En el punto de vista de Goku, fue algo muy rápido, le dieron un traje naranja, al menos fueron más cuidadosos pues aún tenía el yeso en el brazo y la pierna, un guardia lo acompaña a su celda, estas eran selladas y solo se podía ver a través del vidrio de la puerta, se metió a una celda y lo encerraron ahí dentro, una vez hecho eso ve a un hombre adulto que leía un libro, le mira y se acerca a saludarlo.
Hombre: Un gusto, me llamo Tamian, parece que seremos compañeros de celda.
Goku: Un gusto, me llamo Goku, que raro pensé que solo metían a gente muy cruel o atroz aquí, que te sucedió.
Tamian: Pff... por donde empiezo, será mejor tomar asiento, es un tanto complicado de explicar, verás tengo una hermosa esposa y una bella hija, era contador, un buen trabajo y una vida común, las dos eran la única razón de que yo siga viviendo, un día me llamaron en pleno trabajo, estaba enferma, mi bella hija Eris estaba tosiendo demasiado, pensamos que había sido un resfrío o algo, pero no paraba, la operación era prioridad, pero ni juntos teníamos el dinero suficiente para pagarlo, no me quedo más remedio que robar, a mi propia compañía, logré salir sin ser detectado o eso creí, ella podía ser operada, pero me detuvieron unos días después de la operación, condena de 10 años por robo a mano armada.
Goku: Vaya, pobre, pero tu hija está bien ahora?
Tamian: Sí, ella está mejor, pasó hace cinco años, todos los meses recibo una visita de las dos y verlas tan felices hace valer la pena todo esto, que hay de ti?
Goku: Pues...mi novia, ella tiene 16 años y ambos nos gustamos, tratamos de llevarlo como podíamos, pero no sirvió de nada, me arrestaron, para mi suerte ambos firmamos un acuerdo, que como ella también estaba implicada ella, tengo que pasar aquí el tiempo en el que ella tenga la mayoría de edad.
Tamian: Al menos saldrás antes que yo, escucha...hay horarios aquí para comer y dormir, también para salir al campo de recreación, te recomiendo mantener un perfil bajo aquí si quieres salir de aquí.
Goku: Gracias por el consejo, aunque con estos yesos dudo mucho que pase a lo grande, pero me sirve de todas formas, se supone que ella puede visitarme cada mes.
Tamian: Eso es bueno, es mejor que nada.
Un guardia abre la puerta y le mira a Tamian, tenía visitas, sonríe y sale de ahí dejando solo a Goku, se echa en la cama y trata de descansar, era muy dura e incómoda.
Por otro lado...
Kale: No, no te vayas, no quiero quedarme sola, crees que podamos ver una película en la computadora?
Caulifla: Por supuesto que sí Kale, como tu quieras, sabes algo, debo decirte algo, que le dije a Goku y no a ti.
Kale arquea una ceja, Caulifla juega con sus dedos y lo saca desde lo más profundo de su ser.
Caulifla: Soy lesbiana, tengo novia y llevo más de una año saliendo con ella, listo lo dije.
Kale: Ya me lo imaginaba sabes? Desde hace unos meses.
Caulifla: Qué???
Kale: No es muy difícil de deducir, como siempre hablas con una misma persona en el teléfono , pero no dije nada nunca porque yo respeto eso y si tu lo quieres mantener en secreto lo entenderé, porque seas lo que seas tu siempre vas a ser mi hermana.
Caulifla: Guau...y luego pienso que yo soy madura, pero tu lo eres más, anda vamos a ver esa película.
Un mes después...
Goku y Tamian estaban leyendo libros que la hija del último mencionado les regalaba, abren la puerta y se sorprende al ver que el guardia le señala a él, le sigue y le lleva a una cámara donde había una mesa, una silla, un teléfono fijo y una rejilla para pasar algunos objetos, al reflejo estaba ella, vestía un largo polo azulado y un jean negro, aretes de color plata, se sientan y ambos levantan el teléfono.
Goku: Hola Kale...
Kale: Que gusto me da oír que estás bien, te extraño mucho amor, quisiera que no estuviera este vidrio y poder abrazarte hasta quedarme dormida.
Goku extiende su mano y ella hace lo mismo, tocan el vidrio y el le responde.
Goku: Yo también, te extraño mucho Kale, de hecho quería decirte una cosa.
Kale: Sí?
Goku: Debajo del tapete, la llave, mi casa es tu casa, puedes usarla cuando quieras, para lo que necesites.
Kale: Pero...
Próximo Capítulo: El tiempo pasó