Daerys de la casa Targaryen, primera de su nombre, Legítima heredera al trono de hierro, hija del príncipe Rhaegar Targaryen y Elia Martell.
-Todo aquel que lastime a mi gente morirá gritando entre las llamas del dragón.
-Yo soy Daerys de la casas...
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Las dos Targaryen se encontraban viendo la hermosa vista que le ofrecía el hermoso cuarto que le había otorgado el Illyrio Mopantis desde su llegada, aunque claro ellas y más precisamente Daerys ninguna quería seguir escuchando a Viserys parlotear acerca que esta boda era el gran Renacimiento de la majestuosa casa Targaryen tras años de haber dejado Poniente.
"Daerys" "Daenerys" escuchaban a Viserys aproximarse desde la entrada del cuarto donde se encontraban.
Cuando por fin la figura de Viserys se vio el hombre venía con una gran sonrisa y dos vestidos en sus manos uno color Lavanda claro y otro amarillo pálido.
-Un regalo de Illyrio. Fue lo primero que dijo cuando las hermanas se aproximaban hacia el con una mirada entre curiosa y melancólica.
-Toquenlo, vamos sientan la tela. Con la mirada en los vestidos incitandolas a tocar la hermosa tela de seda.
Con un sonido de satisfacción y una sonrisa en su pálida cara miró a sus hermanas y volvió a hablar.
-No es generoso?
Daenerys que hasta ahora fue la primera en hablar se dirigió a su hermano.
-Hace más de un año que somos sus huéspedes y nunca nos a pedido nada.
Viserys primero paso la vista en Daerys que estaba inusualmente callada y después de unos segundo vio a Daenerys y habló.
-Illyrio no es tonto, sabe que no olvidaré a aquellos que son mis amigos cuando suba a mi trono.
- Acércate Daerys déjame verte. Dijo su tío.
Con paso firme se encaminó hasta Viserys y se puso frente suyo.
-Dejalas ver. Refiriéndose a sus hermosos senos a los ojos de Viserys y todo hombre que vea a la Targaryen, desabrochonando el vestido Viserys no dejo de verla.
-Las dos ya tienen cuerpo de mujer. Refiriéndose a Tía y sobrina.
Apartando el pelo de su sobrina para tener mejor visibilidad de su pechos lo colocó detrás de sus hombros y cuando ya tuvo lo que quería los acaricio con delicadeza bajando sus manos a su vientre y cuando ya hubo terminado con Dae siguió con Daenerys haciendo lo mismo.
-Necesito que estén perfectas, pueden hacer eso por mí. Se dirigió a las mujeres frente a el.
Cuando vio que ninguna respondía dijo las tan habituales palabras que decía para intimidar a Dae y Dany.