Importante: ésta historia es completamente mía, los personajes no me pertenecen.
Esta historia tiene contenido medio explicito so, ya saben.
Por cierto quizá algunas cosas no tengan sentido pero esto es así, una simple historia creada con el fin de entretener.
Ahora, si no te gusta ahorrate tus malos comentarios y sal de aquí. En cambio si te gusta tus comentarios son bien recibidos y tienes mi corazón.
Sin mas que decir, disfruta la historia.Prófugos de la justicia, sin nada que hacer.
Los víveres fueron restablecidos hace poco así que ni siquiera a eso podían salir.Las guardias se turnaban y ahora era turno de Sam, quien estaba acompañado de Wanda. Bucky no estaba, ya estaba en wakanda.
Natasha y Steve estaban dentro de la pequeña cabaña que habían conseguido.
Esa noche les tocaba a ellos hacer los deberes del hogar. Hicieron la cena y ahora estaban limpiando.Natasha estaba lavando los trastes mientras Steve los secaba y les daba su lugar.
—Steve ¿podrías prender la chimenea? Esta casa esta helada —dijo ella secando sus manos. Había terminado.
—La chimenea esta prendida Nat —dijo él acercándose.
—con un demonio, me muero de frío —soltó en un gruñido.
—¿la poderosa Black Widow, acostumbrada a el frío de Rusia, no soporta esta pequeña helada? —se burlo él.
Ella lo miró fulminante pero luego se relajó. La verdad es que nunca se molestaría con él.
—callate —tomó un cojín que se encontró en su camino a la sala y lo arrojó a él.
—Auch —se Sobo el rostro. Le había dado fuerte.
Caminaron al sillón y se dejaron caer. Quien los viera creeria que no conocen el significado de espacio personal.
Sus hombros y brazos se tocaban, incluso pareciera que Nat estaba sobre él.—Deberíamos ver una película —ella lo miró girando sobre si misma.
Ahora su postura era extraña, ella estaba casi encima de él y sus rostros casi podían tocarse.
Steve bajó la mirada sereno aunque en su interior se sentía nervioso.
Aunque no era la primera vez que estaban tan cerca. Con anterioridad ellos habían compartido uno que otro beso, pero no lo admitirían en público. Eso solo lo sabían ellos.—pelicula ¿de donde? —las manos de Steve subieron lentamente por la cintura de Natasha.
Por extraño que pareciera, las manos del ex capitán estaban reposando sobre el trasero de ella. Cuando estaban juntos y solos, no quedaba casi rastro de el Steve inocente que todos conocían.
—compré algunas esta mañana ¿vienes o no? —subió sus manos hasta el pecho del y comenzó a picotear.
—esta bien —dijo él.
Ella sonrió de lado, dejó un beso rápido sobre los labios del rubio y se puso de pie.
Steve también se puso de pie. Ambos se tomaron de la mano y subieron a la habitación de steve.Cuando llegaron a la cabaña se dieron cuenta de que solo contaba con tres habitaciones. Así que Sam se quedó una, Wanda y Nat compartían otra y Steve tenia la habitación principal. Normalmente ella dormía con él. Sus pesadillas solo se calmaban cuando estaba entre los brazos de Steve.
Era extraño, Natasha se sentía tan completa cuando estaba con él y lo mismo ocurría con Rogers.
Una noche, cuando Natasha tenia pesadillas tuvieron una platica en la madrugada. Se abrieron totalmente y la ahora rubia fue la primera en confesar sus sentimientos hacia el ex capitán. Esa noche ella y Steve se confesaron y tuvieron una larga sesión de besos. Se entregaron en los brazos del otro sin pudor alguno. Luego de eso, ambos se tomaron muchas libertades, parecían una pareja cuando estaban solos aunque la verdad es que nunca habían dado titulo a lo que tenían.