Sonrió al cepillar el rubio, y ahora limpio, cabello de Daniel, quien cerraba los ojos del sueño. Después de haber comido, ella había logrado encontrar un hotel descente y rápidamente metió a Daniel a bañar. Ella creyó que el humano pondría objeción, que le daría vergüenza y la mandaría a esperar, pero no fue así. Al parecer no quería estar solo, bueno, ella tampoco, a decir verdad.
Después de desenredar el cabello del crio, fue a la mochila y extrajo una de las camisas de Justin, aun desprendían el aroma del primate y le encantaba que fuera así, quería tenerlo hasta que volviera a la Reserva, ahí le pediría perdón al macho y le rogaría por una segunda oportunidad, ya si él decía que no, ella lo entendería.
— Oye, ____. – Daniel se colocó la camisa, una vez ella se la dio.
— ¿Sí?
— ¿Por qué estabas sola? Las calles son muy peligrosas.
— Mira quien lo dice. – le vio divertida.
— Soy fuerte, puedo con ello.
— Sí, claro. – soltó un suspiro. – Voy a ir a mi antigua casa, voy a despedirme de mis padres.
— Vaya, tuvieron que haber sido muy buenos.
— Lo eran.
— ¿Y de quién es esta camisa? – señalo la prenda. – Es demasiado grande para ti y huele a hombre, ¿eres de esas mujeres que se visten de hombre?
— No... ¿cómo sabes de esas mujeres?
— Llevo mucho en la calle, pero no me cambies de tema. – se dejó caer en la cama, viéndola con mucha curiosidad, pero no llegaba a ser incomoda, era comprensible.
— ¿Para qué lo quieres saber?
— Bueno, ¿no es normal que quiera saber más de quien me va adoptar? – ella lo vio sorprendida, él arqueo una ceja. – ¿Me dejaras de nuevo en la calle?
— Claro que no, pero ni siquiera saber que soy.
— Eres una buena persona, supongo que con eso basta.
— No, Daniel, es diferente. – soltó un suspiro, tomando un lugar a su lado. – No soy humana, nada humana, a decir verdad, sólo porto la apariencia. – Daniel no le aparto la mirada. – ¿Has oído hablar de los Nuevas Especies?
— Siempre salen en la tele, Justice es mi favorito; si hubiera una figura de acción de él la compraría... ¿Eres una de ellos?2
— Soy como una prima, soy una Voraz, somos un poco más animales que ellos. – le acomodo un rulo dorado tras la oreja. – Hace dos años que somos parte de ellos y ellos son parte de nosotros, somos una familia y creo que te va a gustar mucho.
En los ojos grises del crio brillo la emoción cuando dio sentido a lo que ella había dicho, Daniel se lanzó a ella, abrazándola con fuerza y ella no dudo en corresponderle el abrazo. La emoción de dentro de ella, en su corazón y alma, se espacio por todo su cuerpo; se preguntó si Justin estaría bien con aquello. Ahora podía visualizarlo cargando a Daniel, enseñándole defensa y educándolo junto a ella, una familia en todo su esplendor.
Sabía que no debía pensar de aquella forma, sin antes haber conseguido el perdón del primate, pero le era imposible evitarlo. Lo quería, no estaba muy segura desde cuándo; pero estaba muy segura que había sido antes de entregarle el cuerpo, porque le había robado mucho más con una simple sonrisa o una simple mirada. Podía ser que estuviera confundida, que estuviera tan necesitada de cariño que...
Basta, no trates de confundirte. Puedes sentirlo el cómo late tu corazón con solo pensar en su voz.
Soltó un suspiro, beso la coronilla de Daniel y aparto las cobijas para que él se recostara, mientras ella tomaría un baño. Quería estar muy despierta antes de partir a las primeras horas del amanecer, no quería quedarse atascada en una tormenta, menos ahora con el crio, pues mientras ella podría soportar temperaturas muy bajas, él, con su baja condición física y de salud, no duraría nada.
ESTÁS LEYENDO
Jericho (Nuevas Especies #5) - Justin Bieber (ADAPTADA)
FanfictionJustin es... amable, dulce, ardiente, apasionado y más que un bien guerrero, tiene un buen corazón, pero ¿por qué no ha tenido compañera? Por sus ojos rojos. No son normales, dan miedo a todas las hembras y ellas se alejan, todas, bueno eso es lo qu...