CAP I

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¿? - Tomaríamos un vuelo a Londres donde pasearíamos por toda la ciudad después de eso pasaríamos por Italia donde por ley pasaríamos al coliseo y a la torre de pisa… y para finalizar iríamos a Paris – grito emocionada Gwen desde celular de Peter – y cenaremos en la torre Eiffel.
- ¿Enserio y dime como llegaremos a la cima de la torre Eiffel, tengo entendido que no te permiten subir a ella? -pregunto Peter mientras acariciaba la mejilla de la rubia a lo que la ella solo le sonrió coqueta.
Gwen – tengo un amigo al que se le facilita la escalada… -dijo acercándose al castaño para besarlo rápidamente – y que puede ayudarnos con eso.
Peter - ¿Qué interesante tu amigo? – respondió Peter besándola repetidamente mientras la rubia solo asentía con sus hermosos ojos serrados – y dime que tan cercanos son tu y ese amigo tu yo – continúo besándola, bajando por su cuello – ¿debería estar celoso?
Gwen – Pero claro, el es muy sexy – dijo Gwen tomando distancia entre ella y el castaño que no quería dejarla de besar – y más con ese traje ajustado *ella soltó una risa al acabar de hablar*
Peter - ¿Pues ahora estoy mucho más intrigado de saber quien es? – dijo el castaño volviendo a besar a la rubia la cual mantenía aquella mirada coqueta que lo había enamorado.
Gwen – Spiderman – contesto Gwen un poco seria, aunque se controlaba para no reírse.
Peter- ¿Enserio?... aquel payaso que ocupa unas mallas a para luchar con lunáticos en las calles de Nueva York.
Gwen solo asentía manteniéndose callada, Peter solo le sonrió, para continuar besándola.
Aquella escena era vista por Peter Parker desde su celular, el cual hacia un esfuerzo sobre un para mantenerse erguido para no quebrarse y llorar, habían pasado apenas seis meses des de la muerte de aquella rubia, y en la mente de Peter se mantenía su sonrisa, la sonrisa que le alegraba las mañanas cuando la veía por los pacillos de la escuela o a aquella sonrisa que lo cobijo cada vez que se centia decaído o  derrotado, aquella sonrisa que le marcaba el camino, que los uniría, y que no les permitiría desampararse… o amenos eso creía Peter.  
Estaba sentando al filo de su cama sosteniendo su celular estaba con los ojos hundidos, y un poco hinchado y con la cara roja pues la noche anterior no podía dejar de llorar pues los recuerdos se negaban a dejar de atormentarlo, su respiración poco a poco comenzaba a calmarse conforme aquella grabación finalizaba.
Se había levantado de la cama y se disponía a salir de una desordenada habitación, junto a su puerta en la pared que tenia aun lado, se podía ver un gran colash el cual se en centraban una inmensidad de fotos de Gwen, también unas con sus tíos una con la de solo el tío Ben, otra junto con su tío en la feria de ciencias, donde gano el 3 lugar, y así muchas fotos de sus seres queridos.
Peter sele quedo viendo un momento, pues las fotos lo llevaban a aquellos momentos donde fueron tomadas cosa que lo mantenía en su habitación.
*¿Por qué las conservo? * -pensó Peter- * ¿Por qué no simplemente las arranco y dejo de ver sus caras? * *¿Por qué sigo atormentando me?* ¿Por qué no solo….?
Estiro su mano con intenciones de arrancar una foto de Gwen.

 *No puedo*Tomo la perilla de su puerta y salió de su habitación

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 *No puedo*
Tomo la perilla de su puerta y salió de su habitación.
May se encontraba en la cocina, estaba preparando el desayuno, Huevos con tocino, pudo notar Peter quien como de costumbre se acercó a su tía y le dio los buenos días.
Peter – Hola Mey – saludo con la mirada caída al darle un beso en la mejilla.
May – Hola cariño, ¿descansaste?
Peter – claro dormí como un bebé – Contesto Peter con una media sonrisa antes de poner cubiertos y vasos en la mesa, también sirvió jugo de naranja en estos.
May – Gracias Peter – tomo el vaso con jugo – espero que te guste el desayuno.
Peter - ¿Que tramas May? Sabes que siempre me gusta lo que tu cocina – dijo Peter mientras probaba un bocado de su desayuno.
May – Nada, pero me encanta cuando me lo dieses – le sonrió May a su sobrino. – ¿Después de la escuela te espero para comer?
Peter -   No, lo siento Hoy pasare a la biblioteca, tengo tarea de Historia. – era una mentira, tenia mucho que no iba a la Biblioteca, demasiada gente, demasiadas miradas de lastima, aparte de que muchos recuerdos fabulosos se encontraban en ella.
May – bueno cariño no llegues tan tarde, - May sabia que también era una mentira, ella conocía muy bien a su sobrino para saber cuando le mentía, también notaba sus ojeras, su cara hinchada, aparte las paredes de su departamento eran de papel y podía oírlo sollozar de vez en cuando, pero eso no le preocupaba lo que de verdad la mantenía alterada eran las pesadillas, dos o tres veces por semana Peter se despertaba gritando y maldiciendo un nombre…
Peter – May, ya me voy a la escuela, - dijo Peter mientras llevaba su plato al fregadero – Te amo, cuídate mucho, nos vemos.
Salió por la puerta sin mirar atrás.
Las clases pasaron como era de costumbre algo lentas, pero Peter agradecía las complicadas ecuaciones que la maestra de Matemáticas les dio para resolver, pues a donde quiera que viera la cara de Gwen Stacy se encontraba.
Era la ultima Hora de clases y Peter solo quería irse, ya no quería estar en la escuela, estaba sentado en su pupitre en un libro de Historia abierto en sus manos, el maestro explicaba el periodo entre la revolución y la independencia, cosa que no le podía importar menos a Peter, quien miraba con despreocupación a la ventana.
El timbre sonó y todos incluyendo a Peter guardaron sus cosas para poder salir del salón, un pequeño embotellamiento dejo a Peter hasta el final, cosa que lo irrito, pero pronto no le importo, al fin y al cobo lo que quería era salir, pero la mala suerte de este se hiso presente.
Maestro – señor Parker, quédese un momento – lo detuvo el profesor.
Peter – Claro, - dijo Peter ocultando su descontento.
Maestro – señor Parker, temo que tengo que informarle de que el director me ha informado que sus calificaciones han aumentado considerablemente.  
Peter – Gracias señor… pero no entiendo porque eso seria malo.
Maestro - claro que no es malo, es excelente, pero ese no es el problema, el psicólogo me a informado que has estado faltando a sus consultas y me impreciono saber que tus calificaciones no han bajado.
Peter se mantenía sereno, aunque por el tono y la mirada de preocupación, podía intuir a donde se dirigía la conversación.
Maestro – quiero que mañana vengas con tu tutor pues hay un asunto que la escuela quiere proponerte.
 Peter – lo siento no creo que mi tía pueda ella tiene que trabajar además cualquier queja que tenga de mi puede decírmela yo…yo la corregiré lo prometo solo dígame la y yo lo corregiré – dijo algo alterado y nervioso
Maestro – Peter no me malinterpretes no estas en problemas, y sobre el trabajo de tu tía creo que no se arrepentirá de venir.
Peter dudo, pero solo asintió.
Maestro – sobre lo del psicólogo debes verlo, se que no sete facilita, pero es muy bueno que hables con el tienes que hablar sobre… - el maestro dudo, pero soltó la granada – Gwen. No es bueno que te lo guardes. -finalizo el maestro.
Peter al escuchar el nombre de su Novia no pudo evitar que dos lagrimas se le escurrieran por sus mejillas.
Maestro – Eres un brillante alumno y una persona muy buena, tienes que hablar para sanar – decía el profesor mientras ponía su mano en el hombro de Peter – ella no querría que…
Peter no lo soporto más salió por la puerta del salón interrumpiendo al maestro, pero no podía seguir escuchando sin que el llanto le ganara, cuando salió de la escuela se metió a una estación del metro y subió a un vagón.
Se sentó y se limpio las lágrimas con la manga de su chaqueta, al llegar a su estación bajo y empezó a caminar paso a una florería donde una señora lo saludo y compro un par de flores blancas, las cuales cargo hasta llegar al cementerio.
Paso por la puerta se anoto en una lista de control y el guardia lo dejo pasar.
No había dejado de venir todos los días desde el funeral, siempre saliendo de la escuela pasaba por esa florecía compraba un par de flores y caminaba hasta la tumba de su amada.
Peter – Hola… - puso las flores en el florero de la tumba, y con su manga sacudió el polvo de la lápida, - Hoy fue un día pesado… la maestra nos dejó un montón de operaciones, pero me temo que no las suficientes, hoy tampoco puede ponerme la máscara, se que la ciudad me necesita pero otros héroes han tomado mi lugar, no se mucho de ellos pero creo que se dieron cuenta que en  New York siempre se necesita un héroe o héroes que cuiden de esta, y sabes que lo que más me alegra que la ciudad parece haberse olvidado de mí, cosa que me alegra pues sin alguien que me recuerde por que hago esto o que me apoye con la carga que llevo en cima al ocupar la máscara….- barias lagrimas le brotaron de los ojos – Te extraño -dijo por fin ahogando un grito – Te necesito conmigo, - dijo cayendo de rodillas – no puedo ni quiero estar sin ti.
Peter se sentó enfrente de la tumba de Gwen mirándola en silencio, el corazón de Peter estaba roto, pues una parte de él se avía ido junto con  Gwen.
Había anochecido y Peter Seguía en el Cementerio, su celular comenzó a sonar era su tía.
Peter – May no te preocupes ya voy – contesto Peter.
May – por el amor de dios Niño ya son las siete por favor no te retrases más, tenemos que hablar – dijo alterada May.    
Peter - ¿todo bien?
May – no se cariño me llamaron de la escuela, quieren que me presente junto contigo mañana en la oficina del director, ¿esta todo bien?
Peter – si… si tía También me lo dijeron antes de salir de la escuela, y créeme a mi también me dieron un infarto – Contesto con tono burlón. – pero me aseguraron que no estoy en problemas. *o eso creo pensó Peter*
May – Bien Muchachito, más te vale, ven de inmediato.
Peter – si tía ya estoy en el metro, Te amo - colgó.
Peter miro por ultima la tumba de Gwen, - Hasta mañana – beso su mano y la puso en la tumba.
Se dio la vuelta para irse a su casa. El camino fue calmado y se vino durmiendo, cuando llego a su estación se despertó y camino hasta su casa.
Cuando entro encontró a su tía durmiendo en el sillón, le puso una manta y se fue a su cuarto.
Para sorpresa de el se que do dormido muy rápido, cosa que agradeció pensando que hoy no tendría pesadillas.
Pero su mala suerte lo perseguía hasta en los sueños.
Estaba en un edificio abandonado , y frente a el se encontraba el ser más despreciable, que conocía, la única persona que desde el fondo de su corazón odiaba.
 Green Goblin: ¿Qué pasa arañita? ¿Te duele? POBRECITA jajajajajajaja – su risa chillona y macabra le retumbo en sus oídos. – ¡¡¡VAMOS SPIDERMAN!!! Se un hombrecito y levántate.
El Hombre araña estaba clavado por el planeador del Green Goblin a una pared este estaba sangrando mucho y no ayudaba las constantes vibraciones que hacían temblar las navajas.
Peter – ¿Que esto?...  por favor no es la primera vez que me atraviesan dos navajas en el vientre, - dijo Spiderman sarcásticamente y con la respiración agitada – ahora si me disculpas tengo que patear tu verde trasero.
Dijo eso mientras golpeaba con fuerza la pared en la que estaba empalado, haciendo que se derribara una ves suelto tomo las cuchillas del planeador y de un tirón se las arranco.  
Spiderman – eso dejara una cicatriz, - decía mientras tapaba a sus heridas con mucha telaraña, - Bien ahora donde esta esa….
No pudo terminar pues una patada del Green Goblin lo saco volando, tomo ese impulso disparando dos telarañas a los costados del edificio abandonado utilizándolos como catapulta, con ese impulso y con algo de su escaseada suerte salió disparado en dirección al Green Goblin, y dio una fuete patada en la cara con ambos pies lanzándolo lejos asta estrellarse contra un muro de ladrillos.
Spiderman – eso apenas y yo me lo creo, no pensé que funcionaria - murmuro con dolor Spiderman tratando de levantarse.
No había señales del Green Goblin, o por lómenos no lo veía o escuchaba, su sentido arácnido se activó, Spiderman con dificultad salto pegándose en una pared, pero logro sujetarse antes de que la granja de calabaza lo golpeara, Spiderman con ayuda de sus telarañas salió del edificio por una ventana, no podía pelear con ese lunático Verde en su estado tenia que curarse, su visión se nublaba y con dificultad llego a una escalera de incendios donde se desmayó por la perdida de sangre,
¿? -  Hola, ¿Peter?, o por… - Era la casa de Gwen – Vamos despierta necesito que me ayudes a meterte, necesito que me ayudes – lo despertó Gwen con ojos de terror, al ver a su novio con dos grandes manchas de sangre en su abdomen.
Spiderman – Hola Guapa – dijo haciendo un esfuerzo para entrar por la ventana del cuarto de Gwen – Perdón no savia adonde más ir….
Se volvió a desmallar.
Despertó de golpe Peter.
Miro por todas partes buscando a Gwen, pero solo estaba el, había sido solo una pesadilla, intento levantarse, pero por instinto se toco donde habían quedado dos cicatrices justo en su abdomen, se levanto y con su humor habitual salió de su habitación para ver a la tía Mey usando un vestido.
 Peter – Hola que elegante, cual es la ocasión.
May – Pero que chistosito me salió el niño, vístete y rápido – dijo señalando la ropa que usaba Peter.
Peter- Ya estoy vestido May – dijo confundido.
May – No hoy no vestirás así.
Peter – ¿por qué?
May – hoy vestirás bien tenemos que ver a tu director y no pienso llevarte todo fodongo así que volverás y te vestirás con ropa que no saques del canasto de ropa sucia. Entendido.
Peter – May… no hay necesidad de eso.
May – ve y cámbiate ahora.
Peter – ¿pero el desayuno?
May – ¿quieres desayunar? Ve y cámbiate.
Peter – si… si como digas.
Peter regreso con ropa más “normal” estaba peinado y aunque todavía usaba su chaqueta favorita esta estaba bien acomodada y marcaba la figura algo descuidada de Peter, y aunque estaba de caído quería verse algo alegre para su tía May
Peter – bien May hora del desayuno. – dijo ilusionado Peter.
May – lo ciento te tardaste – dijo mientras la mujer lo arrastraba para salir del departamento.
Subieron al auto de May y Peter seguía algo cabizbajo, pero verse al espejo lo animo, ya no se veía tan triste, aparte de que la tía May parecía estar más alegre de lo normal.
Peter - ¿Qué te pasa? Parece como si estuvieras festejando, -pregunto Peter mientras abría un poco la ventana.
May lo ignoro solo le dio una pequeña sonrisa, a el  castaño y  aunque estaba algo intrigado solo se concentró en la brisa mañanera que entraba por la ventana del auto dándole de lleno en la cara.
 
Cuando entraron a la escuela muchos se sorprendieron por la apariencia de Peter pues, aunque aún tenía ojeras este se mantenía con una sonrisa forzada mientras avanzaban a la oficina del director.
 Director – buenos días, señora Parker, Peter, tomen asiento – les dijo el director quien se levanto para abrir la puerta de su oficina.
May se sento y Peter se mantenía de pie detrás de su tía, el director se mantenía callado hasta que entro el maestro que ayer intercepto a Peter.
Maestro -Buenos días señora Parker, Peter – el sentó alado de la tía May.
Director – bueno quiero informarle de la manera más atenta que los niveles académicos de Peter como alumno son excelentes – May volteo a ver a Peter quien solo le sonrió seguido una leve caricia en los hombros de la tía May – Por desgracia no puedo decir lo mismo de las actividades escolares.
Peter solo apretó un poco los hombros de su tía.
Maestro – nos preocupa su salud emocional - el maestro miro a Peter, seguido por su tía que solo asentía – no se relaciona en su entorno, investigue con sus compañeros y me enteré que no tenia amigos y los que tenia simplemente dejaron de juntarse contigo por que tú se los pediste, el joven Osborn tu mejor amigo me dijo que esta muy preocupado por ti pero que tu le dijiste que necesitabas tiempo asolas – Peter estaba incomodo le sudaban las manos y no paraba de pensar en los momentos que paso con Harry y ….Gwen.
Maestro – también preguntando le a tus demás maestros me dijeron que ya no participas en clase amenos que te pregunten directamente, y que telas pasas callado no hablas con nadie.
May solo volteo a ver a Peter quien estaba con la mirada caída.
Maestro – ase mas de 4 meses la señora parque vino con intención de inscribirte en un programa de estudiantes de intercambio – Peter levanto la vista con una mirada de confusión, pero solo se mantuvo callado – también hay que mencionar que fue ella quien nos informó de tus faltas al las consultas con el psicólogo cosa que nos preocupo de gran manera, por lo que después de un largo estudio de tus calificaciones a lo largo de tu vida escolar emos llegado ala conclusión de que un cambio de ambiente te vendría de maravilla, por lo que te informo que has sido aprobado para el programa de estudiante de intercambio por un semestre, con la posibilidad de continuar tus estudios allí si tus notas y conducta son buenas. Así que dices aceptas. 

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