CAP2

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No les ha pasado que todo les sale bien unos días y que simplemente no quieres que se acabe?
Pues a mi si y me fascina, sin embargo esos días acaban, cuando creo yo que el destino se pone de acuerdo en hacerte mierda los días, no quiere que estés feliz, quiere verte sufrir , pero algunas veces llegan personas y lo mejoran, personas especial que importan en tu vida y piensas que no los quieres lejos nunca, a pesar de las peleas que tengan.

Me levanto del sofá toda despeinada ya que un sonido me inquieta, o más bien, un ronquido me inquieta, me levanto lentamente y me dirijo hacia mi habitación.
Hago un puchero a lo que entro a esta, ya que tengo que ordenar mis cosas en cada cajón y acomodar cada cosa alrededor del cuarto.
No es que sea una persona vaga, es solo que el hecho de abrir las cajas y colocar cada objeto, cada prenda de ropa en su armador o cajón, me causa pereza por el hecho de que recién me levanté, juraba que había guardado todo ayer pero fue solo mi imaginación.

{...}

Después de pasar toda la mañana, ordenando mi cuarto con la ayuda de Alana, decidí tomar una ducha, una larga ducha, y por larga me refiero a larga, así sea en una tina de baño o en cualquier cosa que le puedas decir ducha, siempre, me voy a demorar, cuando trata de baños, siempre tomo mi tiempo, pero creo yo que más me demoro es cuando salgo de tomar la ducha, ya que me tengo que poner cremas, exfoliantes, etc.
Salgo del baño en mi ropa interior que consiste en un bralette y cachetero negro, trato de secar mi pelo lo más que puedo con la toalla y la extiendo para que seque.
El sol comenzó a salir y me fije que la puerta de la residencia se abría y un auto llegaba a la primera casa de alado, la duplex, me quedo mirando a ver qué nuevo vecino o vecina tendré, un señor baja las maletas del auto, mientras veía como bajaban las cosas del auto me puse una camisa negra con un pantalón de rayas negro con blanco ajustado a la cintura acompañado de unas medias tobilleras blancas, justo cuando me iba a poner los tenis blancos Alana grita.

-Carajo Bellamy, ven mira esto!- Dijo gritando lo cual me asusto y me hizo reaccionar con un brinco, al parecer alguien ya bajo del auto pero yo no podía verlo desde mi habitación por que mi ventana no daba con la casa duplex .-Dios mío, como es que crean estos dioses.- dice la rubia a mi lado, mientras que yo veía al chico que bajaba del auto o más bien a los chicos, eran tres.

El primero en bajar tenía el cabello castaño claro, ojos oscuros y una mandíbula definida, desde lejos podías ver que era nadador ya que su espalda era ancha, llevaba una camisa básica gris la cual dejaba ver sus brazos y un gran tatuaje en la mano que lo podías notar a cuadras.
El segundo era rubio, y por rubio me refiero a rubio incluida sus cejas, piel pálida, pero labios coloridos, vestía una camisa negra con una chaqueta de cuero y unos jeans negros rotos en la parte de la rodilla.
El tercero, bueno el tercero apenas lo pude ver, este entro tan rapido a la casa después de colgar el teléfono, que no tuve tiempo de analizarlo, se veía que no carga buen humor este tipo, lo único que pude ver fue que usaba una camisa básica blanca y un jean negro acompañado de unas vans, no tuve tiempo de nada ni ver su físico y peor su cara, lo bueno es que lo veré en algún rato no? Después de todo es mi vecino.

{...}

Cuatro meses después.

-Dime si tuvieras alguna posibilidad con algún profesor cuál sería?- Dice la rubia mientras le da una lamida a su helado de fresa.

-Estoy entre el profesor Murray y el profesor Stewart, es decir Murray es más viejo pero es guapo, y Stewart es el más joven y si está bueno.- Digo y me pongo a pensar .-Pero bueno de que vale hablar solo son cosas, no es que me llamen la atención o me gusten, además uno tiene treinta y cinco y el otro tiene cuarenta, ambos casados, así que deja esas ideas tuyas en tu cabeza Alana, me asustas.- Río y ella ríe después le doy una lamida a mi helado del mismo sabor que la rubia estaba ingiriendo.

-Sabes, quien diría que tu madre y mi padre son hermanos, y nosotras primas, es decir.- Pausa ella para terminar su cono en una mordida y continua después de haberlo hecho .-Nosotras somos primas y ni por enteradas, como es que no lo comentaron en estos diecinueve años, y como nosotras no lo supimos? Así sea por un error o por andar de metidas en las cosas de nuestra familia.

-No es que yo haya sido una traviesa de chiquilla, yo era calmada Alana, y si lo hubiera encontrado, mamá posiblemente me hubiera dicho que era una imagen cualquiera, pero nunca encontré más que las imágenes de los siete, ni siquiera me dijo que tenía un tío, me hubiera gustado compartir contigo y con mi tío.- Digo suspirando .-Pero bueno de todos modos nos encontramos no? Eso es lo bueno de todo esto.

-Tienes razón, de hecho yo sabía de ti.- Dice y la regreso a ver.- Pero mi padre sólo dijo que eras esas niñas que venían en los cuadros de fotos, esos que compras y viene con una imagen para que sepas como queda con la foto el marco, algo no me olía bien pero nunca puse mucho interés en eso.

Después de conversar por horas, salimos del centro comercial, no comprendo porque Mamá no me contó sobre mi tío, es decir, se pelearon por algo eso yo se, pero eso no les da derecho a no contarme sobre que tengo una prima, y decirnos a la segunda semana que llegamos, es algo loco, la pelea que tuvo con mi tío tuvo que ser algo más, porque no creo que solo por una discusión, no le hable en diecinueve años.
De todos modos estoy feliz ya que conocí Alana, y bueno con mi tío aún no lo he visto, pero algún día lo haré no?

Después de un largo viaje desde el centro comercial a la casa, llegamos, la residencia ya estaba llena, bueno casi, solo faltaba el dueño de la casa que está alado de mi habitación, ya han pasado cuatro meses y no ha llegado, mañana hay una reunión de toda la residencia, en donde se ubica el patio, este da en la esquina de la residencia a un lado de la casa central, y si preguntan por los tres chicos, los únicos que he visto ha sido al castaño y al rubio, aún no he hablado con ellos pero se ven que son buenas personas, bueno al menos eso creo yo.
Alana no deja de hablar de como conoció al castaño, no deja de decir lo tierno y gracioso que es, que la ha invitado a pasar para conversar, tiene veinte años y al parecer se llama Damon, estamos hablando mas de un mes.

Después de eso Alana desaparece cada noche y me deja en casa sola, creo que sale con Damon, nada oficial aún, ya me lo hubiera dicho.
Me preparo algo de comer y voy al comedor, termino de comer mi comida, y lavo los trastes.
Voy a la sala y prendo la tv esta dando friends, no se en que rato paso pero lo único que vi fue a Phoebe dar a luz y me quede dormida.

Si Tan Solo Supieras.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora