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¿Sabías que Peter Quill y Scott Lang se conocían desde antes de la batalla contra Thanos?

¿Sabías que ellos eran pareja?

¿Sabías que Lang esperaba un bebé de Quill?

¿No?

Pues no era de extrañar, ya que eran pocas las personas que lo sabían. Sólo aquellos cercanos a los dos hombres estaban al tanto de su relación.

Se conocieron un año después de que Hank Pym le cediera el puesto de Ant-man a Lang. En ese entonces, Quill sufría por la pérdida de su padre biológico y su padre de crianza y sus compañeros, los Guardianes de la Galaxia, viendo lo afectado que estaba, le sugirieron visitar su planeta natal por un tiempo. Fue así que los Guardianes viajaron a la Tierra.

Como capricho del destino, el Milano aterrizó en un bosque de San Francisco, lo cual no pasó desapercibido para Hank Pym quien envió a Scott a investigar. De esa forma, Quill y Lang se conocieron.

Lang los llevó consigo a la casa de Pym, quien fascinado por las nuevas formas de vida, les pidió quedarse para investigaciones, cosa que los guardianes aceptaron al no tener donde quedarse, ya que no podían quedarse en la nave por la llamativo que sería, y con la condición que ninguna de sus investigaciones fuera invasiva. Claro que hubo negaciones de parte de Rocket pero estas cesaron cuando vio la tecnología de Pym. El mapache no estaba del todo impresionado por la partícula, sino por el hecho de que una especie tan primitiva como la humana, contara con algo así.

Negándose a solicitar apoyo o cualquier cosa a un Stark, Hank decidió no contarle nada a los Vengadores sobre sus visitantes del espacio y los hizo pasar por personas normales a base de disfraces y en los casos de Gamora y Drax, algo de maquillaje.

Sin embargo por más maquillaje que se usara, el hecho era que los Guardianes no podían salir mucho a la calle pero el propósito de estar allí era reconectar a su autoproclamado y no reconocido capitán, con sus raíces. Peter Quill quería salir y ver cuánto había cambiado la Tierra que él conocía y ya que Hank estaba ocupado con sus investigaciones y Hope lo ayudaba, el trabajo de acompañarlo cayó en manos de Scott Lang.

Lang se encargó de darle un recorrido a Quill por San Francisco durante semanas, conviviendo entre ellos sin nadie más al rededor. Pronto se dieron cuenta de lo parecidos que eran y no tardaron en volverse buenos amigos. Las semanas pasaron y entre idas a Baskin Robbins y noches de karaoke en el departamento de Scott con Luis, Kurt y Dave, un cariño muy especial iba naciendo en los corazones de ambos hombres.

Sin que se dieran cuenta, se enamoraron.

Peter encontró en Scott a una persona igual a él, alguien que no era perfecto pero se esforzaba, alguien con un sentido del humor único, alguien que disfrutaba de hacer locuras que a los demás les parecían molestas, alguien con quien no tendría que lucirse para parecer genial. Por otro lado, Scott encontró en Peter a su igual, alguien que no lo juzgaría por sus equivocaciones, alguien que no le exigiría ni presionaría por dar más, alguien con quien podía ser él mismo sin recibir reprimendas.

El romance entre ellos no tardo en iniciar una vez que ambos se dieron cuenta de sus verdaderos sentimientos. Peter no era alguien de rodeos así que encuanto tuvo la confianza suficiente, le declaró sus sentimientos a Scott, el cual los correspondió y recibió gustoso, y así, luego de conocerse por 6 semanas, empezaron una relación.

Relación que se puso en pausa cuando los Guardianes tuvieron que regresar a la Galaxia. Como su nombre lo decía, eran guardianes y debían proteger el que era su hogar. Llevaban más de un mes en la Tierra y ya tenían un par de trabajos acumulados que debían resolver. Partirían tan sólo una semana después de iniciada la relación de ambos hombres.

Él Se Encargará - StarAnt - MarvelDonde viven las historias. Descúbrelo ahora