Si alguien le preguntara a Hades cuál era su cosa favorita de su oscuro reino, él replicaría con una respuesta sencilla: el control.
Amaba el control que poseía cuando daba una orden y sus demonios tenían que acatarla sin protesta. Aquello le encantaba casi tanto como a la idea de ser temido y respetado hasta el punto de que nadie quisiera ir en contra de sus órdenes. Era una lástima que fuera de su reino careciera de ese respeto y poder, porqué más allá de los lúgubres muros del inframundo él no era relevante.
Durante toda su eternidad se había esforzado por sobresalir, pero nunca pudo lograrlo por más que lo intentara. Era como si las almas de su reino tiraran de él cada vez que quería alcanzar los gloriosos cielos. Estaba harto de todo, en especial de su presuntuoso a su hermano. Zeus era un Dios pretensioso, hasta ese día fue capaz de tolerarlo, sin embargó ahora no podía sentir nada más que repulsión hacia él. Porque no solo era el Dios principal del olimpo, sino que también era el creador que aquello que provocaba que su sangre hirviera y sus ojos estallaran en llamas.
Harry.
Ese mocoso había destruido casi todo su ejército en menos de treinta lunas. Asesino a sus monstruos y burlo todas sus trampas con audacia y valentía. Sus opciones se estaban acabando y no podía agotar todos sus recursos. Debía guardarse un par de trucos bajo la manga para su ataque hacía el Olimpo, por eso debía pensar con inteligencia.
Y para eso iba recurrir a un plan infalible.
Se levanto de su trono de piedra cuando escucho los murmullos haciendo eco entre los muros. No paso mucho tiempo para que Louis entrara acompañado de sus demonios, las sombrías rocas que rodeaban el lugar lucieron más iluminadas cuando él apareció. Él chico tenía la cara en alto y una ceja alzada, una expresión desafiante que lo hizo sonreír. Era admirable como después de haberlo encerrado por días aún conservaba ánimos para hacerle frente. Hades se quedó maravillado al ver que el encierro no había afectado su espíritu y tampoco su belleza. Estaba más delgado y muy sucio, pero continuaba viéndose maravilloso.
Era perfecto para su plan. Porque Louis era esa manzana de la discordia, por la que le mundo se condenaría solo por tener un bocado y Hades iba aprovechar eso.
—Veinte años más a tu condena por haber fallado en una misión tan sencilla—Hades sonrió encantado con el veneno que expulsaban sus palabras —. A este paso saldrás de aquí cuando tu precioso cabello se pinte de blanco.
Él Dios acaricio un mechón que se escapaba por la frente del muchacho, pero Louis lo aparto de un manotazo.
—Me seguiré viendo mejor que tú. —Replico él chico con arrogancia.
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Eternos ψ Larry
FanfictionHarry quiere volver a ser un Dios, Louis anhela su libertad. Ambos quieren cosas diferentes, pero sus caminos tendrán que cruzarse para lograr sus objetivos. Sólo uno obtendrá lo que desea. Fic basada en el mito de Hércules Idea de @-HazzalovesLou...