Buscando el Amor ||Taekook - Omegaverse|| EDITANDO

"Treinta y uno"

Taehyung caminaba junto a Minghao, podía sentirlo, Jungkook estaba cerca, sentía su piel picar en necesidad de tener cerca al omega, su alfa rasgando la superficie para salir. A unos metros pudo distinguir la bodega con un número siete sobre la puerta, caminó más rápido y cuando estaba por abrirla, lo escuchó.

— ¡Suéltame! — Claramente era la voz de Jungkook.— ¡Ah, que me lastimas! — Solo eso, solo escuchar eso fue suficiente para que perdiera todo el control que tenía, podía escuchar perfectamente, el dolor en la voz de su chico, alguien estaba lastimando a su pareja, su delicada y frágil pareja que ahora estaba embarazada.

Sin esperar un segundo más abrió la puerta, el panorama que se encontró no era mejor de lo que su mente ya estaba imaginando, ahí frente a él estaba Yesung tomando a Jungkook de un brazo y con la mano en el aire listo para golpear el rostro de su omega, su Jungkook, el padre de su hija.

Hizo lo que su alfa exigía.

— ¡Suéltalo! — Gruñó con todo el poder que tenía, su alfa estaba histérico, primero se llevaron a Jungkook y lo dejan dormir en el suelo frío y húmedo, lo más seguro es que no comiera nada y por último intentan golpearlo.

El plan inicial de Taehyung era tomar a Jungkook y salir de ahí, dejar que las autoridades se encargarán de Yesung y Sunmi, pero ahora viendo lo que el hombre iba a hacer, su alfa no se conformaría con menos que la muerte.

Al escuchar la voz de Taehyung, Yesung sintió todos sus músculos tensarse, intentó moverse, quería enfrentar al alfa, pero por más que lo intentara era imposible, su propio alfa se negaba a hacerle frente a Taehyung, sabía que perderían y su instinto de autoconservación se negaba a actuar de forma tan tonta.

Jungkook escucho la voz de Taehyung tronar en sus oídos, se quedó completamente rígido en su lugar, no había escuchado la voz de un alfa, sólo la de Eric en una ocasión pero ni de chiste era tan poderosa como la de Taehyung, sintió a su omega hacerse pequeño y tratar de esconderse, miró en dirección a Taehyung y se concentró en la idea de que el alfa nunca le haría daño y dejó que la sensación de pánico se diluyera, cuando fue posible que se moviera empezó a caminar hacia Taehyung, pasos cortos, en cuanto vio que el alfa lo mira no lo dudo y corrió para lanzarse a sus brazos, una vez frente a él, se abrazó a su cuello y enterró el rostro en el pecho del mayor sintiendo su aroma y calmándose, las lágrimas salían de su ojos sin que fuera realmente consciente de eso.

Taehyung vio como Jungkook caminaba de forma lenta hacia él, parecía asustado, no sabía si era por la situación o por él, esperaba que no fuera la segunda opción, no resistiría saber que Jungkook le tenía miedo. Cuando el chico lo abrazo y pudo sentir su dulce aroma logró calmarse un poco pero su alfa aún estaba demasiado furioso, acarició el cabello del chico para ayudar a calmarlo mientras miraba a Yesung, quien le regresaba una mirada llena de odio. Fue sentir la primera lágrima mojar su camisa cuando todo perdió el control, Jungkook estaba llorando, todo por culpa de los Bae.

Fuera de sí, soltó de la forma más delicada que le fue posible en su estado a Jungkook y se lanzó contra Yesung dándoles un gran puñetazo en la nariz, escucho el hueso quebrase y sonrió satisfecho. Yesung vio al alfa acercarse demasiado rápido y aunque trato de huir sus piernas no se lo permitieron pues apenas sintió el golpe de Taehyung, cayó redondo al suelo. El furioso alfa se colocó sobre él para comenzar una serie de puñetazos en su rostro y costados, trató de cubrirse de los golpes, pero Taehyung tomó sus brazos y tiró de ellos, sintió como el hueso de su hombro salía de su lugar con un horrible chasquido.

Un fuerte golpe en el estómago le hizo perder todo el aire y escupir sangre, sentía su cabeza punzar y un gran dolor en todo el cuerpo, sentía que estaba a punto de desmayarse y fue cuando Taehyung le dio otro golpe en el rostro con más fuerza que los anteriores, logrando que se rompiera su pómulo. Taehyung se inclinó para quedar con su boca a la altura de su oído.