Respiré, era lo único que podía hacer, respirar. Sentía todavía el calor de sus manos, como no las había soltado hasta que tuvo que partir y su cuerpo abrazándome diciendo que no debería ser así. Lo supe en el mismo minuto que se había ido, pero ya era muy tarde. Una parte de mí ya no estaba y no volvería a ser igual.
Mientras caminaba por la casa vacía sus ojos aparecieron en mi mente, rompiéndome el corazón, recordé sus suplicas, su voz diciendo que cambiara de idea, y contándome sus sueños de una vida juntos. No había sido fácil convencerle que era lo mejor para los dos, permanecía inflexible. En poco tiempo habíamos tenido nuestro principio y fin.
Papá no lo había aceptado, tal fue su frialdad y negativa al no querer recibirlo, ni verlo, pensaba que era algo degradante estar con él. ¡Ana Elliot no podía malograrse y caer en la desgracia con un chico así! ¡Ana Elliot con todo el futuro por delante, bella e inteligente, con sus 19 años, comprometerse con un joven sin trabajo, sin estudios y sin familia, hundirme en la desgracia de una angustiosa pobre vida! Lo impedía a toda costa, repitiéndome que es lo que hubiera querido mi madre, me recogió después de clases hasta que termino el año, me quitó el teléfono, y por último no me dejo salir de casa.
Sin embargo ninguno de sus intentos nos había detenido, el dinero ¿Qué era eso comparado con el amor, comparado con el sentimiento grande de encontrar tu compañero, un amigo, un sueño? Él no era un don nadie como decía papá, él era Frederick Wentworth, quien había tomado mi mano y me había mostrado un mundo nuevo. El tiempo se había detenido y el invierno había llegado a ser primavera. Entonces todo lo que para mí había sido importante cambió. Nuestras fantasías iban mucho más allá de la ciudad donde vivíamos. Durante medio año tuvimos las mejores aventuras, él era brillante y con una inteligencia increíble, se le ocurrían unas cosas en la que siempre me hacia reír. Y en los momentos en que la tristeza llegó, él por la muerte de sus padres y yo por mi madre, nos apoyamos el uno en el otro y encontramos la fuerza para continuar. Fue fácil, rápido y profundo nuestro amor, nunca me había enamorado y comprendí que iba ser difícil volverlo hacer. ¿Cuál de los dos soñó con una vida entera junto al otro? ¿Cuál de los dos fue inmensamente feliz cuando confesamos lo que sentíamos, yo al escuchar su declaración y proposición o él al escuchar mi respuesta?
Entonces fue cuando llego Tía Mónica, la cual era mi mejor amiga y ahora una madre para mí, aceptó conocerlo y fue amable con él. Pero al dejarme en casa fue firme su opinión, no quería que lo viera más. La sola idea fue un flechazo. Frederick le había contado sus metas de viajar por el mundo y hacer videos, confiaba en ser rico pronto. Lleno de fuego y de vida, sabia que podía hacer crecer un negocio que se iría expandiendo en el turismo. Esta confianza poderosa y su manera entusiasta de expresarla me bastaba para creerle; pero Tía Mónica lo vio de otra manera. Lo veía como un simple soñador, que no llegaría a nada, la atrevida fantasía que se fundaba en una idea que no se había visto antes le causaba horror. Lo tildo de irrazonable, testarudo, e incluso peligroso. Así pues, me lo dejo claro con sus comentarios y llamadas lo desafortunado que era involucrarme con él y lo terrible que sería para mi futuro. Me dijo que despertara y pensara bien. ¿Qué pasaría con mi carrera que había empezado? ¿Casarme y viajar con él a quien sabe dónde? ¿Cómo viviríamos? ¿Qué comeríamos? Alejada de mi familia y de mi casa, el cual mi madre había luchado tanto para dejármela como herencia. Nunca lo aceptaría, lloro pidiéndome que reconsiderara mi respuesta, habló las mil razones por las que sabía que nada terminaría bien. La última fue la que me hizo pensar, yo no era suficiente para él, no tenía nada que ofrecer, era joven e inexperta. Y sería una carga en vez de una ayuda. Nunca había trabajado y nunca había salido de la ciudad. Fue entonces cuando tuve miedo. Sumando las amenazas de papá que haría todo lo que estuviera en su alcance para que su negocio no funcionara.
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Juntos en un Sueño (Pausada)
Romance(FANFIC: Basado en el libro de Persuasión de Jane Austen) Ana Elliot nunca encajó en su familia, con todos sus egos y altanería por ser de una clase social diferente, ahora han caído en bancarrota. Años atrás había rechazado al hombre que amaba por...