadie al contrario me sentía demasiado feliz y con bastante energía después de esos sentimientos

-lo lamento capitán no debí preguntar-* espera.... Musa Aizawa pidiendo perdón, eso es nuevo*- yo el único recuerdo que tengo es una carta que mi tío Ronald la encontré en la mesa de mi casa cuando el muro maría cayo, por fuera dice que cuando mis dudas comiencen a crecer toda la verdad se sabrá.......

-..............- el capitán y yo no miramos fijamente-

- momento!*grite* tal vez la carta tenga un indicio

- Entonces ábrela y léela - me acerque al escritorio del capitán y la saque de mi sostén, era el único lugar seguro y donde estaría bien cuidada, el capitán solo volteo para otro lado

Querida Musa:

Tal vez ya notaste que eres mucho mas diferente que a todas las demás ...........