Mi Vecino (Jeffrey Dean Morgan)

５． Ｒｅｃｕｅｒｄｏｓ

Anna Pov:

Me encontraba paseando a Omega por el parque, llevábamos un rato largo de paseo y tocaba su parte favorita, jugar con la pelota, así que simplemente me limite a sentarme en el césped y lanzare la pelota hasta que se cansara. Me encantaba verle corretear de un lado para otro tan contento, es sorprendente como siendo ya tan viejito aun sigue teniendo tanta vitalidad.

En una de estas le lance la pelota demasiado fuerte y se desvió hacia el camino, y como no, Omega fue corriendo tras ella. Cuando lo logre encontrar vi que estaba jugando con un hombre el cual  sentado en un banco.

- !Omega!

Ya estando mas cerca divise mejor al hombre, iba con un chándal, gorra y gafas de sol. Mientras me acercaba me di cuenta de quien era. 

- Ey, hola- Dijo mi vecino mientras se levantaba del banco y se quitaba las gafas - Así que esta belleza se llama Omega..- Sonreía mientras lo acariciaba- Es precioso.

-Gracias...siento si le ha molestado- Dije disculpándome, no quería discutir como la primera vez que nos vimos. - Vamos Omega.

- Oh nonono, para nada me ha molestado no se preocupe. Es un perro muy simpático.

Me quede callada, me imaginaba una reprimenda y la verdad que estaba siendo bastante ¿agradable?. No parece la persona con la que me choque el otro día. Simplemente me limite a sonreirle. El seguía  acariciando a Omega y se produjo un silencio incomodo, no pude evitar volver a fijarme en sus ojos, eran preciosos. Bueno, a decir verdad el es bastante atractivo, ahora viendo su lado simpático cambia mucho su apariencia la verdad. 

- Bueno...-Comencé hablando- Así que... ¿conociendo un poco el barrio?

- Se podría decir - Esta vez ya dejando a Omega y mirándome a mi- Es una buena zona.

- Sep, si se ha mudado por la tranquilidad, este es su sitio. -Dije sonriendo - Bueno, ya si que le dejamos de molestar que Omega parece que se ha encariñado con su deportiva - Omega se encontraba literalmente chupando sus zapatos, lo que ocasiono una risa de ambos. - Cualquier problema que tenga nos tiene en la puerta de enfrente - Dije sonriendo y poniendo la correa a Omega- Vamos chico.

Cuando estaba apunto de irme el me tomo ligeramente del brazo.

-Espera-Dijo mientras se rascaba la nuca- Esto...creo que te debo una disculpa, ya sabes por lo del otro día, me comporte como un cretino, tu no tuviste la culpa del golpe.

- No se preocupe, a decir verdad yo tampoco me comporte de forma muy educada con usted.

- La mande a la mierda - Reitero con una sonrisa inocente.

- Y yo lo llame idiota. ¿En paz? - Dije riendo mientras le ofrecía mi mano 

- En paz - Y la estrecho.- Y bueno, ahora que ya no hay odio de por medio, podre saber su nombre o solo esta permitido el del perro - Dijo sonriendo.

-Anna - Dije riendo- Y usted es...

-Jeffrey, y por favor, tráteme de tu, no me hagas sentir mas viejo.

- Trato.

- Espero que ya no me recuerdes como el vecino amargado.

- Me costara, pero haré el intento -Dije bromeando.

- Pues Anna y Omega, me despido, me alegra haber arreglado todo - Dijo mientras se ponía las gafas- Nos vemos en los rellanos supongo. - Y tras esto, se despidió y se fue.

La verdad que mi primera impresión de el aquel día era muy distinta  a la de ahora, no me imaginaba teniendo una conversación agradable y sobre todo bromear con el, me ha sorprendido para bien. Me alegro, al fin y al cabo es mi vecino y no quería tener malos rollos, ademas, quien sabe, a lo mejor acabamos siendo amigos y todo.