... se conocieron como el sol y la luna, no se buscaron, pero fue el momento perfecto para el eclipse, el sol, la tierra y la luna se alineaban por primera vez, la órbita trazó la misma dirección y como el eclipse, él, ella y el lugar estaban en el mismo trayecto.
Ella, es Luna, es naturaleza, ella es arte.
Como la luna llena alumbra lo más oscuro, por más estrellas, será el centro de atención, todos los ojos estarán puesto en ella, el clima se rinde a sus pies y desplaza una calidad brisa que acaricia. Él aunque es sol y lo sabe, no fue la excepción, sus ojos fueron puestos en ella, aunque con disimulo.
El eclipse era solar, pero la luna fue el centro de atención, todos se olvidaron del sol y se enfocaron en la luna, ella irradiando paz aunque no estaba en su zona de confort se sentía como en casa.
... Él entró como siempre, dándose a sentir, irradiando calor a todos, pero sus ojos conectaron con 2 ojos dulce, que hacían un juego perfecto con una delicada sonrisa, quedó idiotizado... intento continuar dando calor, pero la ternura de ella lo hizo hablar estupideces.Sus ojos, como todo lo natural desplegaban perfección, mirada suaves y seguras, tan seguras que excedía lo sensual. Esos ojitos no se olvidan, no se olvidan ni con malas memorias. La primera sonrisa que le brindo, fue el primer rayo para iniciar el eclipse, que desde ese momento no se podía decir que era solar.
No había lugar para más, ella ocupaba todo, es arte y como todo arte aunque en ocasiones no se entienda es hermoso y tiene un valor costoso, su arte la hacía dejar huellas donde pisaba. Caminaba con perfección, los pies se movían al compás de sus brazos, y su cadera al ritmo de sus ojos brillantes...El eclipse es efímero, este no era la excepción, terminó, el quedó con sed de sus ojos...
Paso el tiempo, el pensaba en ella, pensaba en esa sonrisa dulce que lo enloqueció, buscaba la forma para volver a verle, provocando todos los escenarios posibles, y como todo estratega y conocedor de la comodidad de la Luna, provocó el apagón del siglo, de forma natural el encuentro se dio, bueno eso pensaba ella, no imaginaba que la naturaleza nada tenía que ver...
.... El reloj lo desesperaba, el móvil en 5% de carga y ella con 45 minutos de retraso... Cómo todo lo perfecto llega en el momento indicado, antes del celular apagarse la sonrisa de ella le saludo, una sonrisa cálida mezcladas con un disculpas y sin excusas, por segunda ocasión le dejo idiotizado, con voz suave le dijo vamos y como el sol al atardecer siguió su trayecto.
Caminaban con dirección, pero sin querer llegar. Hablaban de todo, en ocasiones incoherentes en otras no tanto, trataba de estar lo más calmado posible y evitar que ella notará sus nerviosismo, el encuentro fue perfecto, rodeado de decenas de personas que como ellos fueron por el apagón, el arte brillo, rieron hasta no parar y sin explicación lloraron de felicidad.
Con una mirada a los ojos y una promesa mutua de volverse a ver se despidieron, el abrazo fue tan fuerte que lo sintieron por días. Se alejaron conectando sus ojos y una delicada sonrisas que le salían del alma, una comunicación que solo ellos entendían.
Él, una vez más quedó cegado, por la perfección de ella, pero con todo y tener esos encuentros el no imaginaba que desde aquel dial que ella vio sus ojos y el calor que el irradiaba no dejaba de pensar en él.De forma extraordinaria ambos se iban a la cama y se encontraba en sus sueños.
Después de varios meses ella continuaba con sus rutinas y cumpliendo sus compromisos, él de igual forma.
Ambos estaban conectado por un vacío, procesos distintos que lo hacían luchar, quizás depresión o negación a aceptar la realidad.
En unos de esos días ella salia a cumplir sus compromisos y como todo empezó, la naturaleza preparaba el segundo eclipse... Ambos cumpliendo con sus trabajos, llegaron al mismo lugar, a la misma hora. El mundo se paralizó, un simple hola daría inicio a una historia maravillosa, pasarían dos días en el mismo lugar, la naturaleza era su aliado, el arte su compañero.
Caminaron todo el lugar, tomando sus bebidas favoritas, reían sin parar, el objetivo era conocer las instalaciones, eso fue solo una excusa para uno acompañar al otro.
Decidieron sentarse y conversar, los temas iban desde la simplicidad de las lluvias hasta las complejidades del universo.
Al caer la noche llego compañía y todo se volvió una fiesta, baile, karaoke y lo más importante risas, en una de esas risas, en unos de esos juegos, los ojos se buscaron y como imán los labios se unieron, todo paso rápido, ambos se apartaron, pensaron en lo que había sucedido. La fiesta culminó, él salió a caminar, no imaginaba que la encontraría, la magia se hizo de la noche, el sacó una botella de vino, música de fondo, desde Ricardo Arjona, Sin Bandera,Santiago Cruz... Hasta Facundo Cabral. Instalaron una conversación, él la abrazaba, tomaba su pelo, acariciaba su delicado rostro, ella correspondía tocando sus manos, en un instante sus labios tocaron lo de ella, con timidez correspondió. Entre abrazo subieron a la habitación, hablaron, los besos y las caricias se adueñaron de la noche, la respiración acelerada era constante, los besos iban desde calmado a violento...
Mi corazón latía a mil, aún recuerdo esas palabras " es por los besos que estás así" a lo que asentí que sí con la cabeza, ella sonrió y me miró a los ojos, (esos ojos brillaron más que nunca esa noche) como pones los ojos...
La alarma nos despertó a las 12... Y desde ese día ya no espero un eclipse efímero, espero un día normal, en el que pueda verla cuando desee... Esta historia es sobre mí, narrada en tercera persona...Yeudy M. Serrano Mejia
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Eclipse
RomanceEl amor es simple los complejos somos nosotros. Eclipse es la historia de un amor espontáneo de esos que llamamos a primera vista, de esos que la naturaleza se compone para que sea una realidad, y como su nombre lo indica la alineación y el momento...