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011; steve rogers [spoiler alert]

ADVERTENCIA; spoilers de end game, proseguir con precaución.

[2023]

El chasquido causó una serie de efectos en su anatomía: sus piernas se asemejaron a dos trozos de gelatina y una potente corriente electrica recorrió cada minúscula partícula que la componía. Sus rodillas golpearon contra la gélida superficie de cerámico, sintiéndose incapaz de moverse o siquiera emitir sonido.

  —¿Thea?

  Un par de voces masculinas resonaron en su cavidad auditiva. Aunque no logró reconocer a los dueños.

  Anthea observó sus temblorosas manos. La amarillenta tonalidad que había estado tiñendo su piel desde la destrucción de la gema de la mente desapareció, devolviéndole su vitalidad.

  —¿Funcionó? —fueron las primeras palabras que escaparon de sus labios.

—Al parecer lo ha hecho. Comienzas a regresar a tu estado habitual, procura mantener cerrada tu mente unos instantes —señaló Bruce.

Anthea sostuvo su mirada un par de segundos, su cerebro intentaba descifrar los millares de pensamientos e imágenes que lo azotaban. Se encontraba imposibilitada para crear barreras mentales lo suficientemente poderosas para detener la información que se adentraba en ella.

—¿Cómo te sientes?

—Una parte de mi alma desaparece cinco años, Natasha acaba de sacrificarse para devolverle la vida a las personas que amamos y preguntas, “¿cómo te sientes?” —Escuchó un par de susurros a sus espaldas, Clint entablaba una conversación con un sujeto desconocido— ¿Cómo crees que me siento, Rogers?

   El mencionado frunció sus facciones, mostrándose levemente enfadado por la rudeza en la contestación de su antigua pareja.

—¡Ha regresado!

—¿A qué se debe tanta emoción? —indagó Anthea, recobrando su postura.

—Dos cerebros potenciados piensan más que un cerebro que sobrepasa la media.

  La respuesta del millonario desconcertó a Anthea.

—Hay dos cerebros potenciados —señaló al gigantesco sujeto verde y a Tony con su dedo índice.

—Hablo de ti. Y tu otro tú.

   Cruzó sus brazos a la altura de su pecho. Detestaba que las personas la recalcaran la existencia de dos criaturas en su interior: Anthea McDonnal y un fragmento de la gema de la mente.

—Ayúdanos a devolver al universo a la normalidad.

  Conocía a la perfección las probabilidades de retomar el curso normal: una sola. Aunque desconocía las consecuencias futuras que acarrearía semejante plan.

—Steve...

—El universo ha regresado a la normalidad —afirmó Tony.

—Alguien debe hacer entender a la población que ha ocurrido. Devolverle el conocimiento para no crear pánico en masas y acabar llevando a cabo conflictos entre países.

  —¿Y piensas hacer que Anthea de explicaciones de qué sucedió?

   Un sentido de alerta despertó dentro de la joven. Algo grande estaba al acecho.
  
—Muchachos —murmuró, agudizando su observación.

   Sentía la presencia de criaturas no terrestres. Escuchaba cañones alistarse y una gruesa y familiar tonalidad de voz dando órdenes a un gigantesco ejército.

—¿Piensas dar tú las explicaciones, Stark?

—Parecen un matrimonio en crisis.

    Algo durante las travesías al pasado había ocurrido de manera errónea. El espacio-tiempo sufría alteraciones, dejando abierta la posibilidad de que la tierra en la que se encontraban se convierta en el blanco de varios universos alternativos.

—¡Muchachos! —vociferó, acallando la discusión entre el sujeto de cabellos rubios y el millonario.

—¿Qué?

   Un sonido resonó en su cavidad auditiva.

—Thanos está aquí.

   Instantes después, una lluvia de misiles se derramó sobre las instalaciones de los vengadores.

   Anthea empleó sus recién recobradas energías para construir un escudo lo suficientemente capaz de detenerlo. Pero, en un pestañeo, se hallaba enterrada debajo de una significativa cantidad de escombros, tosiendo el polvo introducido en sus pulmones e intentando quitar el trozo de metal clavado en su pierna derecha.

   Escuchó un ruido metálico lejano y una sarta de maldiciones que la dejaron anonadada.

—¡Lenguaje, Rogers!

  El soldado no respondió a las acusaciones y se dispuso a quitarle el fragmento metálico incrustado en su pierna.

  —¡Eres un maldito hijo de tu mamá! —masculló, apretando sus dientes cuando la pieza fue retirada por completo— ¡Podrías haber sido menos bruto!

—¿Seguirás maldiciendo a diestra y siniestra o prefieres ir a golpearle el trasero a Thanos?

  Anthea finalizó de amarrar un trozo de su vestimenta a la punzante herida, para cortar con el sangrado.

  —Y el trasero de América también.

Se encaminó a presentarle batalla al titán loco, cuando los musculosos brazos del capitán le impidieron la huida.

Antes de que Anthea pudiera pronunciar una queja o siquiera sonido al respecto, los labios contrarios se apoyaron sobre los propios.

—¿Es tu manera de decir “lo lamento”?

—En realidad es mi amuleto de la buena suerte. La última vez que no hice perdimos a mitad del universo. No queremos que suceda lo mismo, ¿verdad?

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hola! 🙋

  *me lanzan lo que venga por tardarme siglos*
mi excusa va a ser: es imposible sobrevivir a end game :((((

pd; los siguientes imaginas tendrán spoilers de end game.