𝙵𝙰𝙺𝙴 𝙻𝙾𝚅𝙴 ➳ 𝐅𝐈𝐋𝐋𝐈𝐄

•6•

Alitzah_la_loca esto es por ti, mi amor. ♡

Millie despertó, no tenía ganas de salir hoy, después de aquella noche donde el chico que le gusta le dijo la propuesta para la chica que le gusta. Creo que no tuvo la mejor noche.

Se levantó y bajó las escaleras, el olor a waffles invadió su nariz y pudo oír a su madre tararear una canción.

Millie sonrió ya que le encantaba oír a su madre cantar, cree que sacó de su madre lo del canto, y tal vez sea verdad. A la castaña le encanta cantar en su tiempo libre, algunas personas dicen que canta mal y que debería de dejar de hacerlo, pero, ella solo ignora y hace lo que a ella le gusta.

Claro que, a veces se siente mal por todos esos malos comentarios.

La mayoría son sobre que siempre quiere sobresalir, que no deja hablar a los demás en las entrevistas, que Jack se siente incómodo cuando está con ella, etc.

Ella da su mejor cara para esos comentarios, pero, en el interior y detrás de esa máscara fuerte, hay una chica que se deja llevar.

Al entrar a la cocina su madre se dió vuelta y le dió una cálida sonrisa.

— Hola, mi vida. — Le dijo mientras colocaba un waffle sobre el plato.

— Hola, ma. — Le contestó la castaña mientras le daba un beso en la mejilla.— Huele bien. — se sentó en la mesa y cerró los ojos mié tras disfrutaba del olor.

— Gracias, lo preparé con mucho amor. — Comentó mientras se sentaba enfrente de la chica.

Su madre es una persona muy agradable, además de ser una mujer muy positiva y trabajadora. Millie toda su vida la ha admirado, ya que siempre saca una sonrisa en los momentos más difíciles y lucha por salir adelante, nunca se deja vencer a pesar de que esa amenaza sea más fuerte que ella.

— ¿Dónde están los demás? — preguntó Millie mientras le ponía crema batida sobre su waffle.

— Fueron a comprar unas cosas, ya es tarde, Mills.

— ¿Qué hora es?

— Las dos de la tarde. — Millie no pudo evitar atragantarse con el pedazo de waffle.

— ¡¿Qué?! — preguntó mientras recuperaba el aliento.

— Son las dos de la tarde — repitió — ni siquiera sé por qué te levantaste tan tarde, se supone que te quedaste a dormir. — Millie río nerviosa mientras volvía a comer. — Si hiciste eso ¿No?

— Yo...

Para la suerte de Millie, su familia entraba por la puerta.

— ¡Volvimos! — gritó Eva al entrar.

— ¡Estamos aquí! No hay necesidad de gritar. — dijo Millie mientras seguía comiendo.

— ¡Millie! Despertaste, creí que habías muerto. — dijo Paige mientras caminaba hacia ella y reía.

— Muy graciosa, solo dormí unas horas de más.

— Como cinco horas de más, hermana. — comentó Charlie mientras le daba los cinco a Paige.

— ¿Qué hoy es el día de "Únete y burlate de Millie"? — la castaña rodó los ojos.

— Pues yo digo que si, porque, esa pijama es horrenda. — dijo Eva mientras se unía a sus otros dos hermanos y chocaba los cinco.

— Chicos, dejen a Millie. — defendió su padre.

— Bien. — dijeron los tres.

— Voy a arriba, tengo cosas que hacer. — Millie se levantó y dejó su plato en la vajilla.