Camino de flores [Omegaverse]

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Tales palabras que mencionó durante la cena de los Strange fueron castigadas con la constante vigilancia de Jarvis y la prohibición de su padre de salir con libertad de los terrenos de la familia Stark. Tony se la pasó cabalgando en el bosque o viendo como su hermano no dejaba de pasearse por el lugar del brazo del hijo alfa mayor de la familia Strange.

Las visitas de la señorita April eran refrescantes y bien recibidas pero la molestia constante que su hermano Stephen no parecía estar de acuerdo en que su joven hermana se relacionara con él. Si no estaba observando detalladamente los entrenamientos de equitación de la joven April se encontraba juzgando esa actitud de libertad descarada que solía usar cuando se sentía en confianza.

Los días eran relativamente aburridos y tediosos, la espera le estaba matando ya que sabía que el ejército partiría en unas cuantas semanas hacer frente a la inminente guerra que se desataría en cualquier momento. no había tenido oportunidad de falsificar la firma de su padre y el tiempo se le estaba terminando.

—Aquí estas. —pegó un salto cuando Víctor Strange apareció en los establos, después de una lección para la señorita April esta había solicitado con mucha pena la oportunidad de darse un baño, Stephen quién se vio solo con él decidió llevar a uno de sus corceles dentro del bosque para dar un merecido paseo, realmente el alfa no lo soportaba y era mutuo. Él por su parte se encargaba de cepillar el cabello de Friday tomándose su tiempo en regresar a la mansión.

—Mi señor ¿Qué le trae por estos lugares? —dejando a un lado el cepillo que estaba usando bajo la cabeza e hizo un pequeño saludo doblando sus rodillas. Era propio de las doncellas y omegas saludar a los alfas sin excepción, sin embargo, Tony disfrutaba molestar al joven Strange ignorando su presencia la mayoría de las veces; en este caso no lo hacía, Víctor era el prometido de su hermano, un hombre bastante educado y respetuoso que se había ganado su afecto.

—Ese no es el Tony del cual Gregory habla con tanto amor —caminando por el establo el alfa miro la fila de caballos que se extendía por un amplio terreno, acercó su mano a U quién relinchó feliz cuando fue acariciado con demasiada ternura —¿Qué haces aquí? ¿Escondiéndote del gruñón de Stephen?

Tony vaciló en darle respuesta a aquella pregunta, si bien quería comenzar una relación de confianza con el futuro esposo de su hermano se sentía incorrecto comenzar a ser más amistoso con un alfa tan importante como lo era Víctor Strange, una vocecita de su cerebro le hizo recordar que él no sería nunca un omega común y el señor Strange le estaba dando la oportunidad sería bien recibida.

—No exactamente —se mordió el labio mientras se encogía de hombros —su hermano no es de mi agrado y estoy seguro que el sentimiento es mutuo. Solo estoy pasando el tiempo aquí, mis salidas han sido retiradas por mi "insolente" comportamiento durante la cena que sus padres ofrecieron. —Howard le había dado la reprimenda necesaria y si bien le divertía ver a su padre en estados de ira extrema, no gustó de ver a su hermano mayor totalmente decepcionado de su actitud.

—Eso puedo notarlo, Stephen, aunque tuvo una educación menos rígida que la mía aún conserva el pensamiento arcaico de que los omegas deben ser sumisos y tranquilos, de otra forma se escandaliza. Aunque creo que cuando te conozca mejor encontrará tu encanto muy particular —Víctor amplió una sonrisa alejándose un poco de U quién protestó cuando las caricias desaparecieron —¿Qué te parece si nos acompañas a Gregory y a mí al pueblo? No creo que tu padre me dé una negativa.

Sí, en definitiva, ya adoraba a su cuñado con todas las fuerzas de su alma. No impediría la boda cómo había sido su plan cuando Howard anunció que había encontrado prospecto de marido perfecto para Gregory.

—Eso, eso sería estupendo. —detuvo las ganas de abrazar a su cuñado, mientras salía corriendo hacia la casa para cambiar su atuendo de montar por algo más ligero y menos ostentoso. Se encontró a su hermano quién le dio una sonrisa suave al notar como estaba rebosante de alegría por salir de su enclaustramiento después de portarse mal.