𝔽𝕌𝔾𝔸𝔻𝕆𝕊{Kwak Dong Yeon

Capítulo 1

Soy Yoora y sufro de depresión desde el año pasado. Nadie hasta el momento se a limitado a ayudarme, nunca. Mis padres y hermanas suelen tomarme como la niña "rarita" de la familia, sí, mis propios padres y hermanas. Estos últimos días me he estado sintiendo demasiado mal, exageradamente mal y me he dado cuenta de ello. Lo que más me impresiona de mí es eso, sé darme cuenta cuando estoy mal y cuando estoy demasiado mal, y es por eso que he decidido hacer la locura más grande de mi vida: voy a estar una semana fuera de casa ¿Por qué? Creo que estaría bien salir un poco y dejar a un lado mi zona de confort, o sea: mi casa, instituto y casa de nuevo. También pienso que debería encontrarme a mí misma y aprender de lo que hay allí afuera y aprender que quizás no es todo como en los animes.

Lo tengo todo planeado, voy a dejarles una nota encima de la mesa y me iré en la madrugada del domingo a las dos de la noche, hoy es sábado. Tengo que preparar todo para esta noche, no tengo ningún miedo de nada.

Me atreví a salir de mi habitación y estar con mi familia un rato antes de irme por una semana entera -o más, quien sabe-.

- Hola...- Mi padre, como de costumbre, me miró por encima del hombro sin hacerme mucho caso y me dijo un simple "Hola", mis hermanas Coraline y Natalia solo me miraron con asco y dijeron "Ugh", mi madre, la que realmente se preocupaba un pelín de mí, me dijo:

- ¿Qué tal Yoora? ¿has dormido bien? Ahí está el desayuno. - No dije nada, mi respuesta fue una sonrisa algo forzada, pero mi madre se la había creído muy bien.

Empecé a desayunar una simple galleta y un vaso de leche bien frío, al fin y al cabo no tenía nada de hambre, me daba un poco de arcadas oler la comida, o simplemente pensar en ella, pero debía comer. Encendí mi portátil y entré en mis redes sociales a perder el tiempo.

Después de comer, lo primero que hice fue estudiar un poco, no vaya a ser que se me olviden cosas mientras estoy fuera. Acabé de estudiar y disfruté al máximo de Internet, la razón por la que sigo viva y cosa que voy a echar mucho de menos. Son las doce de la madrugada, faltan dos horas para irme de esta jaula que va encogiendo poco a poco cada vez más. Lo primero que tengo que hacer es preparar lo que llevaré en la mochila: algo de ropa interior, alguna que otra prenda para no pasar siete días con la misma, una manta pequeña que tengo (aunque sea verano), un peine y alguna que otra cosa necesaria. Bien, ya tengo la mochila preparada, me falta el dinero. Fui muy despacio hacia la habitación de mis padres y rebusqué con demasiado cuidado entre los bolsillos de las chaquetas hasta encontrar dinero. Quizás era un poco exagerada con el dinero que cogí, pero imagina que no tengo para comer, ¿eh? ¿yo que hago? mientras sobre, mucho mejor. Bien, ya tenía el dinero, lo último era la nota, la jodida nota. Dirá así:

"Mamá, papá y hermanas, esto es una nota de despedida. No, no me he suicidado, me voy de casa una semana, sí. Estoy demasiado mal, mi depresión va de mal en peor y no hacéis nada por mí, no quiero sonar egoísta, pero deberíais preocuparos un poco más por mí. Estaré bien, no os preocupéis, de verdad, llevo navaja Suiza. No me busquéis ni nada, no estaré cerca de casa, ni de la ciudad, no llaméis a la policía, por favor, voy a estar demasiado bien. He cogido prestado dinero, os lo devolveré cuando pueda tener un trabajo. De verdad, no me pasará nada, sé cuidar de mí, lo sé porque lo hago todos los días, cuando os olvidáis que existo. No me he llevado el móvil, lo dejaré por la casa, no lo encontraréis. No sé dónde dormiré o dónde haré mis necesidades, pero voy a guiarme por... ¿instinto? No lo sé... Adiós, familia, en menos de una semana estaré de vuelta, necesito encontrarme, no sé quién soy, no sé qué soy, no sé nada de mí, solo sé leer fanfics en la famosa aplicación, Wattpad."

Con cariño, Yoora.

Os quiero familia. (o no, creo que os odio.)