Un final, un nuevo comienzo

Bonus track

HOLA MIS QUERIDOS AMIGOS, PIDO DISCULPA POR MI AUSENCIA, PERO BUENO COSAS DE LA VIDA NO PUEDO SEGUIR ESCRIBIENDO. NO ES UNA DESPEDIDA, NO ABANDONARE MIS PROYECTO.  COMO SIEMPRE PIDO PACIENCIA, SEGUIRÉ CON LO QUE MAS ME GUSTA HACER, DEJO UN PEQUEÑO FRAGMENTO, LES ADVIERTO QUE TIENE SPOILER, PERO QUIERO DEJARLE UNA PISTAR. PARA RESPONDER UNO QUE OTRO INTERROGANTE, DESDE YA GRACIAS POR SEGUIR A CELESTE. :d

Recuerden fragmento antes del capitulo 7.

En un recinto de un hospital, una luz de un tubo iluminación, que apenas da claridad a la basta habitación. En el medio del lugar hay varias camillas con bolsas negras. En la cabecera de cada una hay casco antimotín, la mayoría con signo de daños.

La tranquilad se termina, cuando una luz que emerge de una pared, surge la figura de dos personas.

Caballero: su gracia, llegamos. Le advierto que los esbirros de la muerte están en todos lados. Tenemos que ser breve y abandonar la habitación, porque este sitio tan frió.

Princesa: mi buen amigo y gran leal caballero. Como siempre tan elocuente, perdón por preocuparte. Creo que esto no llevara nada de tiempo.

Caballero: me parecen bien hagamos esto rápido. Este lugar me causa repulsión donde estamos.

Princesa: las personas llaman este edificio hospital, esta habitación es la morgue.

Caballero: porque se siente un frió.

Princesa: en este lugar se guardan los cuerpos de las personas que mueren.

Caballero: ¿Con que propósito?

Princesa: los guardan para preservarlo, el tiempo suficiente mientras se hagan los papeles para darle santa sepultura.

Caballero: preservar los cadáveres seria el sueño de un mago oscuro.

La delicada soberanía, luciendo un vestido dorado, su cabello negro azabache, suelto llegando hasta su cintura. Para caminar se aferra del brazo de su guardián, caminando hacia el centro.

Caballero: mi reina, que hay adentro de los sacos.

Princesa: son como ataúd temporales.

Caballero: puedo imaginar por esos raros yelmos que parecen frágiles, que los cadáveres son guerrero o caballeros.

Princesa: los cascos, así se lo llaman ahora a los yelmos, están hechos con un material. Más resistencia y liviano que el mejor acero que nuestro reino haya producido. Las personas que están adentro, serian como los guardias de los muros de la ciudad.

Caballero: ahora puedo comprender porque estamos en este lugar. ¿Estas preparada para lo que viene?

Princesa: es difícil asumir la traición de mi madre.

Caballero: será una dura cruz la que tengas que cargar.

Princesa: prefiero esto, que seguir viendo como asesinan las encarnaciones de mis hermanas. Presenciar como en vano se sacrifican sus caballeros en post de salvarlas.

Caballero: una ves que terminemos, mi sello se romperá y usted estará sola.

Princesa: como heredera soberana tengo la responsabilidad y el deber de terminar con estas muertes. Inútiles, sin sentido no puedo permitir que una guerra pasada. Contamine este mundo, que lagunas ves nos perteneció.

Caballero: tiene sentido porque mi señor te eligió a usted, renunciando su derecho como líder de su clan.

Princesa: espero que me puedan perdonar por mi egoísmo, terminara tu existencia.

Caballero: no tiene que disculparse, le debo mi vida. Si respiro es gracias a usted.

Princesa: en realidad gracias al milagro de Gregori. Que son salvo y nos da fuerza seguir en la lucha.

Caballero: dentro de estos sacos, elegiste a uno. ¿Cómo sabes que es el correcto?

Princesa: mientras estaba arrastrándose a orillas rió aquerante, aparte de poder escuchar me podía ver.

Caballero: claro, por orden de usted combatí contra pena, es muy fuerte pero sigue siendo una chiquilla. Le recuerdo que su amiga nunca nos perdonara por robarle su victima.

Princesa: amistad eres bueno para las bromas.

Caballero: en fin, no pongo en duda tu juicio.

Leal combatiente extiende su mano derecha, en la palma se materializa un pequeño cristal. En el interior se aloja una diminuta llama azul.

Caballero: se esta apostando, su mejor pieza.

Princesa: a veces hay que asumir riesgo, me a pena lo tenga que arrastra en un conflicto. Que es ajeno a el.

Caballero: claro que no, le das la oportunidad de volver a la vida, que se sienta afortunado por servirle.

Continuara....