¿Alguna vez les paso que sintieron que conocieron a alguien en el momento equivocado? En ese momento donde tu vida es un caos, donde no hay nada que ofrecer y todo está dado vueltas...
Dicen que las personas llegan en el momento justo y me parece que es un acto de consuelo para que no nos duelan esos momentos, esa idea de que tenía que llegar ahí y no otro día, pero en el fondo nos duele nos da bronca...
Quisiéramos que hubiesen llegado antes, o después, no en medio de la tormenta donde nuestras vidas solo es lluvia, porque sabemos que así se mojaran y no queremos y nos aprieta el corazón el dolor inmenso que eso provoca...
¿Les paso? Porque a mi si, y sentí que se caía mi mundo a pedazos, pero sabía que no quería a determinada gente cayendo conmigo, no quería que vean mis escombros dispersos, mis heridas abiertas, mi vulnerabilidad, y la única opción que tenía era sacarlos para que no vean todo eso y confiar que quizás la vida me daría una nueva oportunidad y me cruzaría en otro momento, pero también eso es un acto de consuelo porque sé que esa primera imagen de tristeza, de caos, de chistes malos se quedaría para siempre...
No creo que la vida te dé a la gente en el momento indicado, a veces creo que solo le gusta jugar a ver qué tan hábil somos para lidiar con cada cosa.
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Del fondo del cajón
Randomtodos tenemos un cajón donde guardamos lo malo, lo bueno, lo que no queremos contar, lo que queremos guardar para siempre... un cajón lleno de intimidades.
