El chico de mi imaginación

La cita (parte II)

Media hora después suene el timbre de la casa, es mi cita, me despido de mis papás y ambos me aconsejan que haga lo mejor, yo me limito a sonreír y cerrar la puerta tras de mi.

Eric luce sus clásicos vans y camisa a cuadros, sonríe al verme; lo imito. Me toma de la mano; lo imito. Caminamos calle abajo tomados de la mano, respiro hondo y lentamente exhalo el aire, me detengo en seco.

─Eric, di algo por favor. ─El vuelve a sonreír, tanta sonrisa me está matando, parece que vivimos en una película dominguera.

─Tengo una sorpresa, ven, confía en mí moca.

Caminamos algunas calles, doblamos una esquina y tomamos la salida noroeste de la ciudad, sé hacia donde se dirige, cuando era niña solía venir con Chris a este lugar, es el bosque de robles, mis iniciales están grabadas en alguno de esos árboles, pero eso Eric no lo sabe, dejo que me guíe hasta el claro donde Chris y yo pasábamos horas jugando o leyendo.

─Es el bosque de robles y este es nuestro lugar secreto

─Chris, ¿Crees que no lo sé?

─¡Se supone que era un secreto!

─Y lo es, Eric no sabe que conozco este lugar, además no seas ingenuo es obvio que mucha gente conoce este lugar.

En ese momento y como si hubiera escuchado mis pensamientos Eric voltea a verme. Chris no desaparece, sigue en mi cabeza, estará conmigo un buen rato, es como un grano en las nalgas, aparecen cuando menos los necesitas y son muy incómodos.

─Cierra los ojos ¡Sin trampas! Muy bien Jane, ahora toma mi mano te llevaré hasta tu sorpresa.

Caminamos unos treinta o cuarenta metros, Eric me ordena abrir lo ojos y no lo puedo creer, encontró el árbol, ha encontrado MI árbol.

─NUESTRO árbol. ─Corrige Christopher, y ahí están como si el tiempo no hubiera pasado, tres letras mayúsculas hechas con dedicación.

─SJB, si no te conociera de toda la vida creería que fuiste tú quién mutiló al pobre arbolito moca, al principio lo creí, pero luego encontré esto. ─Señala al árbol contiguo a la izquierda, en el hay otras tres iniciales hechas por mí, con la misma dedicación que las tres primeras, CEH, las iniciales de Chris.

─Claro que no, yo no mutiló árboles a menos que sea para hacer el papel en el que se imprimen los libros. Moco, ¿Por qué me trajiste a ver esto?

─La verdad no lo sé, hace un par de semanas salí a correr, me di cuenta que hacía algún tiempo no corría por el bosque así que me adentré en él y terminé descubriendo esto. Sé que te gustan los lugares tranquilos así que me agrado para nuestra primera cita.

─Gracias

─¿Por qué Moca?

─Por ser tú, por estar ahí para mí, por enseñarme que el amor existe, por no desistir en conquistarme.

Me acerco más a él, cierro los ojos y lo beso, es apenas un pequeño beso, sólo uno nuestros labios, pero los pequeños Chris y Jane gritan dentro de mi cabeza, es la primera vez que ese par se pone de acuerdo tratándose de Eric.

─¡No! ─Gritan ambos.

─¡Estas loca! ─Grita Chris

─¡Lo lastimarás! ─Afirma mini Jane

Eric se a quedado mudo, me ve de arriba a abajo, abre la boca pero no dice nada y yo, yo doy media vuelta y salgo corriendo en dirección opuesta, lo único que quiero es alejarme de él.