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Rin:

¡Mierda, Mierda, Mierda! Prácticamente corrí a la casa de Ayame. Debía contarle esto.

-¿Rin? No avisaste que venías.-Dijo al momento de abrir la puerta de su casa.

-¡La he cagado!-Dije entrando.-¡La he cagado! -Comencé caminar por toda la sala de estar.

-¡Rin, vas a hacerme parir el niño por el trasero, dime que paso! -Me regaña, luciendo su vientre de cinco meses.

Me senté con ella en el sofá.-Sesshomaru.

-Ay no, el mocoso otra vez. Rin, por favor. ¿Es que no te puedes contener ante un pene joven? -Pregunta con agobio.

-Firmó unos contratos con la empresa de mi madre. Me vio con Daisuke y hoy me citó a su despacho.

-Mierda, voy a dar a luz.-Dijo dramática y rodé mis ojos.

-Se molestó obviamente por no saber lo de Daisuke. Pero luego se mostró dolido, me ha dicho que no ha amado a nadie más. Y luego, estaba por irme, pero me besa y terminamos en su escritorio.-Dije rápidamente.

-¡Se prendió esta mierda!

-Entonces entra su hermano y nos interrumpe.

-¿Y que sientes?-Pregunta tomando toda mi atención.

-¿Con que?

-¿Te hubiera gustado que su hermano no entre?

-No lo sé, yo...-Titubeo.-La verdad es que ya no se ve como antes. Está más maduro, se ve más alto, fuerte y su espalda, madre mía. Deberías verlo, está de puta madre.

-No tengo pruebas y tampoco dudas, amiga.-Dice divertida.-Lo que me sorprende de todo esto es que no puedes evitar caer rendida a sus pies. ¿Sabes lo que es la dignidad? -Bromea y le fulmine con la mirada.

-Me encantaría decirte que no me provoca nada verlo, pero estaría mintiendo. Y nuevamente le soy infiel a Hakudoshi. Maldita sea, ¿es que me gusta ser una zorra?

-Siento que esa noche en el hotel tomaste la decisión incorrecta. Y Rin, a pesar de que me encanta esto de que te excite un jovencito, debes pensar que ahora tienes dos niños. De padres distintos y Daisuke ahora debe aceptar a Sesshomaru como su padre.

-Lo sé...

-Le va a costar entenderlo, Daisuke ve a Hakudoshi como figura paterna.-Suspira y toma mi mano.-Ahora no se trata solo de ti. Tus hijos van a sufrir si te ven con alguien más que no es su padre.

-Tienes razón. Aún así, no sé qué es lo tiene, Ayame. Pero no puedo negarme a él. En aquella oficina ni siquiera me resistí.

-Comienzo a creer que debiste haber cancelado la boda. Por más culpa que sientas, vas a caer.-Asegura.- Te conozco, estás enamorada de él. Deja de engañarte, no amas a Hakudoshi.

-Si que lo amo.

-Si lo amaras no lo hubieras engañado en primer lugar. Estás con él más por costumbre que por amor y pronto el tiempo me dará la razón.

***

Sesshomaru:

-¿Nervioso, papá?-Pregunta divertida Hitomiko sentada en el sofá de la sala.

-Algo así. Ese niño me odia.-Suspire.

-No te conoce, no te desanimes.-Me sonríe.-Solo siente celos. -Se pone de pie.-Y lo mejor será que me vaya, Rin no creerá que ahora somos amigos.

-Tienes razón. -Ambos caminamos hacia la entrada, al abrir la puerta, Rin ya se encontraba allí y al verla quedó estática.

-Lo siento, yo ya me iba.-Dice amable Hitomiko.

Deseos ilícitos Donde viven las historias. Descúbrelo ahora