Ann, una chica de 23 años que intenta dejar el pasado atrás y no volver a enamorarse. Todo iba bien, pero el amor se tuvo que poner en medio de nuevo, todo culpa de su nuevo vecino.
Me despierto por el sonido de la alarma, las 7:05, tengo que estar en la universidad en una hora..me levanto sin ganas y voy directa a la cocina, mi cuerpo me esta pidiendo a gritos un café o si no seré un zombie durante todo el día. Me lo preparo y me lo tomo mientras me pongo a ver la TV, creo que soy la única persona de 20 años que sigue viendo los dibujos animados mientras desayuna. Tras estar un rato con la vista fija y un poco dormida me doy cuenta de que solo faltan 15 minutos para que comience mi primera clase. Voy rápido a vestirme y me pongo lo primero que veo, unos jeans negros, una camiseta de Nirvana y una sudadera, guardo los apuntes y las gafas en la mochila y apto seguido salgo corriendo a clase con esperanzas de no llegar tarde.
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Siempre suelo ir en Longboard a la universidad, desde que me independice empecé a tener mas gastos y el dinero que me ahorraba en el bus me venía bastante bien. Llegué a mi edificio justo cuando sonó el timbre, sudando.. mucho. Entré a mi clase y me senté con Diana, mi compañera de sitio y mi mejor amiga.
- Hombre...dichosos los ojos, que vienes de las olimpiadas..toma anda- Me dice mientras se rie acercándome un pañuelo para secarme el sudor - Como comenzó la semana, a parte de sudada claro.
- Bien supongo, nada nuevo - Digo mientras me encojo de hombros.
- Pues tengo algo que va a cambiar ese "nada nuevo" por "Diana, te amo"- Me dijo con una sonrisa de oreja a oreja. Sinceramente, miedo me da.
- Sorpréndeme.
- Tará!!!-Grita mientras me enseña un panfleto de...¿una tienda?-Vaya emoción chica, nose, un gracias o algo.....
Al no entender nada de la situación me pongo las gafas y comienzo a leer el panfleto.
Bricool, tu ferreteria de confianza.
Se busca empleado/a para una jornada de tarde, de lunes a viernes.
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Os esperamos!
- Se que últimamente andas mal de dinero asique...me tome la molestia de ir, soy amiga del hijo del dueño y bueno, estas contratada!!
- Un momento...espera ¿que?¿Contratada?- Dije intentando no gritar de la emoción, llevaba buscando trabajo meses y nadie me contrataba, esto me iba a solucionar muchos problemas. - Dios Diana no se como darte las gracias - Dije abrazándola - Eres mis salvadora de verdad.
- No no no, esto me lo vas a agradecer saliendo el viernes conmigo, y no ha peros que me valgan, hace semanas que no salimos de fiesta, mi cuerpo ya esta shokeado de tanto estudiar...
- Diana...exámenes...trabajos.....
- Porfi porfi porfiiii, me lo debes - Me suplicaba mientras me ponía ojos y pucheros
- Ais de verdad....bueno venga, pero solo porque me conseguiste trabajo- Dije al final accediendo.
En cierto modo tiene razón, llevamos unas semanas de estudio intenso y nos merecemos aunque sea salir un poco a divertirnos.
La alegría duro poco, ya que unos segundos después entro la profesora en el aula, me esperaban unas 7 horas largas.
7 horas mas tarde:
- Acuérdate, a las 17:00, no llegues tarde, les hable muy bien de ti. -Decía Diana mientras subía a su autobús- Suerte!!- Apto seguido se cerro la puerta.
Me dirijí a casa, eran las 15:00, tenia que comer y ducharme rápido, como bien dijo Diana tenia que ser puntual, era mi primer día de trabajo y tenia que dar una buena imagen. Me monte en la tabla y me dirijí a casa, en unos 15 minutos ya estaba abriendo mi portal, y por lo que parece alguien se mudaba a mi edificio ya que estaba todo el hall lleno de cajas y el ascensor prácticamente igual, lo cual maldije ya que vivía en un séptimo y me tocaba subir por las escaleras. Subí las escaleras lo mas rápido que pude y cuando estaba ya en mi planta salio alguien de la puerta de enfrente y se choco conmigo haciendo que se le cayera la caja que llevaba encima.
-Ehh, ten mas cuidado, a ver si aprendemos a mirar por donde vamos!- Me regañaba el susodicho mientras guardaba todo lo que se había caído.
- Creo la que se merece una disculpa soy yo, usted fue quien salio sin mirar - Dije ayudándolo a recoger y sin aun mirarle a la cara.
Guarde el ultimo trasto y mire hacia arriba. Enfrente mio se encontraba un hombre el cual no había visto nunca en mi edificio, no pude evitar no fijarme en sus ojos, y a decir verdad en el, era bastante atractivo aunque podría sacarme perfectamente 30 años.
- Eh, bombón, te vas a disculpar o que- Me dijo con un tono enfadado mientras agitaba su mano enfrente mía.
-¿Perdón? Yo no tuve la culpa -Dije cabreada, y tenia razón, el era quien se me había abalanzado encima
-No tengo tiempo para chorradas, vete a la mierda -Dijo mientras me apartaba bruscamente y bajaba por las escaleras.
- Idiota - Murmure y abrí la puerta.
Nada mas abrir la puerta una bola de pelo enorme se me subió encima y se puso a lamerme la cara.
- Hola Omega! Como esta mi chico, como esta mi chico?- Dije mientras le acariciaba.
Omega era mi perro, un Malamute blanco y negro, ya estaba mayorcete, tenia 10 años, pero aun así mantenía una energía única.
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Una vez dentro de casa me dispuse a hacer la comida, gracias al idiota de antes he perdido tiempo, y encima se enfada conmigo, espero que no sea el nuevo vecino porque si no esto no va a ir bien.
Hola! Espero que les haya gustado el comienzo de la historia, intentare subir un capitulo cada semana, espero que la disfruten :)
