Capricho de alfa YOONMIN

Six

Luego de cuatro días de celo, intenso celo, el departamento de Bangtan volvía a la normalidad... más o menos. Durante el calor de Jimin nadie se había atrevido a entrar, sólo Jin, y unos pocos minutos para buscar su laptop y la de Nam, las tarjetas de crédito y un que otro abrigo que encontró en el paso. Se quedaron en una de las habitaciones de la empresa mientras Yoongi acompañaba al omega.

Afortunadamente, aunque eran fieras especuladoras, Army no notó la ausencia de dos miembros, ya que la empresa afirmó  que estaban en sus días libres. Aún así, unos cuantos preguntaron por qué no publicaban nada en las redes sociales. "Yoongi está en casa de su familia", contó Hobi en un VLive, "sobre Jimin, no sé, ya debería estar irrumpiendo en mi estudio", mintió.

En fin, cuando los cinco miembros de Bangtan llegaron al departamento, éste ya había sido ventilado por personal privado, evitando que se encontraran con el olor a sexo que invadía cada espacio. Uno a uno pasaron a la sala, donde Yoongi estaba sentado sobre el viejo sofá mirando concentradamente a su teléfono.

-¿Dónde está Jimin?- Preguntó Taehyung con el ceño fruncido.

-No lo sé...

-¿Cómo que no sabes? Hyung, ¿acaso se fue?- El beta le dirigió una mirada enfadada y una extraña mueca de su boca.

-No creo, debe andar por ahí- Respondió sin despegar los ojos de la pantalla del aparato.

-¡Agh!- Tae bufó y comenzó a caminar por el departamento buscando a su mejor amigo. El resto de los chicos lo vieron moverse y compartieron miradas. Al parecer, aún no se le pasaba el enfado.

"Discretamente" fueron abandonando la sala, yendo cada uno a su habitación, o la cocina en caso de Jin. Sólo Hoseok se quedó en su lugar, parado junto al sofá, desde donde observaba a su mejor amigo con una extraña mueca.

-¿Qué?- Yoongi seguía con su mirada fija en su teléfono sin atreverse a levantarla. Estaba más o menos preparado para el regaño de sus compañeros. Es que cuando la confusa nebulosa del celo de Jimin pasó, el rapero fue consciente de lo que había hecho. Un peso enorme había recaído sobre sus hombros de pronto. Y ahora allí estaba, teniendo que aceptar que había actuado como un completo imbécil y, para colmo, con el sobreprotegido omega del grupo.

-¿Cómo estás?- Preguntó Hobi con más ánimo de lo esperado.

-¿Eh?- Yoongi se volteó hacia el beta, quien lentamente iba formando una sonrisa cálida -Bien...

-¿Bien?- Se sentó junto al alfa y le sacudió su cabello, ganándose un bufido -¿No quieres hablar de nada?

-¿Hablar de qué?

-No se responde con otra pregunta.

-No sé qué quieres que te cuente- El peligris ya tenía el ceño fruncido, pero eso jamás había sido un obstáculo para su curioso amigo.

-Oye, ¿tengo que mencionar que pasaste con Jimin uno de sus celos? No creo que haya sido una experiencia menor.

Yoongi bajó la mirada y tapó su rostro con sus manos mientras gruñía -Lo sé, lo sé...- Se apoyó por completo contra el respaldar y echó la cabeza hacia atrás mirando al techo -Es todo tan raro...

-¿Raro cómo?

-Bueno... Está mal lo que hice, ¿no?- Le dirigió una rápida mirada a Hoseok, quien asintió con la cabeza -Pero debo ser un terrible amigo porque lo volvería a hacer cien veces...

-...

-Y sé que sólo me prestó atención porque sus instintos estaban como locos...- Se dio el lujo de sonreír un poco- Lo que es asqueroso, pero fue increíble que me tratara...