-Sa... Sakura que sucede? - preguntó asustado
Sakura sólo lo jalo del brazo para que se subiera a la cama y lo abrazó fuertemente. Sasuke se ruborizo con el abrazo pues podía sentir los pechos de Sakura pegándose fuertemente a su pecho, como estaba en pijama no traía sostén y todo se sentía tan...tan bien. Se separó del abrazo y sin poder contener su deseo la besó apasionadamente.
Era un beso frenético, casi desesperado. Sasuke introdujo su lengua en la boca de Sakura de una manera tan sensual que Sakura no pudo evitar soltar un pequeño gemido, lo que excitó más a Sasuke. Delicadamente Sasuke la recostó en la cama y se colocó encima de ella mientras continuaba besandola, estaba perdiendo la cabeza
-Sakura...no puedo más, estoy en mi límite- dijo Sasuke con voz entrecortada y Sakura lo miró a los ojos, su mirada estaba llena de deseo y podía sentir la erección de Sasuke presionandose contra su pierna. Suspiró. Sasuke se acercó mas a ella y le susurró al oido con voz ronca - si no paro ahora no podré contenerme
Sakura rodeo su cuello con sus brazos y se levantó ligeramente hasta quedar en el oído de él y le susurró de regreso
- Por favor, no te contengas
La voz de Sakura en su oído le erizo la piel de una manera que jamás había experimentado, en ese momento perdió la poca cordura que le quedaba y se dejó guiar por sus instintos. Su boca abandonó la de Sakura por un momento para dirigirse a su cuello y mientras sus labios lo saboreaban sus manos recorrían sus largas piernas. Poco a poco sus manos fueron adentrándose más en sus muslos hasta sentir su ropa interior por debajo de su diminuto short pijama y de un solo movimiento se lo quitó, dejando expuesto el calzoncito de encaje negro que llevaba. Se lamió los labios mientras la observaba de pies a cabeza y sin darse cuenta activó el sharingan. Aquella imagen quedaría grabada en su memoria para siempre. Sakura debajo de él completamente sonrojada y con una mirada de deseo palpante, su blusa beige que dejaba expuestos sus pezones completamente duros por la excitación y su calzoncito negro de encaje.
Sasuke continuó con su recorrido por el cuerpo de Sakura, le quitó la blusa y al ver sus pechos se volvió aún más loco de deseo.
Sakura al sentirse expuesta cruzó los brazos tratando de taparse y volteo la cabeza de lado avergonzada
-¿Qué sucede? - preguntó Sasuke sorprendido -¿Quieres que me detenga?
-N...no es eso, es que me siento avergonzada, quisiera tener una mejor figura. Lo siento
Sasuke la miró seriamente y quitó los brazos de Sakura de alrededor de su pecho. Eran hermosos, es verdad que no eran grandes pero tampoco eran pequeños, eran simplemente perfectos, sus pezones eran de un hermoso rosa que casi iba a la par con su cabello y su piel era tan blanca y suave que toda ella parecía una obra de arte. ¿De dónde podía sacar semejante idea?
- Eres perfecta, Sakura - le susurró al oído - Me muero por estar dentro de ti
Sakura podía sentir el tono serio en la voz de Sasuke y sabía que hablaba con sinceridad, su mirada era de por sí penetrante pero verlo con el sharingan activado mientras la miraba con deseo era increíblemente excitante. En ese momento mientras lo admiraba vio como Sasuke se quitó la camisa dejando expuesto su perfecto torso, ahora fue ella quien se mordió los labios.
Sasuke besó uno de sus pezones, lo recorrió con su lengua y lo saboreo mientras su otra mano jugaba con el otro pezón. Sakura arqueaba la espalda y trataba de controlar su voz, no quería despertar a Naruto o Shikamaru
Sasuke comenzó a bajar por su abdomen dejando un rastro de besos en este hasta llegar a la última prenda que le quedaba a ella y la miró a los ojos dándole a entender que la bajaría, ella sólo asintió con la cabeza apenada. Sasuke introdujo un dedo dentro de ella, estaba empapada. Sonrió
ESTÁS LEYENDO
Lightness and darkness 《Sasusaku》
Fiksi PenggemarGénero: Romance +18 Descripción: La historia se encuentra ubicada dos años después de la cuarta guerra Ninja. Sakura, de 19 años se ha convertido en la mejor médico ninja de Konoha. Sasuke ha estado en su viaje de redención por dos años pero ella aú...