FUCKING GIRLS - Camren. CANCELADA

Two.

—¿Estás segura que quieres hacer esto? - Dua sonaba cómo si fuese a tener un ataque en cualquier momento —Si el padre de estas mujeres se dan cuenta de lo que estamos planeando creo que la muerte será nuestro destino...

—No seas exagerada, todo saldrá bien - Camila le tendió un vaso de whisky —Relájate.

En cuestión de segundos el vaso quedó vacío, las probabilidades de que esta vez todo saliera mal eran un millón de un millón. Las mujeres mayores eran más fácil de engañar, todas ellas estaban desesperadas por un poco de cariño, mujeres jóvenes cómo Megan Jauregui tendrían a sus pies al que quisieran. Dua comenzaba a sospechar que Megan no era aquella niña linda de la que hablaban los medios pues una noche antes habían mantenido una conversación un poco... extraña, inocentemente Megan había puesto dura a la británica. Dua seguía creyendo que llegar al extremo de un matrimonio era una pésima idea, mientras que Camila veía cada vez más cerca la posibilidad de no tener que engañar ni estafar a nadie más, para ella no sonaba tan loca la idea de anclarse a la vida de una de las Jauregui's.

—¿Ya nos vamos? - Preguntó Dua cuando vio a la morena tomar sus cosas.

—Haremos una parada en algún bar antes... - Le dio una mirada dura —Estás muy nerviosa y lo puedes arruinar, Dua - La mencionada le mostró el dedo medio —Además, no vamos a llegar temprano o nos veremos desesperadas por ellas.

—Es una locura.

—Dua... - La morena encaró a la mujer nerviosa —Sólo dejaremos que las cosas fluyan, si para mañana por la mañana no estamos casadas con esas mujeres desistiré, ¿Estás bien con ello? - La británica asintió.

—Sólo vamos a divertirnos... - Camila sonrió.

Aquella sería una noche larga. Por supuesto que la latina dejaría que las cosas fluyeran pero digamos que, movería algunas piezas para que Lauren Jauregui fuera su esposa antes del amanecer.

Un par de mujeres mayores pero con cuerpos envidiables coqueteaban con Camila y Dua en el bar al que decidieron llegar cerca del Bellagio, con suerte y al menos, no se irían de Las Vegas sin un poco de capital en sus cuentas de eso no había duda.

"¿Me dejaras plantada? :("

Fue el mensaje que llegó para Dua.

Camila sonrió, era justo lo que esperaba que las Jauregui's esperaran con ansias por ellas.

Cerca de las once de la noche arribaron el lujoso hotel, con Dua un poco chispeante pero sobretodo sin una gota de nerviosismo, el alcohol da valor sin duda alguna.

—Creí que ya no vendrían - Megan sonrió coqueta para ambas, Camila sólo sonrió cortamente para después desviar la mirada. Dua se interpuso ante Megan besando la comisura de sus labios.

—Estábamos resolviendo algunos asuntos pero, no me iba a perder la oportunidad de conocerte - Murmuró cerca —Estás hermosa, por cierto.

Megan tomó la mano de la británica y les indicó que la siguieran, pasando entre personas completamente perdidas en alcohol y la música cómo para reventar sus tímpanos llegaron a una pequeña habitación donde estaban cuatro mujeres y dos hombres más, Camila reconoció a Lauren de inmediato y muy apenas pudo evitar jadear frente a todos, era mucho más sexy y hermosa en persona, las fotografías no le hacían justicia. Notó cómo Lauren parecía discutir con uno de los hombres y maldijo internamente, nunca pensó en la posibilidad de que alguna de ellas tuviese pareja.

—Chicas... - Megan llamó la atención de las cuatro mujeres quienes se acercaron de inmediato —Estas son Dua.. - Acarició el hombro de la británica mientras esta le sonreía con deseo —Y Camila - La mirada chocolate se cruzo con la mirada verde de Lauren y Camila juró que tenía posibilidad —Ellas son Verónica - Señaló una mujer con curvas increíbles, aquella mujer sonrió con malicia a Camila quien sólo asintió para ella —Dinah - Fue el turno de una mujer con el cabello teñido a rubio —Y Normani... ellas son nuestras más cercanas amistades - Dua no pudo evitar recorrer el cuerpo de esta última, era una mujer bastante hermosa —Y ella es Lauren Jauregui, mi hermana menor - La ojiverde reviró los ojos.