Prólogo

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Narra/Tae

Es increíble como una sola palabra puede poner tu vida de cabeza. Esa palabra que señalo el fin de mi vida y me obligó a comenzar una nueva. 

Esa palabra, " murió ", fue la que acabó con la mía y junto a mi madre tubimos que volver a empezar, en otro país. Los recuerdos eran muy dolorosos y huimos para darnos la oportunidad de vivir.

Ahora, voy en el auto de mi madre de camino al aeropuerto, para viajar a Corea, dejando atrás a mis amigos, novia y esa palabra que le puso fin a mis días de felicidad.

—Mamá falta mucho para llegar al aeropuerto —le pregunte a mi madre, ya que estaba muy cansado y llevabamos casi 2 horas de viaje.
—No mi amor, ya casi llegamos.

Estaba muy aburrido así que decidí colocarme mis audífonos y escuchar un poco de música.

No se en que momento, pero comencé a sentir mis párpados pesados y decidí dormir un poco.

—Vamos mi amor, ya llegamos.

Cuando escuché la voz de mi madre empecé a abrir los ojos poco a poco.

—¿Cuánto dormí? —le pregunte mientras tallaba mi ojo derecho.
—Una hora mas o menos, cuando te dormiste no faltaba mucho para llegar.

Desabroche mi cinturón de seguridad y me baje del auto para ayudar a mi madre con las maletas. Entramos a el aeropuerto y nos sentamos a esperar nuestro llamado.

"Pasajeros del vuelo 202 con destino a Seoul, favor de abordar por la puerta 8."

Narra/Hobie

—Que yo nunca te he querido, para mi solo eras un juego.

Esas simples palabras destruyeron mi vida por completo. Esa, la persona que yo mas amaba y creí que el también lo hacia, pero todo era mentira, nunca me quiso todo fue mentira, un juego.

Mis lágrimas seguían cayendo y ya no hacia nada para retenerlas, dolía y mucho.

Me tire al piso y pegue mis rodillas al pecho y seguí llorando.

Mi vida siempre ha sido un infierno, mis padres me abandonaron y ahora él.
¿Por qué yo, por qué?
No aguanto mas, ya no no quiero vivir, quiero acostarme a dormir y no volver a despertar.

Me levante decidido y me dirigí al baño, me mire en el espejo y me volví a repetir la misma pregunta, ¿por qué?
¿Qué hice? Las lágrimas volvieron a salir y con mi puño rompí el espejo.

Dolía mucho pero mas dolía mi corazón. De mi mano salía mucha sangre, cuando mire al suelo estaba llena de vidrio.
Me agache y recogí un pedazo, lo mire fijamente para luego levantarme y abrir el lavamano y con el pedazo de vidrio, de bajo del chorro de agua,  comencé a cortarme y la sangre comenzó a salir, cada vez más, hasta un punto en donde mi mano estaba completamente roja.

—Hoseok, donde estas—esa era la voz de mi mejor amigo.
Me marie, a causa de la perdida de sangre y caí al suelo.
—Hobie que paso y ese ruido, donde mierdas está —no pude responder, no tenía fuerzas para hablar.

Antes de que todo se volviera negro vi a Jimin, mi mejor amigo, parado en la puerta gritando mi nombre y corriendo hacia mi.

Luego perdí la conciencia y me sentí en paz y sin dolor.

Dejame ser tu Esperanza Donde viven las historias. Descúbrelo ahora