Breaking Stereotypes XI

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Si sus días, antes habían sido una tortura... ahora se habían convertido completamente en un infierno.

Desde que descubrió que el maldito Alfa defectuoso era su nuevo compañero de piso, lo primero que intentó fue quejarse en el lobby.

Explicó detalladamente que el imbécil había invadido su espacio metiéndose en su departamento en medio de la noche solo para molestarlo y que se negaba a tenerlo como compañero de piso.

Pero claro, se le olvidó un pequeño detalle.

El bastardo era el dueño.

Y obviamente volver a casa no era una opción. Así que contra su orgullo de Alfa decidió hablar con el otro e intentar llegar a un acuerdo de paz.

La cosa es que no habían llegado a nada, pues el imbécil de Jonghyun solo se la pasó coqueteandole y reusandose a dejar el piso. Kibum lamentablemente no tenía a quien acudir.

Así que pesadamente desde esa noche, Kibum había perdido la poca privacidad que tenía.

Ya habían pasado como máximo, dos semanas. Y pese a si le gustaba o no, su Alfa estaba acostumbrándose a la presencia del otro. Lo que no significaba nada bueno pues Kibum sabía perfectamente que el lobo buscaba someterlo y su propio Alfa acostumbrándose a la presencia de Jonghyun no hacía más que bajar sus defensas.

Justo como en ese momento...

Kibum se hallaba batallando para cerrar la puerta de su departamento como todas las jodidas mañanas. Sin embargo Jonghyun, desde la otra puerta del piso, se negaba a dejar de verlo fijamente como se había acostumbrado a hacer, no perdiéndose ni el más mínimo movimiento del pelirrojo.

Parecía un psicópata.

Y a pesar de que aquello irritaba de sobremanera a Kibum, su Alfa ya se había adaptado y al parecer ahora le daba completamente igual.

Lamentablemente Kibum sabía que eso era lo que buscaba Jonghyun, que bajara la guardia para que cuando menos lo esperara ¡PAAM! Volverlo un Alfa sometido.

Kibum no iba a dejar que eso pasara. Con o sin ayuda de su propio Alfa, no iba a dejar que lo sometieran.

–¿Quieres dejar de mirarme como un tarado?– dijo irritado.

Jonghyun ni siquiera se inmutó ante la queja, y siguió observando todas las facciones y el cuello del pelirrojo como si estos fueran lo más interesante del mundo.

Ante esto Kibum no pudo evitar enojarse mucho más –¿Siquiera oíste lo que te dije?

Pero Jonghyun simplemente ignoraba sus comentarios y seguía mirándolo embelesado.

Completamente ofendido y de alguna forma empezando a sentirse humillado, no pensó en las consecuencias de sus actos y simplemente lo hizo –¡Te estoy hablando animal, contéstame! usó su voz de Alfa.

Una reacción normal, hubiera sido que un Alfa de mayor fuerza, al escuchar la voz de sometimiento de otro, inmediatamente empezara un enfrentamiento.

Es más, Kibum se hubiera conformado con que el mayor simplemente le hubiera gruñido o mostrado los colmillos por su atrevimiento.

Pero definitivamente la reacción que tuvo Jonghyun hizo que el orgullo de Kibum se quebrara en mil pedazos.

Al escuchar la voz del zorro, Jonghyun finalmente reaccionó... ronroneando y sonriendo encantando.

–Lindo– comentó.

Los ojos de Kibum se aguaron.

Excitado... su voz de Alfa no había tenido ningún efecto en el otro más que excitarlo.

Nunca, jamás el pelirrojo se había sentido tan derrotado como se sentía en ese momento.

¡Maldición, él no era lindo, él era un Alfa!

Tomando su bulto caminó rápidamente a la salida del lugar, queriendo escapar de la incómoda y humillante situación.

–Oye, espera– cuando sintió la mano del lobo sostenerlo del brazo, al fin su Alfa reaccionó, sacando sus colmillos y enterrándolos en la muñeca del contrario –¡Aaah!

–¡No me toques!– y dejando atrás a un lastimado y aturdido Jonghyun, salió de la habitación con ganas de que se lo tragara la madre tierra.





Tan pronto Minho lo vió entrar en su habitación con la muñeca ensangrentada, hizo lo que cualquier buen amigo haría...

Burlarse.

–Jajaja en serio, el chico te tiene como goma de mascar– dijo entre risas mientras su amigo gruñía y tomaba asiento en la cama del león –Es que, hagamos un recuento... Primero en la palma de la mano, luego en la boca y ahora en la muñeca, eres como su afilador de colmillos– Jonghyun comenzaba a molestarse por la irritante risa parecida a una metralladora de su amigo –Me atrevería a apostar en que él será quien te muerda el cuello primero.

El Alfa lobo gruñó irritado, recibiendo el paño húmedo que Minho le lanzó, comenzando a limpiarse el liquido carmesí en su muñeca.

–No vine para tus payasadas, ¿Dónde está Jinki?

Minho se encogió de hombros e iba a contestar, pero una nueva voz entrando por la puerta no le permitió hacerlo.

–Kim Jonghyun– ambos Alfas miraron intrigados al Omega aparentemente enojado que venía entrando –¿Puedo saber por qué Taemin reclama que tiene una cita conmigo?

Y Jonghyun suspiró exhausto.

Después de dos semanas, tenía explicaciones que dar.

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Creo que dure más de lo esperado en actualizar, pero ustedes me perdonarás porque son muy lindas, yo lo sé (~ ̄³ ̄)~

Espero que estén haciendo su cuenta regresiva para el regreso de pimpollo 😭😭♥️

Breaking Stereotypes [Jongkey]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora