¡Contiene Spoiler de EndGame!
Tony ha estado en coma inducido por meses debido al chasquido, pero el mundo sigue avanzando mientras él duerme y Pepper se encarga de sus tres niños: Harley, Peter y Morgan.
Harley y Peter son un par de desastres que n...
Cuando acabaron de comer en la pequeña cafetería de la plaza, se dirigieron entre charlas triviales al parque. Una vez allí, se dirigieron a la zona infantil, donde estaban las atracciones para niños menores de 12 años.
Morgan quiso al instante subirse a la noria en miniatura mientras Peter y Harley se sentaban en un banco cerca de la atracción. Ambos se turnaban para hacer vídeos y sacar fotos, una promesa silenciosa para que Tony no se perdiese estos momentos lejos de su hija.
— ¿Estas bien? — Harley aprovechó para preguntar, su pulgar acariciando la mano de Peter unida a la suya.
— ¿Sí? ¿Por qué preguntas?
— Has vuelto a llorar — Peter quiso desviar su mirada hacia el suelo, pero Harley lo sujetó por la mejilla.
— No puedo evitarlo, simplemente tengo que ver a Tony para ... — Harley entendía el dolor de Peter, más de lo que nadie imaginara.
— Él se recuperará, sabes que es un cabezota. — Peter apoyó su cabeza en el hombro de Harley, ahora sus manos separadas pero la de Harley acariciando los rizos ajenos. — Peter — murmuró. Era un impulso estúpido el que estaba sintiendo, pero tenía tantas ganas de susurrarle al chico cuánto lo amaba.
No obstante, en ese momento Morgan corrió hacia ellos y se abrazó a Peter. La niña era pequeña pero había entendido que Harley prefería chocarle la mano a ser abrazado. En cambio, su otro hermano era tan afectivo como ella y adoraba ser achuchado.
— ¡Quiero algodón de azúcar! — Peter y Harley se miraron y rieron.
— ¿Dónde guardas la comida en ese pequeño cuerpo? Acabamos de comer. — Harley acarició el pelo de Morgan.
— ¡Siempre hay espacio para algodón!
— Está bien, está bien. Vamos a por él. — Ambos eran el prototipo de hermanos consentidores.
Cuando iban camino a la tienda debatiendo sobre el mejor color para el dulce, Morgan se fijó en una extraña máquina en forma de corazón con muchas luces.
— ¿Qué es eso? — preguntó y señaló la extraña máquina.
— Es una máquina del amor. Dos personas ponen sus nombres y les dice si hacen buena pareja.
— ¡Quiero! — Morgan salió corriendo a la máquina e intentó escalar por ella para llegar a los botones. Después, recordó que aún estaba aprendiendo a leer y escribir.
Harley y Peter llegaron en el momento justo para que Morgan no se cayese de espaldas y pudieran sujetarla.
— ¿Quién quieres que pongamos? — Harley preguntó mientras introducía una ficha en la ranura.
— Harl y Pete — Los chicos no pudieron evitar que el sonrojo se acumulase en su mejillas.
— ¿Por qué? ¿No prefieres ponerte a tí y Harley? — Peter preguntó con el nerviosismo atorado en su garganta.
— No, yo y Harl no somos pareja — dijo como si aquello aclarara muchas cosas a los adolescentes — . No puedo ser novia de Harl, ni de Pete, pero tú y él sí. — Peter quería esconderse en el primer hoyo que encontrase para no tener que ver a Harley a la cara, pero la curiosidad le ganó. Su cara estaba casi tan roja como imaginaba la suya y la cubría con su mano.
Momentos después, Harley introducía sus nombres en aquella máquina y Morgan estaba concentrada en el mensaje de "Calculando resultado" que aparecía en la pantalla, ajena a las miradas nerviosas de sus hermanos. Al cabo de unos segundos, un enorme corazón rojo rodeaba el "100% compatibles" que aparecía en el centro.
— ¿Uh? ¿Qué significa? — Morgan se giró para preguntar, pero lo único que pudo ver es a sus hermanos muertos de la vergüenza.
— Significa que son almas gemelas — Un agradable anciano de pelo blanco, bigote y gafas le explicó a la pequeña. El hombre rió al ver a los dos muchachos coger a la niña y salir corriendo. — . Quién fuera joven otra vez — y rió.
Morgan estaba sobre un caballo en el carrusel, se había negado a que Harley o Peter la sujetaran para que no cayese. Ambos se había preocupado al principio, pero Morgan no parecía tener problemas.
Peter seguía dándole vueltas al resultado en la máquina de amor mientras grababa a Morgan, quien con cada vuelta le hacía una cara distinta. No podía evitar reír ante sus gestos más bizarros.
— Peter — llamó Harley, un suspiro salió inmediatamente después — , no quería hacerte sentir incómodo al poner nuestros nombres en la máquina. — Peter entendió que Harley estaba intentando disculparse, otro punto que no era su fuerte. — Pero no voy a mentirte, — Harley se giró para mirarlo a los ojos, Peter dejó el móvil caer en su regazo. — me hizo feliz aquel resultado.
— Harley, no es que fuera incómodo — trato de explicar mientras su mente repetía en bucle el "me hizo feliz aquel resultado" — . Más bien me hizo muy feliz también, pero no sé muy bien cómo encararte después de eso. Ya sabes, mi cara aún parece un tomate cuando ha pasado más de media hora y me muero de la vergüenza. Pensaba que sería raro hablar cuando me siento así y he querido decirte que me gustas desde hace meses, pero — Harley rió, reconociendo aquellos balbuceos interminables de Peter cuando se ponía nervioso.
— A mi también me gustas — afirmó y, antes de que Peter pudiese comenzar otro discurso, se acercó para besarlo en los labios.
En ese momento, los dos olvidaron el lugar en el que estaban o la cámara en el regazo de Peter que los grababa y subía el contenido directo al servidor de Tony Stark.
Tras un breve momento se separaron para dejar salir un suspiro, el suficiente tiempo para sentir el ansia de besarse de nuevo con un cariño que demostraba cuánto se adoraban el uno al otro.
— Woah — Peter y Harley se quedaron estáticos cuando escucharon la suave vocecita infantil. Ambos admiraron aquella expresión que les recordaba tanto a Tony cuando algo le asombraba. — Sois novios. — Morgan hizo un puchero, claramente molesta por haberlo descubierto en ese momento.
— ¿Somos novios? — pinchó Harley a un Peter que había perdido la capacidad de hablar. Tal vez por el beso, tal vez por el título que debían compartir o tal vez por su amor correspondido. Tal vez fueran las tres.
— Sí — murmuró — quiero — Peter se recostó con su cara pegada al banquillo, tenía demasiada vergüenza para mirar a Morgan o Harley, pero podía adivinar la expresión burlesca y feliz del último.
— ¿No erais novios? — Morgan parecía confundida.
— Gracias a tí, pequeña princesa — Harley besó la mejilla de su hermana y, aprovechó la posición de Peter, para besar su nuca. Estaba seguro que ambos habían sentido el escalofrío recorrer su columna.
— Entonces, quiero otro beso — Los dos chicos compartieron una mirada y una sonrisa y besaron una mejilla de de Morgan cada uno. Los tres eran felices, tan felices que Peter podía comenzar a ver el mundo como Tony lo vería en esos momentos.
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Hola, nuevo capítulo por aquí. ¡Siento que sean tan cortos, pero lo compensaré con la cantidad! Los comentarios y kudos me animan a continuar, ¡así que muchísimas gracias por ellos! Comments and Kudos encourage me to continue, so thank you a lot for them!
