Hela's Warriors

Capítulo 1

Narra Laila:

Viernes, 19:48 pm
Helheim

Me encuentro en Helheim. Hogar dulce hogar. Aunque creo que mejor dicho sería: hogar sangriento hogar.

Empiezo a admirar el putrefacto paisaje. ¿Esto a mi madre le parece bonito? A mí, no. Una cosa es matar, y la otra, tener los cadáveres como decoración del hogar. Hay un río de sangre. Pienso acercarme pero lo más seguro es que en la parte más profunda me encuentre con el monstruo del Lago Ness. ¿A Nessie lo tiene de mascota? Creo que mi madre debería traer a una decoradora, aunque creo que le daría un ataque al corazón. Creo que mirando el "paisaje" he cogido un cáncer ocular de tercer grado. A lo lejos, veo a mi madre con ese swag que sólo ella tiene.

Laila: Mami, ¿y ese flow?

Hela: A mí no me hables en inglés. Me hablas que te entienda.

Laila: Relaja la raja. ¿Quieres un porrillo para ese estrés que me llevas?

Hela: Genial, otra puta drogata.

Laila: Mami, acabas de hablar en voz alta. ¿Lo sabes, no? Y yo no me drogo. Lo he comprado especialmente para tí, para eliminar esa amargura crónica.

Hela: Entonces... ¿No te drogas?

Laila: ¿Yo? ¿Drogarme? ¿Qué te has fumao?

Hela: ...   Vamos a Midgard. Te voy a presentar a alguien.

Laila: ¿Yo? ¿A esa mierda de sitio?

Hela: Vienes y punto.

Mi madre abre un portal hacia Midgard, y yo lo atravieso junto a ella. Me paro frente a una tienda de televisiones. Está el canal de las noticias y me detengo a ver la que están dando en este momento.

Noticias: Una psicópata adicta al azúcar está atracando la tienda de comestibles de la Segunda Avenida. Por favor, no se acerquen, es altamente peligrosa. Las autoridades han confirmado que los dependientes de la tienda aún están escondidos en el armario de la despensa. Según nuestras fuentes, se cree que la atracadora es Crystal Stark, la hija con problemas psicológicos del billonario Tony Stark, más conocido como Ironman.

La noticia termina, y oigo una explosión unas casas más abajo, en una tienda. En ese momento me fijo en el nombre de la calle en la que estoy. La Segunda Avenida.