Los guardianes- La nueva generación

Misiones difíciles

Era una mañana tranquila para todos en el palacio, todos estaban preparándose para sus misiones el día de hoy, perdón Lu estaba en la cocina y tenía una mochila en la mesa al parecer algo grande e inflada, Lu estaba sonriendo tarareando un poco-

Bien termine -dijo Lu sonriendo, frente a ella estaban tres paquetes, uno envuelto en una tela verdad, otro en una tela roja, y el último en una tela morada- espero que a mi hermana y a Isaac les gusto esto -como los tres paquetes y salió de la cocina, estaba sonriendo cargando la mochila y los tres paquetes, llegó al patio donde estaba Himiko sonriendo viendo el sol salir-

Hay no puedo esperar para ir a Kindomg Valley -dijo Himiko sonriendo-

Tranquila hija apenas va a amanecer correctamente -dijo Po sonriendo-

Esperen... ¿Himiko dijiste Kindomg Valley? -dijo Tigresa preocupada-

Si mama, la misión es en ese lugar -dijo Himiko sonriendo-

No, no, no puedes ir a ahí, se le conoce como el Valle de la muerte, es muy peligroso -dijo Tigresa asustada-

Mama, es necesario que valla, el Guerrero Tigre me estará esperando ahí -dijo Himiko algo molesta- es necesario, tengo que cruzar parte del mar para llegar

¡¿El mar?! ¡Lo que nos faltaba nuestra hija se va al mar! -Tigresa gritó nerviosa-

Tigresa contrólate, el bebé -dijo Po preocupado, Tigresa respiró profundo y se fue calmando- es normal pero ella ya sabe qué hacer para este tipo de misión fue por la que la entrenamos

Además ya no soy una niña -dijo Himiko algo molesta- ya es hora de salir, ya no quiero estar en el palacio, quiero salir más allá, quiero hacer una misión más allá de estas tierras como ustedes -Himiko estaba sonriendo solo pensar que había más allá, Tigresa estaba preocupada por ella pero suspiro al recordar que ella hacía lo mismo a su edad-

Está bien...puedes...ir -dijo Tigresa preocupada-

Gracias, gracias, gracias -Himiko sonrió y le dio un abrazo a Tigresa, Tigresa sonrió y le regresó el abrazo-

Que bueno por ti hermana -dijo Lu sonriendo, Himiko sonrió y vio los paquetes de Lu-

¿Que tienes ahí? -dijo Himiko sonriendo-

Prepare algo de comer para ti, para mí y para Isaac -dijo Lu sonriendo, Himiko sonrió y Lu notó como Isaac estaba apoyado en la puerta con los ojos cerrados y de brazos cruzados- bueno son para el viaje

Ya sabes que él no dirá nada -dijo Himiko sonriendo-

No importa -dijo Lu sonriendo- me gusta cocinar más que nada -las dos hermanas estaban sonriendo, Po y Tigresa estaban sonriendo viendo a sus hijas hasta que Sai abrió la puerta del salón de los héroes de forma rápida-

¡Maestro Po, Maestra Tigresa! ¡La Gema del Dragón! -Sai gritó con fuerza y todos lo vieron sorprendidos, todos regresaron al salón para ver la gran estatua dorada donde la gema estaba en el hocico del dragón y brillaba con fuerza-

La gema está...brillando ¿por qué? -dijo Tigresa sorprendida-

No había tenido ninguna acción o movimiento en años -dijo Himiko sorprendida-

¿Que significa papa? -dijo Lu preocupada-

Está eligiendo a un nuevo Guardián -dijo Po sonriendo, Po le dio su bastón a Tigresa, se acercó al estante donde estaban los retratos de Oogway y Shifu con un altar con velas detrás- maestros...la hora ha llegado -tomó el antiguo bastón de Oogway, el cual tenía una cinta dorada todavía, todos se acercaron corriendo al salón-