Colina Norte era una pequeña ciudad rodeada de árboles, el centro estaba rodeada de casas con estilo alemán debido a una colonia que había llegado hace mucho tiempo. Luego estaban las casonas que estaban en la colinas, grandes y distanciadas unas de las otras.
En la villa hermosa quedaba la casa de Mary, que era en sí, una extensión de la casa de los Musgrove. Las dos familias estaban juntas constantemente y tenían tal costumbre de entrar y salir de una casa a la otra a todas horas que al llegar, me asombró encontrar a Mary sola echada en su sillón de la sala. Mary solía "enfermarse" y derrumbarse por cualquier cosa, a menudo confundía cualquier cosa pequeña para quedarse un día en cama o viajar a otro lado por descanso. Había heredado la presunción de papa y solía alegrarse con los chismes e imperfecciones que tenían los demás. Cuando me vio dijo:
¡Por fin llegas! Ya pensaba que nunca vendrías. Estoy con un dolor de cabeza terrible, creo que es el peor de todo el año, en cualquier momento me encontraran muerta aquí y nadie lo sabrá.
-Lamento que no te encuentre bien- le dije-pero ayer me dijiste que había sido un buen día y que no era necesario que me apurara en venir.
-Si luego te contaré lo que me enteré de Los Pérez, es terrible, tuvieron una pelea pública en la plaza.-
-¿Y dónde están los niños?
-¡Jesús! Son tan traviesos que me hacen un terrible mal que bien. No obedecen en nada, y Walter Junior crece odiándome.
-Bueno; ahora te pondrás mejor. Te ayudare en todo lo que pueda.
Al poco rato de ayudarla a levantarse y darle un fiambre Mary olvidó su tristeza, y decidió que se necesitaban flores en el salón y que un paseo serviría para relajarse.
Los Musgrove era una familia particular, muy diferente a lo que conocía. Walter e Isabel, los padres, eran personas hogareñas y acostumbradas al campo. Cariñosas, graciosas y de tradición. Por otro lado sus hijos habiéndose educado todos en un internado por las influencias de mi padre, en decidir la mejor educación, eran modernos, acostumbrados a saber lo último de los deportes, celebridades y moda.
Charles, el hijo mayor, había cambiado después de lo que tuvo con Anna, y nunca lo volvió a mencionar. Era muy fino y simpático y sin duda su juicio y carácter era superior al de Mary. Quizás hubiera sido diferente si no se hubieran conocido, pero lo habían hecho y años después se llevaban en un acuerdo sano de amistad. Siempre me había asombrado la paciencia que él le tenía a Mary, nunca parecía afectarse demasiado por las "enfermedades" de ella, la soportaba y hasta gozaba de humor para pasar tiempo con los niños. Tenían peleas a menudo pero eran muy cortas y después de unos minutos estaban hablando de cómo conseguir más dinero de los padres de Charles.
Al pensar en dos meses viviendo en esa casa me pareció muy largo. De todas maneras decidí que era lo mejor en mi caso, los días se pasaban en la casa pequeña de Charles y la casa grande de los Musgrove que diariamente visitaban. Mi trabajo llego a ser el de mediadora, de la madre de Charles con Mary, de Charles con Mary y de sus hijos con Mary.
La mayoría de veces no tenía que decir nada solo escucharlos. Otras veces solo debía decir "es cierto" o ponerse de acuerdo con los dos lados, aunque a mí pensar los Musgrove tenían la razón la mayoría de veces. Algunos días me alejaba al bosque y escuchaba música o leía un libro. Era como recibir oxígeno en un ambiente intoxicado.
La música me calmaba y me llevaba a otro lugar. Hubiera querido aprender a tocar piano o guitarra, pero desde los catorce años cuando mi madre enfermó no había sido alentada por nada. Así que solo me dedicaba a cantar cuando no podían escuchar, o a leer algo que hiciera volar mi mente. En las noches paseaba por la casa o el jardín, la luna era la mejor compañía para reflexionar que iba hacer con mi vida. Y como tantas veces mi mente siempre terminaba en Frederick Wentworth y en que quizás traería a su novia, esposa o incluso hijos aquí. Eso aunque no quisiera me hería y me deprimía.
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Juntos en un Sueño (Pausada)
Romance(FANFIC: Basado en el libro de Persuasión de Jane Austen) Ana Elliot nunca encajó en su familia, con todos sus egos y altanería por ser de una clase social diferente, ahora han caído en bancarrota. Años atrás había rechazado al hombre que amaba por...