El Diario Del Mundo

Diario De Frank - 3

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El día de hoy, además de ir a la prepa fue algo aburrido, la bienvenida de parte del director y los trabajos que pusieron los maestros, fueron demasiado rutinario, es lo mismo que todos los años sales de vacaciones, se acaban las vacaciones, vuelves a clases y todo sigue igual, no puedo estar quejandome todo el tiempo, pero ni estaría mal un cambio de vez en cuando.
En fin, nos cambiaron de salón a todos mis compañeros y no estuvo tan mal a excepción de que el salón era muy pequeño, y conocí a una chica, linda y apuesta, con una sonrisa tan hermosa, me imagino que era nueva pues no la había visto antes, fue lo único que agradecí del día de hoy, pero no puedo hacerme ilusiones, una persona como yo jamás estaría a la altura de una  persona como ella, por que ella era un mismísimo angel, y yo en comparación era una criatura inferior a los demás chicos del salon, eran más apuestos y tenían una mejor manera de ser vistos por los demás, no podía dejar de mirarla era tan bella, pero no podía quedarme callado, así que me acerque para saludarla y hacerme su amigo, me había decidido pero el imbécil de Daniel se metió en mi camino y me empujó, así que yo quedé detrás de él y el empezó a hablarle a la chica, estaba furioso y volteó a verme, me dijo que me mantuviera alejado o que pagaría las consecuencias, claramente me aleje, Daniel era un chico un poco más alto que yo, pero tenía una fuerza tremenda, además de que practicaba artes marciales, tenía miedo, así que me fui a sentar, me sentí impotente pero si llego a tener una oportunidad le hablaré a la chica, no dejaré que Daniel me gane, además el solo las quiere por un tiempo u después las cambia cuando llega alguien más, es un imbécil, pero no puedo detenerlo, realmente soy patético, y cómo era de esperar en la salida de la escuela Daniel me esperaba, y creo que ya sabía a qué.
Daniel me miro con unos ojos de desagrado, me tomo del cuello y me dijo con un tono molesto

Si te vuelves a acercar a la chica o incluso quedarte mirándola te golpearse la cara y te la haré aún más fea de la que ya está, no creas que te tengo lastima solo por ser inferior a mí, escoria

Cielos me había asustado demasiado las piernas y las manos no me dejaban de temblar lo único que le pude decir era que no lo haría,  claro que lo volvería a hacer, era tan inevitable, estaba completamente enamorado de ella y eso que ni siquiera sabe que existo, pero para mí, ella era la única chica a la que podría mirar con amor, y claro que sería la primera a la que amaría eternamente.

Firma: Frank
Posdata: su nombre era Isabel, y era la chica más hermosa para mí.