Una SUBNORMAL entre creepypastas

2. ¡Me Muero!

Logré bajar sin ninguna parte de mi cuerpo malquebrada y salir corriendo al infinito y mas allá.

Entrando en el bosque me tropecé con un par de ramas. Escuché ruidos terroríficos (buhos, grillos, hermosas criaturas del bosque), así que me estaba cagando de miedo, quise sacar el celular y jugar a la culebrita (si no jugaste ese juego no tuviste infancia), pero se me olvidó dejarlo cargar por la noche por lo tanto, nunca más pude volver a ser feliz.

¡Exagerada!

¡Callate pensamiento de mierda!

Saque mi otra distracción, me senté bajo un árbol y empecé a leer, cuando de repente...

Isa: - ¡¡¡UN HORMIGERO!!!

Mi lindo trasero había decidido posarse en una divina creación del Señor. Saltando me alejé de ahí corriendo como si no hubiera un mañana y quitandome las hormigas del pantalon. De repente me dí cuenta de que había perdido mi distracción por algun lado.

Pasaron dos días en los que estuve en el bosque, y solo muy loca volvería al orfanato. Mejor morir de hambre. Se me acabó la comida y el fresco que traía, así que me estaba retorciendo en el piso cuando me puse a pensar...

No arriesgué mi vida para morir aquí como un feto.

Así que con toda la voluntada que me quedaba (que no era mucha) me levanté y continué mi camino. Seguía caminando cuando de repente ¡Río salvaje aparece! ¡Isa usa: beber como un animal compulsivamente! Y para aumentar mi buen humor un encontré un arbol de naranjas, así que hice mi baile de celebración (así como una foca epiléptica), mientras cantaba ¡AAAAALELUYA AAAAAALELUYA!

Me quedé a dormir ahí dos días más con una dieta a base de naranjas y agua.

Pero como la tonta, que soy decidí adentrarme más en el bosque con ramas, hormigueros y sonidos raros terroríficos.

Una casa hermosa de 3 pisos se atravesó en mi camino, y como no es normal  que una casa estuviera a mitad del bosque, hice lo que una persona normal haría: Tocar la puerta.

Pero al abrirse la puerta no encontré lo que estaba esperando...