Tras mi ventana me recuesto
Y cuento las gotas de lluvia.
Las que empapan los jardines,
Las que dan a luz las nubes.
Y piensas:
¿Te has dado cuenta,
de lo triste que es la vida?
¿De aquella luz de alegría,
que a veces damos por perdida?
Pero lo más triste de todo,
Y muy confuso ante sí,
Es que anhelamos en el mundo,
Lo que no podemos, pero deseamos.