Dos años seis meses.

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Capítulo 6.
 
“Dos años, seis meses”   

Peter

El dolor de su costado le cortaba la respiración mientras se columpiaba a su casa; había llevado a su nueva amiga Chloe a disculparse con Rosi, la muchacha que se había convertido en Silver Ghost, una chica algo regordeta, con brackets y dos colas de caballo por peinado, cosa que le hacia el blanco perfecto para los abusadores… cosa que por alguna razón se negaba aceptar que era Chloe, por lo que después de una escena de dimes y diretes en el que Rosi se desquito y Chloe simple mente se disculpaba con su puesto arrepentimiento la llevo a su casa con la promesa de verse después, cosa que por alguna razón le causo una sonrisa a Chloe la primera sonrisa sincera y relajada por parte de la chica.
Paso por su mochila e intento colgársela en la espalda, pero el dolor de sus costillas se lo impidió, así que simplemente se la pego al pecho mientras intentaba columpiarse por la noche, con las luces tenues de las farolas que alumbraban las calles vacías de París, el viento le pegaba en el rostro y cuerpo erizándole la piel, sus músculos se entumían incomodándole sus movimientos.
*Tengo que ponerme en forma – dijo mientras aterrizaba junto a su ventana – si es que pienso seguir con esto… *
Se asomo fuera de su habitación y se percató que su Tía May estaba acostada en el sillón dormida, con un par de papeles en la mesita de la sala junto con una computadora apagada, salió en un movimiento silencioso, dirigiéndose a la cocina, donde tomo un bol y hielos de la nevera.
En menos de dos minutos ya estaba dentro de su habitación, lo primero que hizo fue poner la bolsa de hielos en su cama dentro del bol, se quitó su máscara de un jalón, terminando la por arrojar la a su escritorio, después se quitó sus guantes los cuales estaban agujereados de sus nudillos, una vez sus manos desnudas mostraron unos nudillos rojos e hinchados, se retiró sus lanza redes aventándolos a su escritorio junto con su máscara y lo que quedaba de guantes dejándolos encima de un montículo de tela roja con tierra.
Sus manos estaban desnudas hasta la mitad de su antebrazo izquierdo donde estaba la pulsera de Gwen, más arriba estaba la araña de su pecho encima de su buso maltrecho y lleno de tierra.
Tomo el bol con los hielos que estaban ya cubiertos por una capa de agua.
Se sentó en su silla de escritorio y sumergió sus manos lentamente mientras el agua cristalina cambiaba de color a uno rojizo marrón, mientras sumeria sus manos en el agua helada con sus pies se quitaba sus botines los cuales quedaron aventados debajo de sus pies descalzos.
      *esta mejor, - pensó mientras acariciaba sus nudillos dentro del agua - ¡¡¡aaahy!!! - pensó mientras otro piquete de su costado lo mortificaba - ya comenzó a sanar si no las reacomodo antes de que terminen de sanar, no se soldaran bien y será peligroso cuando se vuelvan a romper. *
Sacando sus manos húmedas del agua que se había quedado sin hielos sacudió su mano derecha mientras que con la otra jalaba el borde de su playera para quitársela., cuando se lo logró liberar de esta la puso junto a sus demás prendas tomo uno de sus lanzas redes antes de juntar los guantes y su máscara en un bulto con su playera que puso debajo de su escritorio junto con sus botines.
Se levantó de su silla y se dirigió a su baño, con su dorso desnudo marcado por un extenso moretón en su costado. Separó frente al lavabo puso el brazalete plateado en una de las jaboneras básicas y con sus manos cuidadosa mantente toco su costado revisando sus costillas.
   *Diablos esta ves si me pegaron duro - se quejó al encontrar la fisura en una de sus costillas - como pensaba fueron la cuarta y quinta, otra vez… porque siempre son las que siempre se rompen… no entiendo- negó con la cabeza - esto va a doler...
Con sus tres primeros dedos de su mano presiono las costillas produciendo un crujido que se escuchó al reacomodarlas liberando un pequeño quejido contenido, Peter se dobló en sí sentándose en la tasa del baño.
      * Dolió más de lo que recordaba - con dificultad tomó su lanza redes y presionando un botón, una línea de telaraña se pegó en una parte de sus costillas - tengo que ajustar esto - Jalo del sobrante sobre si en rollando su torso - Eso servirá.
Aventó su lanza redes a su cama, y le abrió a la regadera, minutos después el vapor del agua caliente salió de la regadera mientras Peter entraba.
En cuanto el agua caliente toco su cuerpo sus músculos que seguían tensos comenzaron a relajarse, sus piernas se doblado asiendo que cayera de rodillas.
Una sensación de cansancio lo inundó seguido por unas náuseas que le invadieron sin mayor aviso provocándole que sangre y flema saliera por su boca manchado el agua con sangre, acuclillado se sentó como pudo mientras el agua limpiaba su piel.
Media hora después estaba enfrente al espejo desinfectando un par de rasguños, agua oxigenada y vendas estaban en el lavamanos mientras una aspirina y un vaso de agua estaban en el escritorio.
             * Con eso será suficiente -termino de desinfectar un corte detrás de su brazo. - Por la mañana ni siquiera cicatriz dejará o Por lo menos eso espero, ya tengo suficientes cicatrices.
Pasó su mano por su pecho hasta llegar a su hombro donde una marca en x resaltaba en su piel, del otro lado en su otro hombro entre este y su cuello, pequeñas marcas de dientes formaban una dentadura, más abajo entre su pecho y parte del abdomen tres líneas delgadas de tejido cicatrizar resaltaba, a la derecha una delgada línea más larga le rodeaba, desde  arriba de su cadera hasta su espalda,  por último justo unos centímetros junto a su ombligo con líneas más gruesas que antes había dos cicatrices.
Esas eran las cicatrices que sólo podía verse en el espejo, pero estaba seguro de que su espalda estaba igual o peor...
Alejando los malos recuerdos de batallas pasadas tomó el par de pastillas y el vaso de agua tomándolas y recostándose en la cama, no sin antes al cerrar los ojos la sonrisa de Gwen le diera buenas noches.
Dos años a atrás.
Narrador
El sol entraba por la ventana de una muy ordenada habitación de nuestro buen amigo Peter Parker.
Estaba, acostado tapado hasta la cabeza con una colcha con la cara de Albert Einstein, su cuarto de color azul estaba tan limpio que no parresia el cuarto de un adolescente, en una de las esquinas una mesa estaba repleta de instrumentos científicos, vasos y recipientes de cristal llenos con líquidos de colores azules, blanquizcos todos ordenados de manera excepcional.
¿¿?? - Vamos muchacho, arriba - un hombre fornido y vestido con una chaqueta de cuero café con pantalones de mezclilla, entro en la habitación - te quedaste otra vez hasta tarde con tus experimentos…
Camino por la habitación hasta estar delante de la cama donde de un jalón destapo al joven Peter Parker que luchaba para abrir los ojos.
Peter - No mucho… tío solo hasta… - dijo tropezando las palabras seguido de un gran bostezo - solo hasta como a las 12… no puse mucha atención a la hora.
Tío Ben - ¿En serio hasta las doce…? - Peter asintió con pesadez antes de incorporarse y sentarse junto a su tío - Bueno pequeño genio vístete llegaras tarde a la escuela…
Peter - Si tío… Gracias por despertarme - Le regalo una sonrisa a su tío, este se la devolvió y le alboroto el cabello.
Tío Ben - Buenos días, apúrate, May ya tiene el desayuno, vístete rápido - salió de la evitación.
Peter se levantó pesada mente estirándose hasta que un ligero pinchón le adormeció la mano, Peter se la acaricio recordando el insólito su seso del día anterior, cuando una araña lo pico en la mano.
   *Suerte Parker - pensó Peter mientras se untaba algo de pomada en la pequeña púnzala donde la dichosa araña lo había picado. - ¨Pero no todo fue tan malo… - un rubor se apodero de su cara con un vergonzoso recuerdo - logre que Gwen Stacy me hablara… solo espero no haberla ahuyentado con mi torpeza… - cruzo los dedos esperanzado - Creo que será mejor que me apure voy tarde a la escuela *
Salió de su habitación ya vestido con su mochila y con una cámara colgándole del cuello y tomo una manzana del tazón de la cocina.
May - Buenos días bello durmiente - Salió de la cocina abrazada de Ben - Vas tarde apúrate.
Peter - Si lo siento, Buenos días - se acercó a ella y le beso la mejilla - Voy corriendo, no me esperen para comer llegare tarde.
Ben - ¿Harry te invito algún lado?
Peter - No iré a Central Park, quiero sacar nuevas fotos… ¿está bien?
May - Claro, solo cuídate.
Peter - Siempre, ¿está bien Tío?       
Ben - Si muchacho solo intenta llegar antes del anochecer y si te retrasas ya sabes avisa.
Peter asintió y salió de la hermosa casa sitiada en Queens, camino por la acera y se adentró en la parada del metro, que estaba a unas cuantas cuadras de su casa.
Unas cuantas estaciones más y ya estaba en la entrada de la escuela, el pobre chico miró detrás de su espalda y a los lados buscando a algo o a alguien al no encontrarla siguió su camino por la entrada de la escuela donde un mar de estudiantes se embotellaba en el pasillo principal rodeado de casilleros.
 
Peter se movió con clara facilidad por la multitud hasta llegar a su casillero que estaba al final del pasillo justo en la última fila a un lado de las escaleras que daban al segundo piso, una vez en frente del decolorado casillero, lo abrió usando la contraseña en el candado, guardo su preciada cámara intercambiando la con un par de libros que guardo en su mochila, cerró su casillero y camino hasta su primera clase.
 
Matemáticas fue sencillo, historia y geometría fueron sus siguientes clases y aunque siempre se caracterizó por ser uno de los mejores estudiantes, su mente estaba muy lejos de las clases…
Se encaminaba para su clase de biología, cuando una sensación de hormigueo le recorrió la nuca, fueron segundos antes de que un balón de futbol lo golpeara ocasionando que callera.
 
Al caer un tumulto de risas se apoderaron del ambiente.
 
· Cuidado tonto Parker… - grito entre risas Flash Thomson.
 
Peter - Si Flash… - dijo cabizbajo.
 
Flash - El balón Parker…- dijo amenazante, mientras caminaba hasta un intimidado Peter que ya había tomado el balón ante la mirada de Flash.
 
Peter estiro el brazo con el balón en la mano, mientras Flash le dio un manotazo al balón haciendo que callera de la mano temblorosa de Peter.
 
Flash - El balón Parker… levántalo - dijo caminando, intimidando a un ya casi resignado Peter de la inminente humillación.
 
Peter ve al enorme capitán del equipo de futbol, con una sonrisa siniestra en la cara, inspecciona las risas contenidas de sus amigos brabucones, al igual que la de sus compañeros de clase que esconden sus miradas de la escena escondidas entre la multitud que se ha formado alrededor de Peter y Flash, esperando el típico espectáculo de abusador y abusado incapaz de detener aquel circo. 
 
Peter - vamos amigo - dice casi en una súplica - dejemos esto para otro día ¿sí?
Flash encara a Peter que retrocede intimidado - El balón Parker- dice en lo que parece un gruñido más que palabras.
 
Derrotado Peter le da la espalda a Flash para agacharse por el balón que estaba a unos centímetros de la puerta del salón; más se tardó en agachase que en lo que Flash le dio una fuerte patada en el trasero provocando que la cabeza de Peter Golpeara contra la puerta abriéndola de golpe, justo antes que el chirrido de la campana sonara iniciando la clase.
 
Peter estaba tirado completamente mientras la multitud de estudiantes pasaban embotellados por la puerta del salón sin mirarlo a acepción de Flash y sus compañeros de equipo que no se resignaban a disimular sus carcajadas.

Eres Mi CaminoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora