La Carta

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La menor solo observó aquella hoja con temor, no sabía en qué momento el azabache había dejado aquella carta en su habitación, pero sabía que el contenido que está tuviera podría ayudarlos, les ayudaría entender por el camino que Keith tuvo que pasar, pero también sería difícil de leer para ella. Hunk le tendía aquella hoja, pero no estaba segura de si debía de leerla o tan si quiera si podría hacerlo, durante unos largos segundos en los que solo hubo pánico en ambos hasta que prendieron las luces de su habitación no había podido tocar aquella simple hoja de papel. Solo cuando cerró sus ojos y soltó un largo como profundo suspiró fue cuando pudo tomar aquella hoja, con cautela y una inquietud que no podía entender ella misma, por unos momentos solo se tomó el tiempo para apreciar la fina y realmente marcada caligrafía que el azabache poseía a comparación con la de Lance, la caligrafía del moreno era mucho más fluida, rápidamente solo negó, se estaba perdiendo en sus pensamientos y evitando lo que sabía que ella debía de hacer.

-Pidge y Hunk- comenzó finalmente la menor, Hunk se encontraba a su lado, ambos ahora se encontraban sentados en el suelo y se miraban entre sí con inseguridad, pero algo en la mirada del robusto provocaba que Pidge sintiera la inquietud aumentar y que el ambiente se volviera cada vez más tenso. -Se que cuando termine el efecto no podre recordar ciertas cosas y por eso escribo ésto- leyó la menor en voz alta. -Cuando regrese a la normalidad, quizás lo menos que vaya a hacer será cooperar y aún hay tantas cosas que les hace falta saber- la menor miró al mayor y este solamente desvío su mirada mientras jugaba con sus manos. -Sí te soy sincero ahora mismo no sé por dónde comenzar, ¿Qué debería decirles para poder ayudar?- Pidge comenzó a sentir como el palpitar de su corazón retumbaba en sus oídos y como éste mismo se sentía en su garganta. -Quizás solamente tenga que contar el origen de todo, ¿no?- la menor comenzó a sentir como sus manos comenzaban a sudar, ¿Por qué tanta tensión por solamente unas palabras? ¡Por Dios! Ni siquiera Keith lo  estaba diciendo en persona, ¿Por qué se sentía aquel ambiente tan tenso?

-¿Quieres que yo lo haga?- preguntó el mayor al notar las acciones de la menor, Pidge giró levemente su rostro y devolvió su mirada a la carta, trago en seco.

-Tengo que hacerlo- susurró. -Sí no lo hago, no seré capaz de lograr ayudar por mí misma a Keith- suspiró, al menos eso es lo que pensaba la menor, ya que ¿Cómo podía ayudarlo si no podía hacer algo tan simple? Suspiró y cerró sus ojos por unos segundos, respiró hondo y sacó aquel aire lentamente. Tenía que calmarse. -Como ya sabes, Pidge y supongo que Hunk ya lo suponía, mi atracción por Lance comenzó desde el inicio de todo ésto. La primera vez que los vi cuando salvamos a Shiro y el vino hacía mí me sentí extraño con su presencia, supongo que al principio solo era el tipo de chico que podría atraerme, por unos momentos incluso olvidé la situación en la que nos encontrábamos, ¿Cómo es que alguien puede causarte algo así?- Pidge sonrió ante aquellos recuerdos. -Siempre me pregunté el porqué nunca había notado aquellos ojos- la menor miró a Hunk el cual le sonrió con paciencia y comprensión. -Dejando eso de lado, siempre creí que nadie notaría mi extraño enamoramiento por Lance, pero el único que lo hizo fue Shiro, claro que el me apoyo y animo a que algún día debía decirle, pero jamás lo hice. No me sentía capaz de hacerlo, no me sentía lo suficiente para poder declarar lo que él provocó, todo claramente empeoró después de que Shiro desapareció- Pidge suspiró y ajustó sus lentes con lentitud, en aquel acto la imagen de Keith roto vino a su mente. -No tenía a nadie más como apoyo y desde que me volví el líder de Voltron mi inseguridad de liderar el equipo fue aumentando, pese a que alguna vez Shiro había dicho que tomaría si lugar sí algo le sucedía... Fui tonto al creer que eso jamás pasaría, en ocasiones no podía diferenciar o apartar mi vida personal cuando estábamos en las misiones, me sentía obligado a hacer algo que simplemente sentía que no podía hacer. Estaba frustrado, dolido y desesperado, "¿Por qué?" era lo único que me preguntaba, yo no podía ser el reemplazo de alguien, mucho  menos si ese alguien se trataba de Shiro, cuando el solo se fue deje de vernos como un equipo- Pidge sintió como un pequeño nudo se formaba en su garganta y tras esas palabras Hunk bajó la mirada al suelo con aquella presión en su pecho, ¿Cómo podía considerarlos su equipo y apoyo si ellos nunca notaron su dolor? -Ser el líder Voltron y guiarlos a ustedes era como una carga que no podía soportar, pero que aún así no podía abandonar. Porque apesar de todo ustedes son lo único que tengo, lo único que realmente me queda...- El corazón del grandulon comenzó a quebrarse con lentitud y el control de la menor se fue esfumado, dejando que las emociones la consumirán con lentitud.

-¿Cómo fue que nunca nos dimos cuenta?- exclamó el mayor. -Pidge, ¿Cómo nunca lo notamos si era algo tan obvio?- suspiró y apreto sus labios tras aquel comentario.

-Estábamos tan metidos en que todo estaba bien- susurró la menor. -Nos tragamos la mentira de que Keith era así- agregó mientras apartaba su mirada de aquella hoja. -Nunca miramos de cerca a Keith- suspiró y aquel nudo en su garganta provocaba que sus palabras se dificultarán, pero aún así trataba de mantener la calma, pero ¿Cómo hacerlo si fueron tan ciegos? -Guarde lo que sentía porque pensaba que era lo mejor, ustedes confiaban en que yo era el ideal para hacerlo- prosiguió. -Pero sólo aquello provocó que me hundirá con lentitud y aquel dolor aumentó al ver como Lance se había enamorado terriblemente de Allura que yo ya no podía hacer nada y solamente observaba a lo lejos como cada cosa Lance se lo reservaba solamente para Allura y aquello... Dolía demasiado- Pidge seco una de sus manos en su ropa y suspiró mientras tragaba en seco. -Supongo que lo único que pueden hacer ya es decirme la verdad, porque por mí mismo nunca les diría esto. La única alternativa que queda es que me digan que lo saben todo y que nos sentemos a hablar, porque cuando regrese a la normalidad siento que haría cualquier cosa para que esto acabe de una vez- finalizó la menor, tenía la garganta seca.

-Somos unos completos idiotas- suspiró el mayor. -Unos idiotas- repitió y sonrió con amargura.

-Lo sé...- suspiró la menor. -Todos nosotros lo somos- aseguró con cierto dolor. -Nosotros y Lance principalmente- una pequeña mueca se formó en el rostro de la menor y colocó la hoja con lentitud aún lado suyo. -Lance se enamoro de la persona equivocada, la cual está enamorada de alguien más y nosotros fuimos tan idiotas al no mirar a Keith- suspiro. -Sí Shiro estuviera aquí sabría que hacer- suspiró la menor. -Él lo hubiera notado- las lágrimas comenzaron a recorrer las mejillas claras de la menor y Hunk lo único que pudo hacer es rodearla con sus brazos mientras el trataba de olvidar la presión que crecía en su pecho. Los pequeños ratones miraban aquella escena con sus orejas bajas y se miraron entre sí con desconcierto, sin apartar la mirada de ambos se alejaron con lentitud, Allura tenía que saberlo.

¡Hola!
Oigan perdón si cambio algunas cosas, como por ejemplo el que quizás haya mejorado la línea del tiempo de la serie, pero es que yo no tengo Netflix y nunca supe realmente en donde y cuando sucede cada cosa, así que perdón si adelante la aparición de Lotor en Voltron y atrase el que Shiro haya regresado.
(Realmente no estoy muy segura de que si es así la línea del tiempo original) solamente quería aclarar ésto y que aquí Lotor nunca muere (💔) y que está de lado de la espada de marmona y por eso se tuvo que ir (Es bueno aquí también) ésto era todo mis queridos lectores, gracias por todo y nos vemos hasta la próxima.
Bye~

Descubierto [Klance/Laith] (Concluida) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora